Crisis Financiera

La Crisis de 1929

La Crisis de 1929 fue la crisis económica mas importante en la historia occidental. Comenzó con la caída de Wall Street en Estados Unidos, en 1929 y duró mas de una década.


Luego de un largo período de prosperidad económica, el jueves 24 de Octubre de 1929 (Jueves Negro) se derrumba la bolsa de Wall Street, presionada por problemas económicos de Estados Unidos y en el resto del mundo. La crisis se extendió rápidamente del sector financiero de Estados Unidos al resto de la economía y a otros países.


Durante los primeros años, la respuesta del gobierno de Estados Unidos fue débil. Millones de personas cayeron en la pobreza y la desocupación. El gobierno no brindó ayuda directa a las personas. El descontento era generalizado.

Marzo de 1936, California

Una madre con sus hijos. Los días anteriores se habían alimentado de la cosecha de los alrededores y de pájaros cazados por los niños

Luego asumió el presidente Roosevelt, quien tomó enérgicas medidas para salir de la crisis, además de brindar ayuda a los desocupados y pobres. Estados Unidos comenzó a recuperarse de la Crisis de 1929, pero en Europa la crisis persistía.


Hacia finales de la década del 30 aumentó la preocupación de una guerra mundial. Cuando Estados Unidos ingresó a la Seguna Guerra Mundial, la demanda aumentó y el desempleo en ese país bajó a niveles previos a la crisis.

Las Causas de la Crisis de 1929

Existen variadas y complejas explicaciones de las causas de la Crisis de 1929. Diversos factores económicos y sociales se influenciaron recíprocamente.

Entre las causas mas importantes se encuentran:

- La estructura económica establecida luego de la segunda guerra mundial, que se caracterizaba por tener a Nueva York como centro financiero mundial y el patrón oro como mecanismo de regulación de la oferta monetaria

- Las sanciones que se establecieron a Alemania luego de la segunda guerra mundial

- La falta de regulación del mercado de capitales en Estados Unidos

- La fuerte expansión de la economía de Estados Unidos. El consumo de bienes durables de producción financiado con deuda había causado un sobredimensionamiento de ciertas industrias y del sector bancario, y una burbuja en Wall Street.

La primera guerra mundial y la Crisis de 1929

Estados Unidos salió fortalecido de la primera guerra mundial. Nueva York se convirtió en el nuevo centro financiero mundial.

Al finalizar la guerra, los principales líderes de Inglaterra y Francia (ganadores de la guerra) se reunieron con la vencida Alemania para acordar los términos del fin de la guerra. En esta reunión se firmaría el Tratado de Versailles, que impondría fuertes sanciones a Alemania.

Keynes, prestigioso economista inglés y miembro de la delegación de Inglaterra, se retiró de la reunión indicando que las sanciones impuestas tendrían importantes consecuencias negativas para las economías de toda Europa, no solo de Alemania.

Luego de la guerra, muchos países restringieron fuertemente el flujo de inmigrantes provenientes de Europa, lo que provocó un aumento de la desocupación en Europa.

La Situación en Estados Unidos antes de la Crisis de 1929

En 1926 el PBI de Estados Unidos comienza a crecer rápidamente. Se ingresó en una etapa de fuerte crecimiento económico. Se vivía un clima de prosperidad.

La industria de bienes durables de producción florecía. Las familias se endeudaban para comprar autos, heladeras y otros bienes durables. Surgían nuevas fábricas y el desempleo era muy bajo.

El sector financiero también crecía. La escasa regulación permitió otorgar préstamos para invertir en la bolsa. Personas que desconocían el funcionamiento del mercado comenzaron a invertir en la bolsa.

Ante un posible recalentamiento de la economía y la creación de una burbuja financiera, la FED (Reserva Federal de Estados Unidos) decidió en 1927 aplicar una política monetaria mas restrictiva.

Esta nueva política monetaria no tuvo el efecto deseado de desalentar la especulación, pero sí subió la tasa de interés. Esto tuvo consecuencias negativas en el resto del mundo. En 1927 se derrumba el mercado de valores de Alemania. En 1928 se derrumbó el mercado de valores de Gran Bretaña y en febrero de 1929 el de Francia.

El clima de prosperidad parecía haber terminado y ya existían ciertos motivos de preocupación. Si bien los precios de las acciones seguían subiendo, la economía real se estaba desacelerando.

El Crac de Wall Street en 1929

En 1929, la enorme especulación comenzó a cobrarse sus primeras víctimas en Estados Unidos. A partir del 19 de Octubre de 1929 la bolsa de valores comenzó a tener pequeñas caídas seguidas de subas. Muchos comenzaron a seguir con interés la evolución de las acciones. Mientras algunos opinaban que las acciones estaban sobrevaloradas, otros decían que seguirían subiendo.

El Jueves 24 de Octubre de 1929 (Jueves Negro) se pusieron a la venta un gran número de acciones, mientras que la demanda era casi nula. Estalló el pánico en Wall Street y la bolsa de Nueva York cayó 11%.

Una multitud se agolpa en Wall Street para seguir de cerca el precio de las acciones

Un grupo de grandes inversores se puso de acuerdo para evitar la caída y durante el Viernes y el Sábado colocaron órdenes de compra que evitaron que la caída continuara durante los días siguientes. Pero este freno no se asentaba sobre bases sólidas y el Lunes 28 de Octubre de 1929 se produjo la caída mas grande de Wall Street: el índice Dow Jones bajó 13%. El día siguiente, el Martes 29 de Octubre de 1929 (Martes Negro), Wall Street cayó 12% mas.

La caída de la bolsa continuaría durante los siguientes meses. Recién en 1931 culminaría una caída que acumuló una baja de 89%.

La Crisis en la Economía Real

La caída de Wall Street terminó definitivamente con el clima de opulencia reinante. Las ventas de bienes durables, como automóviles y heladeras cayó. Las familias dejaron de endeudarse.

Ante la baja en la demanda, comenzaron a cerrar fábricas y el desempleo comenzó a aumentar.

La respuesta de Herbert Hoover fue débil. Pidió a los grandes industriales que no despidan gente y a los gobiernos federales que aumenten el gasto público.

Pero con a medida que la crisis continuaba, las grandes industrias disminuyeron las horas trabajadas y redujeron salarios. Las industrias mas pequeñas comenzaron a despedir.

Al ver la recaudación disminuida, los gobiernos federales comenzaron a reducir su gasto e incluso algunos entraron en default. No hubo un plan central para salir de la crisis.

La Crisis de 1929 en el Sector Financiero

En un primer momento, la mayor parte de los oficiales de la FED tenía la opinión de que la crisis haría que los bancos mas débiles caigan y que el sistema en su conjunto saldría mas fortalecido. En ese entonces, el sistema financiero consistía en una red de bancos que no estaban tan interconectados como ahora.

Cuando los primeros bancos comenzaron a caer, la FED no intervino. Las personas comenzaron a retirar su dinero de los bancos, por temor a nuevas caídas, lo que causó mas cierres de bancos que en un principio parecían sólidos.

La Ley Hawley-Smoot

Ante el aumento generalizado del desempleo y también porque el sector agropecuario también se vio afectado, Hoover firmó una ley que aumentaba las tarifas de importación.

Muchos países tomaron represalias comerciales y una ola de proteccionismo se expandió por todo el mundo. El comercio internacional disminuyó y la asignación de recursos entre los países se hizo menos eficiente.

El consenso entre los historiadores en que la Ley de Hawley-Smoot exacerbó la crisis de 1929 e hizo que se prolongue mas en el tiempo.

