El Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) acaba de publicar el informe anual de Desarrollo Humano (DH) colocando, una vez más, a Argentina dentro del grupo de naciones con "alto" DH. ¿Puede calificarse así a un país con más del cuarenta por ciento de su población sufriendo carencias y donde uno de cada cinco habitantes no cuenta con los medios suficientes para alimentarse?
En el mencionado informe Argentina ocupa el puesto 34 de una muestra que abarca a 177 naciones de todo el mundo encabezando el grupo latinoamericano de alto desarrollo, seguido por Chile (37), Uruguay (46), Costa Rica (47), Cuba (52) y México (53).
Sólo la arbitrariedad (no carente de intencionalidad) en la elección de indicadores y cierta insensibilidad estadística pueden hacer que Argentina comparta la clasificación de vanguardia con paises como Noruega, Japón y España y permita a los gobernantes de turno y alguno que otro cándido regodearse con la idea de formar parte del "primer mundo" o encabezar el ranking de las naciones latinoamericanas. Más patético aún resulta el caso de México, igualmente clasificado como de alto DH a pesar de que más de una cuarta parte de su población percibe ingresos inferiores a dos dólares diarios.
De allí el cuestionamiento a la utilización del calificativo "alto" que complementado con el termino "desarrollo" tiene un claro sentido de valoración positiva que desnaturaliza la realidad y constituye una verdadera afrenta a los numerosos contingentes de población que sufren cotidianamente todo tipo de privaciones en estos paises.
Como se elabora el IDH
El Índice de Desarrollo Humano (IDH) es un indicador que clasifica a los paises en tres grupos (desarrollo humano alto, medio y bajo) atendiendo a los logros promedio alcanzados en materia de salud, educación y economía, medidos respectivamente por:
- La esperanza de vida al nacer, en el caso de la salud,
- Una combinación de tasas de alfabetización y de matriculación, para la educación, y
- Un PBI per cápita adaptado según poder adquisitivo, en economía
Sin duda el IDH es una forma de medición del bienestar un poco más amplia que el clásico ingreso per capita pero sigue adoleciendo del serio defecto de ser poco representativo para el conjunto de la población, lo cual resulta una deficiencia seria para el caso de paises muy segmentados por la regresiva distribución de ingresos, como es el nuestro.
Cualquier estudio serio sobre desarrollo debe necesariamente incorporar indicadores de distribución de ingresos, no como un complemento estadístico sino como insumo sustancial del análisis. Lamentablemente, vivimos la influencia de un economicismo restringido e interesado que descalifica la búsqueda de justicia social en aras de una supuesta eficiencia. Esta postura se refleja, entre otros, en la actual presión de EEUU por restar importancia al compromiso asumido en las Metas del Milenio de erradicar la pobreza.
Equidad y Desarrollo
En el cuadro que se muestra a continuación se comparan los ingresos anuales per capita, en dólares equivalentes (ajustados por poder adquisitivo), de Noruega, Japón, España y Argentina, ubicados, respectivamente, en los puestos 1, 11, 21 y 34 del IDH. La tabla permite apreciar el ingreso medio nacional y de los sectores más pobres y ricos de la población de cada país, así como las brechas que separan las puntas.
| INGRESOS ANUALES PER CAPITA EN U$S EQUIVALENTES | BRECHAS | |||||
| Media Nacional | 10% más pobre | 20% más pobre | 20% más rico | 10% más rico | 10% + rico vs 10% + pobre | 20% + rico vs 20% + pobre |
Noruega (1) | 37,000 | 15,000 | 18,000 | 70,000 | 87,000 | 6 | 4 |
Japón (11) | 28,000 | 13,000 | 14,000 | 51,000 | 62,000 | 5 | 4 |
España (21) | 22,000 | 6,100 | 8,200 | 44,000 | 55,000 | 9 | 5 |
Argentina (34) | 12,000 | 1,100 | 1,800 | 33,000 | 44,000 | 40 | 18 |
Elaboración propia sobre la base de datos del informe de Desarrollo Humano del PNUD
De la lectura del cuadro se desprenden algunas conclusiones de interés:
- Las brechas entre el ingreso medio de los más ricos y los más pobres son brutales en Argentina: la diferencia entre "picos" y "valles" alcanza a ¡¡¡40 veces!!!, mientras que en el resto no supera las 9 veces. Resulta obvio que el concepto de alto desarrollo no puede estar asociado a tan grotesca falta de equidad.
- Los más pobres argentinos son muchisimo más pobres que los más postergados de los paises de vanguardia, a diferencia de los más ricos que gozan de un bienestar similar. Los más pobres de España tienen un poder de compra 5 a 6 veces mayor que los nuestros mientras que la brecha entre los más ricos es de sólo un 20%.
El desafío es nacional
La experiencia de las naciones más desarrolladas indica que para alcanzar el bienestar colectivo distribuir resulta tan importante como crecer. Es más, existen variados argumentos que avalan la tesis que vincula el crecimiento con una mejor distribución de ingresos.
Mejorar el bienestar de los más pobres y aplanar la actual topografía de ingresos es teóricamente simple, pero muy difícil de llevar a la práctica por la fuerza de los intereses en juego y la falta de voluntad política de las dirigencias.
A efectos ilustrativos se señala que en nuestro país la brecha entre las puntas podría reducirse de 40 a sólo 8 veces si se transfiriera a los más pobres, vía impuestos, un diez por ciento de los ingresos del decil más rico, permitiendo que el ingreso medio de aquellos se cuadriplique. De realizarse el mismo ejercicio entre los quintiles más rico y más pobre, la brecha entre ambos grupos se contraería de 18 a 6 veces y el ingreso del veinte por ciento más pobre casi se triplicaría. De esta forma estaríamos muy cerca del nivel de España.
Sin duda es más fácil para nuestra dirigencia victimizarse y recurrir a peroratas que buscan descargar culpas en terceros o "los de afuera" antes que asumir los cambios internos necesarios para mejorar la situación a partir del sacrificio de los argentinos que más tienen y pueden, como ocurre en otros paises. Este es el camino para un mejor desarrollo humano.
Por Alberto Pontoni. Setiembre 2005
- Blog de Clubmacro
- Inicie sesión o regístrese para comentar