BALANCE DE 2006 Y PERSPECTIVAS PARA 2007

La mejora en la recaudación tributaria es elocuente a lo largo de 2006 si no se toma en cuenta la tasa de inflación subyacente, dado que a valores constantes si bien la situación es buena, ya no lo es tanto.


Durante el año 2006 la recaudación ha crecido rotundamente a nivel nacional. Se espera un superávit primario que rondará los $ 23.000.- millones, y la recaudación total a cargo de la AFIP superará los $ 150.000.-, unos 17.000 millones más que el total presupuestado. El superávit representa algo más del 3% del PBI antes de intereses, lo cual permite a su vez para proyectar sosteniblemente los pagos de la deuda. También un 25% más que lo recaudado en 2005.

Visto linealmente, estas cifras indican que la recaudación excedente equivale al 73% del superávit total primario. De manera que ha habido un incremento muy importante en el gasto público, sobre todo si tomamos en cuenta que el superávit total esperado era de unos $ 20.000.- millones.


La inflación subyacente (aquella que no se refleja en los índices y que corresponde básicamente a precios no controlados) superará el 15%, con lo cual una parte importante del incremento total de la recaudación corresponde al efecto inflacionario.

La prórroga de los impuestos cuya vigencia vencía a fin de este año (impuesto al cheque –por un año-, retenciones a combustibles -por cinco años-, etc.) indica la necesidad del Estado de sostener los llamados distorsivos para mantener el necesario superávit.

A nivel de los estados provinciales, el superávit ha dejado de ser tal en varios casos, entre ellos la provincia de Buenos Aires, que acaba de lanzar un paquetito de impuestos a la riqueza, que seguramente será aprobado en la legislatura local, para tratar de paliar el efecto del aumento del gasto. Los municipios por su parte continuarán con sus “tasas de abasto”, corregidas, aumentadas y copiadas cada vez más, como forma de incrementar su recaudación.


Dado que el próximo es año electoral, cabe esperar un incremento del gasto que contribuirá a acelerar el proceso inflacionario, que es obvio que no se detiene con controles de precios, como lo demuestra el hecho de que la inflación esperada para 2006 rondará el 10% contra algo más del 12% del año anterior, donde la intervención del gobierno en el comercio era mínima comparada con la actual.

Buenos Aires, 16 de diciembre de 2006 HÉCTOR BLAS TRILLO

ESTUDIO

HÉCTOR BLAS TRILLO

Contadores Públicos

Economía y tributación

Godoy Cruz 2870 – 1425 Buenos Aires

Tel (011) 4776-1732 o (011) 154-4718968