La Severidad de la Crisis de 1929

En 1932, el desempleo en Estados Unidos ya había aumentado hasta el 23.6%. El producto interno bruto seguía cayendo y la pobreza aumentando. El descontento era generalizado. Muchas mujeres comenzaron a buscar trabajo y adolescentes dejaban sus familias para buscar trabajo en granjas y zonas rurales.

Salida de la Crisis. El New Deal

Tras el fracaso de la administración de Hoover (1929-1933), el demócrata Franklin D. Roosevelt gana las elecciones y asume el 4 de marzo de 1933. En su campnaña, Roosevelt prometió mas ayuda directa a la población y medidas mas enérgicas para salir de la crisis.

Luego de asumir, tomó numerosas medidas de fuerte impacto. Rápidamente pasó leyes al congreso y en otros casos se salteó la aprobación del congreso para la implementación de diversas medidas, lo que le valió críticas de opositores. Pero gran parte de la población confiaba en el carismático Roosevelt, aunque tenía el rechazo de la burguesía.

El conjunto de medidas y programas implementados por la administración de Roosevelt se conoce como el New Deal (literalmente: Nuevo Trato). El New Deal se puede dividir en dos etapas:

1- Medidas que buscan reformar la economía. El conjunto de leyes elaboradas en la primavera de 1933

2- Medidas para brindar ayuda social a la población, tomadas principalmente a partir de 1935

Los tres pilares en los que se basó el New Deal fueron:

- Recuperación económica

- Reforma del sistema financiero

- Alivio para los pobres y los desempleados

Recuperación Económica

Las medidas mas importantes para recuperar la economía ante la crisis fueron:

- La devaluación del dolar, lo cual favoreció las exportaciones y permitió salir de la deflación.

- La limitación de cosechas con el fin de disminuir los excedentes de la producción de granjas. La Agricultural Adjustement Act indemniza a los granjeros de reduzcan las superficies cultivadas.

- Se crea la National Industrial Recovery Act (NIRA), que regulaba salarios y precios con el fin de establecer ciertos parámetros que logren estabilizar la economía ante la crisis. Establece convenios colectivos que garantizan un salario justo a los trabajadores, reconociendo sindicatos y sistemas de contratación colectiva.

- Se implementa un fuerte programa de obras públicas, la Tennessee Valley Authority (TVA).

Reforma del Sistema Financiero

Para evitar que en el futuro se repitan crisis causadas por la falta de regulación del mercado, se crean dos nuevas agencias encargadas de regular los mercados: la Securities and Exchange Comission (SEC) y la Federal Deposit Insurance Corporation (FDIC).

La SEC regulaba el mercado de valores estableciendo reglas para las transacciones en el mercado secundario. La FDIC protegía a los inversores, asegurando los depósitos de ciertos bancos ante eventuales caídas de bancos y regulando las actividades bancarias.

Ayuda Social

Se toman medidas para proteger a los desempleados y a los ancianos. Se fija la jornada laboral máxima en 40 horas semanales y se abole el trabajo infantil.

Gran parte de los programas del New Deal, además de ayudar a salir de la crisis de 1929, sentaron las bases del sistema de bienestar moderno.

Evolución de la Crisis

La economía de Estados Unidos comienza a recuperarse.

Se inicia un período de fuerte crecimiento económico que duraría varios años. Ya en 1937, la mayor parte de los indicadores se había recuperado a niveles previos a la crisis. Sin embargo, el desempleo se mantenía cercano al 15%, por el crecimiento poblacional y el aumento de la productividad.

En Europa la situación no era tan buena. Los presagios de Keynes parecían haberse vuelto realidad. Alemania sufría económicamente. El partido Nazi se ganaba el apoyo de la población y se culpaba a los costos impuestos en el tratado de Versailles. En 1933 Hitler asume como canciller y se establece un régimen totalitario.

El proteccionismo económico instalado principalmente por la política de Hoover afectó particularmente a los países que no tenían colonias para colocar sus productos manufacturados, como Alemania, Italia y Japón. Estos países invadieron territorios con el fin de anexarlos a sus economías. Japón invade Manchuria, Italia Etiopía y Alemania ocupa Checoslovaquia.

Las preocupaciones políticas aumentaban y el dinero fluye desde Europa hacia Estados Unidos, lo que contrajo aún mas la base monetaria en países europeos y expande la base monetaria de Estados Unidos.

Cuando estalla la Segunda Guerra Mundial, la demanda de los aliados en Estados Unidos aumenta y el desempleo comienza a bajar. Cuando Estados Unidos ingresa directamente en la guerra, luego de que Japón invada Pearl Harbour, el impulso por la guerra hace que el desempleo disminuya a niveles similares a los registrados antes de la crisis de 1929.

Conclusión

Podemos afirmar que la crisis de 1929 fue la mas grande de la historia occidental moderna. Lamentablemente, la crisis brindó numerosas lecciones en el terreno político, económico y monetario. Las primeras respuestas del gobierno de Estados Unidos fueron débiles y permitieron que la crisis se expanda rápidamente a todos los sectores y al resto del mundo.

Ante futuras crisis, como la crisis financiera de Estados Unidos de 2008, la respuesta del gobierno fue mas enérgica y en parte evitó que la crisis tenga un impacto tan fuerte.

Impacto Macroeconómico del Desempleo en los Países Europeos

ANDREA FABIANA MAC DONALD(*)


En el presente análisis, expondremos uno de los temas de importancia como es el impacto macroeconómico del desempleo en los países europeos cuya tasa de desempleo es crítica en países como Grecia y España cuyos porcentajes resultan alarmantes para el futuro del mercado laboral europeo, analizando los factores que han influido en la situación de crisis que atraviesa el mercado laboral europeo, llegando a nuestras consideraciones finales.

La Tasa de Paro o de Desempleo en el Mercado Laboral Europeo



Desde el punto de vista macroeconómico, la tasa de paro o de desempleo representa una variable macroeconómica que nos indica en que porcentaje de la fuerza laboral se encuentra desocupada o en busca de empleo.

Otra de las definiciones sobre la tasa de desempleo como el porcentaje de la población económicamente activa (PEA) que se encuentra desempleada pero en busca de empleo, siendo en consecuencia un indicador fehaciente sobre el estado del mercado laboral de un país o nación.


Por lo tanto, la tasa de paro o de desempleo es el cociente resultante entre la población parada y la población activa. Uno de los interrogantes que nos planteamos seria cuales son los factores que contribuyen al crecimiento de la tasa de desempleo, a los cuales consideramos que son de dos tipos:

1-Estructural: es debido a las rígidas normas aplicadas en la UE a la contracción laboral existente.

2-Cíclicos: Son debido a la falta de respuesta adecuada a los shocks de oferta laboral.

De ahí que el retroceso de la demanda de empleo se debió al descenso del poder adquisitivo y el bajo de inversiones provocado por la incertidumbre del petróleo. Al respecto, la OCDE (Organización para la Cooperación y el desarrollo económico, considera que la principal causa del desempleo son los diferentes comportamientos en factores institucionales y de regulación.

Es así como aparecen España, Grecia e Italia como los países que tienen un marco regulador más rígido en la UE en el mercado de trabajo. Las prestaciones por desempleo también provocan un aumento en la tasa de desempleo ya que cuando sean mayores las cantidades que se fijan para percibir a los desempleados, y si es mayor el tiempo de duración de estar parado, es mas complicado que un desempleado vuelva a ocupar un puesto de trabajo.

Otra de las causas del desempleo es la mayor carga fiscal que tengan las empresas y los empleadores ya que invertirán en menor medida en la creación de nuevos puestos de trabajo.

En cuanto a los tipos de paro son los siguientes expuestos en el siguiente cuadro:

 

EL PARO - TIPOS Y CLASES

 

 

FRICCIONAL

 

 

Información sobre oferta y demanda

 

 

Reducción del tiempo de inserción.

 

ESTACIONAL

 

 

Formación profesional

Movilidad

 

 

Aumento del Nro. de horas de trabajo de los estacionales

 

 

COYUNTURAL

 

 

 

 

Incentivos Fiscales (con riesgos de inflación).

 

 

Aumento del % de ocupados.

 

 

 

ESTRUCTURAL

 

 

Formación profesional

Modelo salarial

Modelo de negociación

colectiva .

 

 

 

Disminución del % de

desempleados

 

 

 

ENCUBIERTO

 

 

Información sobre el

mercado de trabajo.

Leyes contra la discrimi-

nación

Estimulo de la iniciativa

Empresarial.

 

 

Aumento de la población

activa.

 

 

 

 



 

Fuente: La cuestión del desarrollo sostenible en la Europa de los 15. Informe de la Unión Europea. Año 2009.

El Desempleo en los Países Europeos en la Actualidad – Crisis en el Mercado Laboral Europeo

En la actualidad, los países europeos están siendo afectado por las altas tasas de desempleo que se están registrando en los últimos meses, siendo una profunda preocupación para los trabajadores que no encuentran empleo constituyendo una serie crisis del mercado laboral europeo.

Se ha detectado que hay mas de 18 millones de personas que no tienen trabajo y que constituyen el 11,4% de la tasa de paro, siendo España uno de los países azotados por la caída del desempleo siendo el mismo del 25,1% según datos suministrados por la estadística EUROSAT.

Se considera que la Unión Europea (UE) que esta integrada por 27 países se ubica en la cima alta de desocupación, con niveles máximos que trepan hasta el 10.5 %. En conjunto, el Eurostat estimó que 25,466 millones de personas se encuentran desocupados de Europa, de los cuales 18,196 millones pertenecen a los países de la moneda única, marcando un ulterior aumento respecto de julio de 49 mil unidades en los 27 países de la UE y de 34 mil en los 17 de la Eurozona. En un desgranamiento de las mediciones europeas sobre el desempleo, la tasa de Italia durante agosto permaneció estable, ubicándose en un 10,7 por ciento y manteniendo el mismo nivel que se registrara en julio y junio, confirmándose la cifra más alta desde enero del 2004, cuando se iniciaron las mediciones mensuales.

En cuanto a la base anual, según informó ó el Instituto Nacional de Estadística Italiano (ISTAT), subió 2,3 puntos. En tanto, Grecia y España se posicionan como los países con el nivel más elevado de desocupación, con el 25,1 por ciento y el 24,4 por ciento, respectivamente. Las tasas de desocupación más bajas se registraron nuevamente en Austria (4,5 por ciento), Luxemburgo (5,2 por ciento), Holanda (5,3 por ciento) y Alemania (5,5 por ciento). El desempleo juvenil, por su parte, permanece en niveles altísimos, en un 22,8 por ciento en la Zona Euro (22,9 por ciento en julio) y en un 22,7 por ciento en la UE (22,6 por ciento en julio), con 5,458 millones de personas que se encuentran por debajo de los 25 años y que no tienen empleo, de los cuales 3,392 pertenecen a la Zona Euro.

En Grecia y España, más de un joven sobre dos está desocupado (55,4 por ciento y 52,9 por ciento, respectivamente), a diferencia de Alemania, Holanda y Austria, donde los índices son los más bajos de Europa, inferiores al 10 por ciento (8,1 por ciento, 9,4 por ciento y 9,7 por ciento, en cada caso). En agosto, Grecia superó a España por nivel de desempleo juvenil.

En la competencia por ver cuál es el país más arrasado por las políticas neoliberales implantadas a rajatabla por cada mandatario –a pedido de la Troika europea, formada por la Comisión Europea, el Banco Central Europeo y el Fondo Monetario Internacional–, Madrid cede el record negativo ante Atenas, con un porcentaje de un 52,9 por ciento de jóvenes con menos de 25 años sin trabajo. Y una tasa de desempleo juvenil que en agosto ascendió al 55,4 por ciento. Estas cifras no hacen más que confirmar que, en ambos países, son más los jóvenes desocupados que los que se desempeñan en algún sector productivo.

Por su parte en Italia, el porcentaje de los desempleados menores de 25 sin trabajo fue del 34,5 por ciento en agosto, con una leve disminución respecto del 35 por ciento que se registró en julio de este año.

En el otro extremo se encuentran Alemania y Holanda. Estas naciones, en cambio, mantienen el privilegio de ser los países con el más alto número de ocupados entre los jóvenes, ostentando un 8,1 por ciento y un 9,4 por ciento de desocupación, respectivamente, en un Viejo Continente donde miles de desempleados forman un ejército de hombres y mujeres que pugnan por un puesto de trabajo en una oferta laboral por demás escasa.

Siendo estas cifras por demás elocuentes, el mundo se encuentra ante el desafío de crear 600 millones de puestos de trabajo en el próximo decenio. Ello nos refleja que existe una profunda crisis el mercado laboral mundial ya que muestran escasa mejoría en lo que va en el año 2012, siendo cada vez mayor la desaceleración constituyendo un riesgo para las economías mundiales, siendo una de las consecuencias la creciente depresión en materia de inversiones perjudicando la creación de empleo existente en la actualidad.

Según un informe de la OIT (Organización Internacional de Trabajo) la relación empleo – población ha ido en caída ya que en el año 2007 era del 61,2% mientras que en el año 2012 es del 60,2% siendo la proyección de dicho organismo no muy alentadora ya que la tendencia hacia el año 2013 será más grave aún en los países europeos

Una de las causas directas a la crisis del mercado laboral europeo ha sido el escaso crecimiento del empleo en el mundo desarrollado y la baja productividad en las regiones en desarrollo, limitan la posibilidad de una recuperación más amplia y las perspectivas de crecimiento económico.

A continuación exponemos la siguiente estadística de la tasa de paro en los países europeos en la actualidad:

 

 

IMPACTO MACROECONÓMICO DEL DESEMPLEO EN LOS PAISES

EUROPEOS

 

 

 

PAÍS O REGIÓN

 

 

TASA DE PARO (DESEMPLEO)

 

ESPAÑA

 

25,1%

GRECIA

24,1 %

PORTUGAL

15,0 %

IRLANDA

14,9 %

ESLOVAQUIA

14,2 %

LITUANIA

12,9 %

BULGARIA

12,5 %

CHIPRE

11,7 %

ITALIA

10,7 %

FRANCIA

10,6%

UNION EUROPEA (27 países)

10,5 %

POLONIA

10,1 %

ESLOVENIA

8,4 %

DINAMARCA

8,0 %

FINLANDIA

7,9 %

SUECIA

7,8 %

BELGICA

7,4 %

RUMANIA

7,1 %

REPUBLICA CHECA

6,7 %

MALTA

6,5 %

ALEMANIA

5,5 %

PAISES BAJOS

5,3 %

LUXEMBURGO

5,2 %

AUSTRIA

4,5 %

Fuente: Informe suministrado por Eurozona – Año 2012.

En el presente cuadro, observamos como impacta la tasa de paro en los países europeos siendo los países más afectados España, Grecia y Portugal en materia de desempleo, seguidos por Irlanda, Eslovaquia y Lituania y los países que registran menores tasas de paro son el caso de Alemania, Países Bajos, Luxemburgo y Austria cuyos porcentajes rondan 5,5% al 4,5% respectivamente.

Por último, las posibles soluciones propuestas por la OIT (Organización Internacional del Trabajo) frente a la crisis del desempleo en los países europeos son las siguientes.

1-Coordinar las políticas a escala mundial: a los fines de evitar una mayor recesión del mercado laboral europeo, es preciso la aplicación de políticas efectivas y firmes tendientes a contrarrestar el crecimiento del desempleo.

2-La reparación del sistema financiero hace que haya más confianza y una mayor credibilidad, atrayendo capitales del exterior tendientes a la creación de puestos de trabajo.

3-Alentar al sector privado para que invierta a los fines de prever incentivos a los fines que las empresas inviertan en instalaciones, equipos y maquinarias.

4-Desechar las políticas fiscales excesivamente rígidas a los fines de no implementar una política de ajuste como lo han hecho España, Portugal y Grecia que no han dado resultados óptimos en los últimos tiempos en lo que respecta al mercado de trabajo que ha presentado fricciones en la oferta y demanda de mano de obra.

5-Resolver en el corto plazo los problemas en el sector financiero, permitiendo una mayor dinámica de las inversiones.

Consideraciones Finales

De acuerdo a lo expuesto, hemos llegado a nuestras consideraciones finales y son las siguientes:

1- La tasa de paro o de desempleo representa una variable macroeconómica que nos indica en que porcentaje de la fuerza laboral se encuentra desocupada o en busca de empleo.

2-En la actualidad, los países europeos están siendo afectado por las altas tasas de desempleo que se están registrando en los últimos meses, siendo una profunda preocupación para los trabajadores que no encuentran empleo constituyendo una serie crisis del mercado laboral europeo.

3- Hay mas de 18 millones de personas que no tienen trabajo y que constituyen el 11,4% de la tasa de paro, siendo España uno de los países azotados por la caída del desempleo siendo el mismo del 25,1% según datos suministrados por la estadística EUROSAT.

4- Grecia y España se posicionan como los países con el nivel más elevado de desocupación, con el 25,1 por ciento y el 24,4 por ciento, respectivamente.

5- Según un informe de la OIT (Organización Internacional de Trabajo) la relación empleo – población ha ido en caída ya que en el año 2007 era del 61,2% mientras que en el año 2012 es del 60,2% siendo la proyección de dicho organismo no muy alentadora ya que la tendencia hacia el año 2013 será más grave aún en los países europeos

6- Una de las causas directas a la crisis del mercado laboral europeo ha sido el escaso crecimiento del empleo en el mundo desarrollado y la baja productividad en las regiones en desarrollo, limitan la posibilidad de una recuperación más amplia y las perspectivas de crecimiento económico.

Autora: ANDREA FABIANA MAC DONALD

(*) Jefa de Trabajos Prácticos de las cátedras Análisis Económico y Financiero y de Derecho del Trabajo y de la Seguridad Social de la Universidad de Buenos Aires – Facultad de Derecho.

Una Propuesta de Solución a la Crisis de Deuda Pública

Autor: Josep Maria Franquet Bernis


Dr. en Ciencias Económicas y Empresariales. Dr. Ingeniero Agrónomo, EUR-Ing. Director del Centro Asociado de la UNED en Tortosa.

RESUMEN



En los últimos tiempos, tanto la prima de riesgo comparativa con la deuda germana como los elevados tipos de interés a pagar vienen representando acuciantes y recurrentes problemas para la deuda pública española. Por si fuera poco, el Gobierno ha solicitado recientemente la ayuda del BCE para que el fondo de rescate comunitario inyecte dinero en la maltrecha banca española.

El problema de la deuda pública tiene su origen en el salvamento de bancos, cajas de ahorro y empresas a consecuencia de la burbuja inmobiliaria que reventó en USA y poco después en nuestro país. Para poder financiar estos generosos “regalos”, algunos Estados se han tenido que endeudar más de la cuenta. Por otra parte, el BCE, durante largos periodos de tiempo no ha comprado deuda pública. Ésta es la razón de que la prima de riesgo española esté por las nubes. Mientras el BCE no compre deuda pública española, o no se tomen medidas adecuadas como las que aquí se proponen por el autor, ésta continuará siendo vulnerable a la especulación incansable de los mercados financieros. Estas medidas pueden concretarse en dos: a) la “REGLA DEL 10”, que afecta a los tipos de interés de la deuda y b) la “REGLA DE EQUILIBRIO” del flujo de deuda, que afecta al principal o nominal de la deuda.

Palabras clave: prima de riesgo, deuda pública, déficit público, mercados financieros, tipos de interés, subasta de títulos, especulación, reglamento comunitario.


Códigos identificativos según el Journal of Economic Literature (JEL): G01, G12, G15, G18, H62, H63

RESUM

Als darrers temps, tant la prima de risc comparativa amb el deute alemany com els elevats tipus d’interès a pagar representen greus i recurrents problemes per al deute públic espanyol. Endemés, el Govern ha sol·licitat recentment l’ajut del BCE per tal que el fons de rescat comunitari injecti diners a la malmesa banca espanyola.

El problema del deute públic té el seu origen en el salvament de bancs, caixes d’estalvi i empreses com a conseqüència de la bombolla immobiliària que esclatà en USA i poc després al nostre país. Per tal de poder finançar aquests generosos “presents”, alguns Estats s’han hagut d’endeutar més del compte. Altrament, el BCE, no ha adquirit deute públic durant un llarg període de temps. Aquesta és la raó de què la prima de risc espanyola estigui pels núvols. Si el BCE no compra deute públic espanyol, o no es prenen mesures adients com les que aquí proposa l’autor, el deute continuarà essent vulnerable a l’inesgotable especulació dels mercats financers. Aquestes mesures es poden resumir en dos: a) la “REGLA DEL 10”, que afecta els tipus d’interès del deute i b) la “REGLA D’EQUILIBRI” del flux del deute, que afecta el principal o nominal del deute.

Paraules clau: prima de risc, deute públic, dèficit públic, mercats financers, tipus d’interès, subhasta de títols, especulació, reglament comunitari.

SUMMARY / ABSTRACT

In the recent times, risk premium rate in comparison with the German bonds together with the high interest rates paid mean an important and recurring problem for the Spanish public debt. In addition the Government recently requested help from the ECB in order for the European rescue fund to bring money to the Spanish banks that are under severe difficulties.

The public debt problem has its origin in the need to give bail to the banks, savings banks, and other companies as a consequence of the real estate bubble that busted in the United States and afterwards in our country. In order to finance those “presents” some countries had to indebt themselves in excess. On the other side, the ECB, during a long period of time did not buy public debt. This is the reason why the Spanish premium rate is so high. If the ECB does not buy Spanish public debt, or the measures proposed by the author are not adopted, the Spanish public debt will be subject to the tireless speculation of the financial markets. Those measures could be confined to these two: a) “RULE OF 10”, that affect the debt interest rates, and b) the “RULE OF BALANCE” of debt flow, that affects the face value of the debt.

Key words: risk premium, public debt, public deficit, financial markets, interest rates, debt auction, speculation, European community by-laws.

Consideraciones previas

En los últimos tiempos, tanto la prima de riesgo comparativa con la deuda germana como los elevados tipos de interés a pagar vienen representando acuciantes y recurrentes problemas para la deuda pública española. Por si fuera poco, el Gobierno ha solicitado, en el verano del 2012, la ayuda del Banco Central Europeo (BCE) para que el fondo de rescate comunitario inyecte dinero en la maltrecha banca española (especialmente las cajas de ahorros regionales, afectadas por el estallido de la burbuja inmobiliaria). Sin embargo, la posición alemana choca frontalmente con la española, al aferrarse la cancillera Angela Merkel y sus adláteres a la doctrina de estabilidad del BCE, reflejada también en la limitación a conceder créditos que impone el Tratado de Lisboa en su artículo 123.

El Tratado de Lisboa, firmado por los representantes de todos los estados miembros de la Unión Europea (UE) en Lisboa el 13 de diciembre de 2007, es el que sustituye a la Constitución para Europa tras el fracasado tratado constitucional del año 2004. Con este tratado, la UE tiene personalidad jurídica propia para firmar acuerdos internacionales a nivel comunitario. Se diseñó para mejorar el funcionamiento de la Unión Europea (UE) mediante la modificación del Tratado de la Unión Europea (Maastricht) y el Tratado constitutivo de la Comunidad Europea (Roma). Algunas de las reformas más importantes que introduce el Tratado de Lisboa son la reducción de las posibilidades de estancamiento en el Consejo de la Unión Europea mediante el voto por mayoría cualificada, un Parlamento Europeo con mayor peso mediante la extensión del procedimiento de decisión conjunta con el Consejo de la UE, la eliminación de los tres pilares de la Unión Europea, y la creación de las figuras de Presidente del Consejo Europeo y Alto Representante de la Unión para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad para dotar de una mayor coherencia y continuidad a las políticas de la UE. El Tratado de Lisboa también hace que la Carta de los Derechos Fundamentales de la Unión Europea sea vinculante jurídicamente.

Por deuda pública o deuda soberana se entiende como el conjunto de deudas que mantiene un Estado frente a los particulares u otro país. Constituye una forma de obtener recursos financieros por el Estado o cualquier otro poder público, materializada normalmente mediante emisiones de títulos de valores. La deuda pública se define como un instrumento financiero de naturaleza pasiva para el ente territorial público emisor, que busca en los mercados nacionales o extranjeros captar fondos bajo la promesa de futuro pago o amortización y renta fijada por una tasa de interés en los tiempos estipulados por el bono.

Representa además un instrumento que usan los Estados para resolver el problema de la falta puntual de dinero, por ejemplo:

  • Cuando se necesita un mínimo de tesorería (dinero en caja) para afrontar los pagos más inmediatos (gasto corriente).
  • Cuando se necesita financiar operaciones a medio y largo plazo, fundamentalmente inversiones reales (gasto de capital).

Existen distintas formas de financiar un déficit público, al menos en el corto plazo. La más importante es el endeudamiento interno. En este caso, el Tesoro Público emite bonos que son adquiridos por agentes privados, no por el banco central. Esta forma de endeudamiento permite al gobierno sostener un déficit sin disminuir sus reservas ni tampoco aumentar la oferta monetaria.

La oferta monetaria es la cantidad de dinero que hay en circulación en una economía. La oferta monetaria no solo incluye el dinero líquido o efectivo (billetes y monedas en circulación), sino que además incluye el dinero bancario. La oferta monetaria se mide a partir de los agregados monetarios. El primer agregado monetario es la M1, también llamado como oferta monetaria en sentido estricto, y está formado por el efectivo en circulación más los depósitos a la vista. El segundo agregado monetario es la M2, también llamado oferta monetaria en sentido amplio, y está formado por el efectivo en circulación, los depósitos a la vista y los depósitos de ahorro. El agregado monetario utilizado en la Unión Monetaria es la M3, que incluye adicionalmente los depósitos a plazo, así como otros diversos componentes.

Tanto el déficit público estructural como el nivel de endeudamiento constituyen variables económicas muy observadas y valoradas por los analistas financieros internacionales. Son fuentes de inestabilidad y desconfianza en los mercados como consecuencia de la incidencia perniciosa que tienen sobre la evolución de la política económica de un país y sobre un gran número de variables y comportamientos de los agentes económicos. En efecto: a) un elevado, sistemático y permanente déficit público es una limitación al crecimiento estable a medio y largo plazo, que ejerce una presión al alza sobre los precios (inflación) y obliga a incrementar la presión fiscal limitando el crecimiento de las actividades privadas que conforman la base de la economía capitalista. Además, su financiación ejerce también una presión al alza sobre los tipos de interés, lo que perjudica los proyectos de inversión de la economía real, y b) la financiación ortodoxa del déficit genera una expansión de la deuda pública, con la consiguiente carga financiera del pago de los intereses, lo que origina uno de los fenómenos económicos más perversos al autoalimentar el déficit de los ejercicios subsiguientes.

Pues bien, desde la adopción del euro, España ha acumulado 666 mil millones de euros en déficits externos. De hecho, debemos remontarnos a mediados de los años ochenta del pasado siglo para encontrar el último rastro de superávits en las cuentas hispanas. Como no podía ser de otra manera, los déficits se han financiado con capital extranjero, causando un aumento considerable de los pasivos frente al resto del mundo, en su mayor parte, en forma de deuda. Dicha posición externa constituye, en estos momentos, una de las vulnerabilidades clave de la economía española pues suscita bastantes dudas acerca de la solvencia del país y, a la vez, exige un acceso continuado y sistemático a los mercados de financiación internacionales.

Un aspecto que reviste singular importancia a efectos de la política económica es el del plazo de duración del empréstito. En este sentido, existen diferentes tipos de títulos o activos de deuda emitidos por el Tesoro Público, a saber:

  • Deuda a corto plazo: se emite cada quince días en régimen de subasta, con un vencimiento inferior a un año y suele funcionar como una especie de letra de cambio, en este caso del Estado. En España la deuda a corto plazo está representada por las Letras del Tesoro. Dicha deuda se ha venido utilizando para cubrir necesidades de tesorería del Estado, o sea, los llamados “déficits de caja” que presentan coyunturalmente los presupuestos generales del Estado.
  • Deuda a medio plazo: cumple la misión de conseguir fondos para la financiación de gastos ordinarios; en España cumplen este papel los Bonos del Estado.
  • Deuda a largo plazo: tiene la misión de financiar gastos extraordinarios y de dilatada rentabilidad. Dentro del largo plazo puede tener una duración muy variada e incluso puede ser de duración ilimitada, dando lugar a la deuda perpetua. En España está representada por las Obligaciones del Estado.

Las cifras de la deuda pública española, europea y americana

Más que el valor absoluto de la deuda, un índice importante de la viabilidad económica y financiera de un Estado cualquiera (como se prescribe en el actual Pacto de Estabilidad y Crecimiento de la Unión Europea1) es la relación existente entre la deuda pública y el producto interno bruto (PIB). La expresada relación, en este caso, representa un índice o parámetro suficientemente significativo porque se considera que el Estado es capaz de restaurar su deuda pública, por ejemplo, a través de las tasas i/o los impuestos. También se viene considerando, a nivel europeo, que la condición básica para estabilizar y posteriormente reducir el volumen relativo de deuda en términos del PIB es anular el déficit primario, es decir, el déficit público corriente sin considerar los intereses. Y esto solo se puede conseguir congelando el crecimiento de los gastos sociales.

1 El Pacto de Estabilidad y Crecimiento (PEC) es un marco normativo para la coordinación de las políticas fiscales nacionales dentro de la Unión Económica y Monetaria (UEM). Se creó con el fin de mantener unas finanzas públicas saneadas, lo que constituye, sin duda, un importante requisito para el funcionamiento adecuado de la UEM. El Pacto consta de un componente preventivo y un componente disuasorio. Dado que la población europea está envejeciendo, al aumentar la esperanza de vida y tenerse menos hijos, los Estados miembros de la UE afrontan el reto de garantizar la sostenibilidad a largo plazo de las finanzas públicas teniendo en cuenta las consecuencias del envejecimiento de la población sobre el presupuesto. Para superar este reto, y considerando la importancia concedida a la sostenibilidad a largo plazo por la reforma del Pacto llevada a cabo en 2005, se establecen previsiones presupuestarias a largo plazo para la UE y se evalúa y controla la situación específica de cada Estado miembro (en el informe sobre sostenibilidad figura un análisis global). La sostenibilidad a largo plazo de la hacienda pública también se tiene en consideración a la hora de evaluar los programas de estabilidad y de convergencia.

Mientras los focos de atención iluminan la crisis de la deuda soberana europea, Estados Unidos ha intentado entre bambalinas establecer una senda fiscal que asegure la sostenibilidad de su deuda pública. Aunque los actores del drama son los mismos a ambos lados del océano Atlántico, esto es, el elevado déficit y la ratio de endeudamiento, la apuesta por el crecimiento en Estados Unidos escenifica una estrategia bien diferente al paradigma de austeridad imperante en el viejo continente. La fuerza del guión europeo ha logrado que, de momento, la trama estadounidense haya quedado en un segundo plano. Ésta, sin embargo, pronto podría ganar audiencia.

Estados Unidos clausuró el año 2011 con un déficit próximo al 10% y una deuda que se acerca peligrosamente al 100% del PIB, según estimaciones del Fondo Monetario Internacional (FMI). En el otro extremo, Alemania intenta reducir suavemente su deuda cercana al 81% a pesar de contar con un déficit estimado del 1,7%. Mientras, en España, el Gobierno actual justifica los programas de ajuste tras estimar el déficit de 2011 cerca del 8% y la deuda alrededor del 68’5% del PIB. Grecia, Italia, Irlanda y Portugal son los cuatro países europeos cuya deuda rebasa el 100% del PIB. Todo ello puede verse gráficamente en las figuras o cuadros siguientes:

CUADRO NÚM.: 1

DEUDA COMPARATIVA EUROPEA

Países

Año

Millones €

% PIB

España

2011

734.961,00€

68,50%

Alemania

2011

2.088.472,10€

81,20%

Reino Unido

2011

1.547.506,30€

85,70%

Francia

2011

1.717.256,00€

85,80%

Italia

2011

1.897.179,00€

120,10%

Portugal

2011

184.290,90€

107,80%

Austria

2011

217.398,70€

72,20%

Bélgica

2011

361.735,30€

98,00%

Bulgaria

2011

6.285,60€

16,30%

Chipre

2011

12.720,00€

71,60%

República Checa

2011

60.798,00€

41,20%

Dinamarca

2011

111.766,00€

46,50%

Estonia

2011

965,20€

6,00%

Finlandia

2011

93.030,00€

48,60%

Grecia

2011

355.617,00€

165,30%

Croacia

2009

16.089,10€

35,30%

Hungría

2011

72.134,10€

80,60%

Irlanda

2011

169.264,00€

108,20%

Islandia

2011

10.139,80€

98,80%

Lituania

2011

11.827,20€

38,50%

Luxemburgo

2011

7.785,90€

18,20%

Letonia

2011

8.617,80€

42,60%

Malta

2011

4.600,30€

72,00%

Holanda

2011

392.506,00€

65,20%

Noruega

2011

101.532,60€

29,00%

Polonia

2011

192.671,90€

56,30%

Rumanía

2011

44.607,30€

33,30%

Suecia

2011

150.483,60€

38,40%

Eslovenia

2011

16.954,40€

47,60%

Eslovaquia

2011

29.911,30€

43,30%

Turquía

2010

225.105,80€

42,40%

fuente: datosmacro.com

CUADRO NÚM.: 2

FUENTE: datosmacro.com

El libreto u hoja de ruta estadounidense busca utilizar la deuda para articular una política expansiva con la que volver a la ansiada senda del crecimiento. Ello permitiría pagar los intereses futuros de la deuda. En Europa, la estrategia es justamente la contraria: reducir el déficit y controlar la deuda, para que la economía, una vez libre de cargas y gravámenes, vuelva a crecer. Llegados a este punto cabe preguntarse: ¿cuál de ambas alternativas será la más acertada?

El nivel de deuda pública en España ha aumentado al 72,1% en el primer trimestre de 2012, pero sigue estando por debajo de la media europea, que escaló al 83,4% en ese mismo periodo, según datos procedentes de Eurostat2 recogidos por el Instituto de Estudios Económicos (IEE). Aunque la deuda esté por debajo de la media europea, el IEE cree que, en el caso español, no hay que olvidar que a este nivel de deuda hay que sumar la deuda de los hogares y de las empresas no financieras, dando lugar al cabo a una situación de deuda global preocupante. Además, la mayor parte de la deuda pública española se halla en manos extranjeras.

2El Eurostat (Statistical Office of the European Communities, oficina europea de estadística) es la oficina estadística de la Comisión Europea, que produce datos sobre la Unión Europea y promueve la armonización de los métodos estadísticos de los estados miembros. Dos de sus papeles particularmente importantes son la producción de datos macro-económicos que apoyan las decisiones del Banco Central Europeo en su política monetaria para el euro, y sus datos regionales y clasificación (NUTS) que orientan las políticas estructurales de la Unión Europea. El Eurostat es una de las Direcciones Generales de la Unión Europea y tiene su sede en Luxemburgo.

La deuda del conjunto de las Administraciones Públicas sobre el PIB quedará establecida, a final del año 2012, en el 79,8%, frente al 68,5% del 2011. El endeudamiento de la Administración Central pasa del 52,1% en 2011 al 60% este año. Según justifica el Gobierno español, este comportamiento se explica tanto por el aumento de la necesidad de endeudamiento derivado de la crisis económica, como por el impacto de la dotaciones al Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB), el fondo de amortización del déficit eléctrico (FADE), la partida para la financiación de los pagos a proveedores y la cuota española del préstamo concedido a Grecia por el Fondo Europeo de Estabilidad Financiera (FEEF). 

Por lo que se refiere a Europa y al primer trimestre del 2012, veamos que Grecia es el país con el nivel más alto de deuda (132,4%), seguido de Italia (123,3%) y Portugal (111,7%). En Irlanda, el nivel de deuda ha aumentado ligeramente al 108,55%, mientras que Bélgica se sitúa en 101,8%, Francia en un 89,2% y Reino Unido en un 86,4%. En Alemania, la deuda de las administraciones públicas llega a un 81,6%, mientras que Hungría se queda en 79% y Malta y Chipre se quedan cerca del 75%. A continuación, se sitúan Austria (73,5%) y el ya comentado caso de España (72,1%).

Con una deuda menor que la española están los Países Bajos (66,8%), Polonia (56,1%), Finlandia (48,7%), Eslovenia (47,7%), Eslovaquia (46,4%), Dinamarca (45,1%) y Letonia (44,6%). Los países con menor deuda pública, en términos de PIB, son la República Checa (43,9%), Lituania (42,7%), Suecia (37,2%), Rumania (36,3%), Luxemburgo (20,9%), Bulgaria (16,7%) y Estonia (6,6%).

Por otra parte, en nuestro país, los vencimientos de la deuda del sector público para el año 2012 están siendo del orden de 125.000 millones de euros, entre letras del tesoro, bonos y obligaciones del Estado, según el siguiente calendario (solo para letras y bonos):

CUADRO NÚM.: 3

CALENDARIO DE VENCIMIENTOS 2012

MES

NOMINAL

Enero

8.600’00 €

Febrero

14.300’00 €

Marzo

6.500’00 €

Abril

22.100’00 €

Mayo

5.700’00 €

Junio

5.700’00 €

Julio

7.300’00 €

Agosto

7.400’00 €

Septiembre

5.800’00 €

Octubre

26.300’00 €

Noviembre

2.600’00 €

Diciembre

2.200’00 €

TOTAL

114.500’00 €

FUENTE: J. Gispert en Diari de Tarragona

La perentoriedad de esforzarse para conseguir el pasivo relacionado está provocando algunas tensiones en el momento de captarlo, siempre que el BCE no haga de mediador y pueda calmar el apetito de los competidores (banca y Estado) colocando en el mercado una masa monetaria suficientemente significativa.

Puestas así las cosas, no parece que el nivel de endeudamiento público de nuestro país alcance cotas excesivamente alarmantes. Otra cosa bien diferente sería el endeudamiento privado, al que aquí no nos referiremos con especificidad. Es cierto que España tiene una deuda privada importante, pero esta deuda no la va a pagar el Estado, por lo que el ataque a la Deuda soberana española, que se está produciendo en los últimos tiempos, es exclusivamente de carácter político-financiero.

Como suele suceder en la viña del Señor, la deuda que ahoga a unos enriquece a los otros. Hace tiempo que Alemania es uno de los pocos países que se benefician de colocar títulos a tasa negativa, es decir, que el inversor en lugar de esperar una mayor rentabilidad de su dinero prefiere pagar una renta negativa y asegurar así el capital. Resulta obvio que en el clásico trinomio de las características esperables de una inversión financiera (Seguridad, Rentabilidad, Liquidez) la primera condición es la que prima en los tiempos que corren. Con ello, se le regala el dinero a Alemania y al objeto de compensar la pérdida se acosa a países como España o Italia para obtener más interés con el incremento de sus primas de riesgo y, de paso, se presiona al conjunto de la eurozona.

El “problema de la deuda pública”

Según el profesor Vicenç Navarro, catedrático de Ciencias Políticas y Sociales de la Universitat Pompeu Fabra, no existe plena conciencia en muchos círculos progresistas (ni, por supuesto, en los más conservadores) de que el llamado “problema de la deuda pública” es un fenómeno creado artificialmente para justificar el desmantelamiento del Estado del Bienestar. De hecho, la gran mayoría del crecimiento de la deuda pública en USA (el 67%) se debe a medidas de apoyo al complejo militar industrial, a la banca y a las rentas superiores. Sin embargo, ninguna de las medidas encaminadas a reducir la deuda pública está orientada a cambiar estas políticas. En su lugar, se intenta reducir el gasto público social, concretamente la Seguridad Social y los servicios sanitarios, y ello a pesar de que la Seguridad Social (las pensiones principalmente) no ha contribuido en absoluto al crecimiento de la deuda pública. El paralelismo de esta situación con la española resulta evidente.

El problema de la deuda pública tiene su origen en el salvamento de bancos y empresas a consecuencia de la burbuja inmobiliaria que reventó en USA y poco después en nuestro país. Para poder financiar estos generosos “regalos”, los Estados se han tenido que endeudar. El endeudamiento público en los países ricos romperá probablemente la barrera del 100% del PIB este año 2012 por vez primera desde la segunda guerra mundial, con lo que los Estados del mundo desarrollado deberán más de lo que producen sus países en un año, según reconoce el propio FMI.

El presidente del BCE ha reiterado, una y otra vez, que si España quiere que su prima de riesgo se relaje tendrá que firmar un nuevo memorándum de entendimiento (MoU), similar al ya vigente para recibir el cheque de hasta 100.000 millones de euros para tapar los agujeros de la banca nacional. Y ello implica rendirse a lo que le ordenen desde el FMI y la UE para pagar, primordialmente, a los acreedores de la deuda.

Por cierto que en el ámbito financiero, últimamente, han sobresalido el FMI y el Banco Mundial (BM) en sus afanes muy extensos de contenedores de las crisis económicas, hasta que demostraron, a partir del año 2007, su ineficiencia en la prevención y posterior ejecución de dicha labor. Ahora mismo, el juego en ese campo se halla en el privilegiado lugar que ocupan el Presidente de la Reserva Federal USA y el del Banco Central Europeo. Para aquellas instituciones, que en algún momento histórico pusieron las bases para la entrada en vigor de la Globalización económica con la liberación de los mercados, que llegaron a todas partes con su recetario de remoción de subsidios a la agricultura, a los alimentos, a las medicinas, etc., que prohijaron las privatizaciones, el libre comercio y el pago de las deudas, que propiciaron la especulación financiera, hoy su función práctica se reduce a la de operar como simples mecanismos anti-crisis, con un restringido recetario de austeridades, supresión de inversiones, reformas fiscales, despido de trabajadores privados y públicos, retraso en la edad de jubilación y recortes salariales y sociales de todo tipo.

No obstante, la limitación de su operación resulta obvia. Después de un período en que estas instituciones trataban sólo con los Gobiernos proclives del tercer mundo, ahora tienen que vérselas con una montante oposición de masas de los países desarrollados. Mientras, al trasladarse la crisis hacia el interior de las mayores economías, tanto el FMI como el BM se desvanecen progresivamente.

El FEEF -el mismo que ha rescatado ya de forma total a Grecia, Portugal e Irlanda- posee capacidad de comprar deuda en los mercados financieros primario (cuando un país vende la deuda por primera vez a los inversores) y secundario3. Ahora bien, ¿qué tipo de deuda comprará el FEEF?. Si intervienen en el mercado secundario, adquirirá la deuda soberana ya emitida por el Estado. En su fórmula como comprador en el mercado primario, el fondo podría comprar deuda en las subastas de cualquier administración pública (incluidas las comunidades autónomas y los entes locales, por ejemplo). Si bien la compra directa en las subastas está concebida esencialmente para facilitar la vuelta a los mercados de un país que ha sido objeto de un rescate total, España también podría solicitar que el FEEF actuara en el mercado primario. Las intervenciones sobre el primario y el secundario serían, pues, sinérgicas4.

3Todos los Valores del Tesoro Público se negocian en un mercado secundario muy activo en el que se intercambian Letras, Bonos y Obligaciones ya emitidos, y en el que participan la inmensa mayoría de los intermediarios financieros. Ello tiene una ventaja importante para el inversor: le permite invertir a plazos distintos de los 6, 12 y 18 meses de las Letras o de los 3, 5, 10, 15 y 30 años de los Bonos y Obligaciones. Por ejemplo, si el inversor desea invertir a 4 meses (un plazo al que el Tesoro no emite en la actualidad), podría adquirir una Letra a 6 meses que hubiese sido emitida 2 meses antes.

4El FEEF puede emitir bonos u otros instrumentos de deuda en el mercado con el apoyo de la Oficina Alemana de Gestión de Deuda para recaudar fondos necesarios para proporcionar préstamos a los países de la zona euro en problemas financieros, la recapitalización de bancos o comprar deuda soberana. Las emisiones de bonos están respaldadas por garantías otorgadas por los Estados miembros de la zona euro. El FEEF se puede combinar con préstamos de hasta € 60 mil millones del Mecanismo Europeo de Estabilidad Financiera (MEEF) y hasta € 250 mil millones del Fondo Monetario Internacional para obtener una seguridad financiera de hasta € 750 mil millones. Si no se realizan operaciones financieras, el Mecanismo Europeo de Estabilidad (MEDE) cerraría después de tres años, el 30 de junio de 2013. Sin embargo, el fondo de rescate fue activado en 2011 para prestar dinero a Irlanda y Portugal, por lo que el Fondo existirá hasta que su última obligación haya sido reembolsada en su totalidad.

En cualquier caso, lo cierto es que la estructura del Banco Central Europeo facilita la especulación. En efecto, el BCE puede prestar a los bancos privados a un interés del 1% pero sorprendentemente no puede hacerlo a los Estados, que han de recurrir a las entidades financieras privadas a través de deuda pública y a satisfacer unos intereses mucho más altos, con los consecuentes beneficios solo para estas últimas. De esta forma, los bancos privados pueden recoger préstamos del BCE a bajo interés y comprar deuda pública a intereses mucho más altos5.

5Las principales tareas del Banco Central Europeo son las siguientes: definir y ejecutar la política monetaria de la zona euro, dirigir las operaciones de cambio de divisas, cuidar de las reservas exteriores del Sistema Europeo de Bancos Centrales y promover el buen funcionamiento de la infraestructura del mercado financiero. Además, tiene el derecho exclusivo de autorizar la emisión de billetes de euro. Los estados miembros pueden emitir monedas de euro, pero la cantidad debe ser autorizada, de antemano, por el BCE. A diferencia del estilo de la banca central de los Estados Unidos, en el que la liquidez se presenta a la economía a través de la compra de bonos del Tesoro por parte del Banco de la Reserva Federal, el Eurosistema utiliza un método diferente en el que hay alrededor de 1.500 bancos elegibles que pueden pujar por contratos de reporto en corto plazo que va desde las dos semanas a los tres meses de duración. En efecto, los bancos piden prestado dinero en efectivo y deben devolverlo. Los cortos periodos de tiempo en la duración del préstamo permiten que las tasas de interés se ajusten continuamente. Cuando vencen los títulos de reporto, los bancos participan nuevamente. Un incremento en la cantidad de títulos que se ofrecen en la subasta de bonos permite un aumento de la liquidez en la economía, mientras que una disminución provoca justamente el efecto contrario. Los contratos se realizan sobre el activo del balance del Banco Central Europeo y los depósitos resultantes en los bancos miembros se contabilizan como pasivo. En términos simples, la responsabilidad del Banco Central es la del dinero, y un aumento de los depósitos en los bancos miembros llevado como pasivo del Banco Central, significa que más dinero se ha puesto en la economía.

Desgraciadamente, el BCE, durante largos periodos de tiempo no ha comprado deuda pública. Esta es la razón de que las primas de riesgo española e italiana estén por las nubes. Mientras el BCE no compre deuda pública española, o no se tomen medidas adecuadas como las que aquí proponemos, ésta continuará siendo peligrosamente vulnerable a aquella especulación. Que el BCE sea el organismo que puede hacerlo resulta así porque es la única institución que puede imprimir dinero sin límite alguno. Puede, por lo tanto, comprar tanta deuda pública como quiera o bien crea necesario.

El poder omnímodo de los mercados financieros

Se viene hablando últimamente de la “tiranía” de los flujos internacionales de capital en la determinación de los precios de algunos activos financieros que tienen una capacidad de incidencia substancial en la evolución de variables económicas reales y de su capacidad para “imponer” políticas económicas a los gobiernos (antes a los del tercer mundo; actualmente también a los del primero).

La experiencia de los años más recientes resulta un claro exponente de la sumisión antedicha. A la alteración de las relaciones financieras internacionales tras el colapso del sistema establecido en Bretton Woods6, a principios de los años setenta del pasado siglo se ha sumado una rápida expansión de los mercados financieros internacionales privados así como la eliminación de las restricciones a los movimientos de capital en los países industrializados que ha favorecido su integración. Precisamente, este hecho habría procurado específicamente la expansión de los flujos de capital que, pese a los fuertes desequilibrios exteriores que tuvieron lugar durante las anteriores crisis de 1973-1975 y 1979-1980, han tenido su máximo desarrollo a partir de 1982 y, más concretamente, a partir de las políticas neoliberales del tándem Reagan-Thatcher. La plasmación de este enorme crecimiento de los flujos de capital, aún más rápida si hablásemos en términos brutos, es un espectacular aumento del stock de préstamos internacionales (neto del efecto multiplicador vía depósitos por el sistema bancario). Otro reflejo de esa expansión de los flujos de capital son las transacciones en los mercados de divisas.

6Hasta el 1 de julio de 1944, la localidad norteamericana de Bretton Woods (New Hampshire), parecía ajena a lo que estaba pasando en un mundo asolado por la Segunda Guerra Mundial. Pero aquel mes, este pequeño enclave turístico, situado a los pies de la cordillera cuyos picos recuerdan los nombres de más de diez presidentes estadounidenses -entre los que destaca el imponente Mount Washington- acogió una reunión que uniría su nombre a la historia del capitalismo. Al hotel de Bretton Woods no fueron sólo los países capitalistas, pero la supremacía de los EE.UU. quedaría patente de principio a fin. Desde la elección de sede (relativamente lógica si se tiene en cuenta que la guerra todavía estaba lejos de acabarse en Europa) hasta los mismos acuerdos de la conferencia. El resto lo haría la Guerra Fría, que fue apartando paulatinamente de los acuerdos, entendidos como un sistema internacional de regulación del capitalismo, a los países donde se practicaba el socialismo real, relegándolos detrás del telón de acero. Desde el punto de vista de los acuerdos alcanzados entre los 44 países participantes -una cantidad nada despreciable si se tiene en cuenta que la mayor parte de Asia y África eran colonias europeas y que Europa se encontraba partida- la conferencia fue un éxito de EE. UU. Este país consiguió imponer su propuesta, formulada por el economista Harry Dexter White, ante la iniciativa británica, cuya paternidad correspondía al prestigioso John Maynard Keynes.

6La presencia de inversores extranjeros en los principales mercados financieros domésticos constituye un claro indicador de su grado de integración. Más significativa es aún la extrema rigidez con la que esa participación puede variar (al alza o a la baja) en períodos muy cortos de tiempo. El cambio que se ha dado en la naturaleza de los inversores resulta bien sintomático de la expresada integración. Progresivamente, han ido adquiriendo un rol determinante los denominados “inversores institucionales” (fondos de pensiones, compañías de seguros, …) cuyos procesos de diversificación de carteras estimulan esa cada vez mayor interrelación.

Una solución al problema

Los pagos por intereses de la deuda pública española crecerán un 5,3% este año 2012, hasta situarse en 28.848 millones de euros. El repunte de los tipos de interés del mercado y el aumento del volumen de deuda en circulación se citan como las dos causas que determinarán un aumento del peso del servicio de la deuda sobre el PIB en el presente año hasta alcanzar el 2,75% (en términos de contabilidad nacional), de acuerdo con el proyecto de Presupuestos Generales del Estado para el siguiente ejercicio 2013.

Al financiar el déficit fiscal con un aumento de la deuda interna, solo se posterga la fecha en la que se desatará la inflación, esto es, se provee los recursos ahora, pero es una deuda que deberá pagarse inexorablemente en los años subsiguientes. El pago de intereses sobre una deuda fiscal aumenta los gastos del Estado, incrementando aún más el déficit futuro. El resultado puede ser mayor inflación en el futuro, un problema que no ocurre si el déficit se financia con emisión de dinero desde el principio. Dicho de otro modo, endeudarse hoy a elevados intereses puede postergar momentáneamente la inflación, pero a riesgo de incurrir en una tasa inflacionaria más alta en el devenir.

Existe en economía una vieja y conocida máxima, como tantas otras atribuida al gran J. M. Keynes, que podríamos explicar así: “Si Ud. debe diez mil euros a su banco tiene un problema con su banco. Si le debe diez millones, el banco tiene un problema con Ud.”. Pues bien, en el caso de nuestro querido país, sumido en una profunda crisis económica y, sobre todo, con una no despreciable deuda exterior (pública y, sobre todo, privada) parece que sus dirigentes no se han enterado del sentido de la misma. A mi juicio, los llamados “mercados”, que nos compran deuda de todo tipo, tienen con nosotros un problema tanto o más grave que el que pueda suponerse en sentido recíproco.

Para salir de dudas, lo primero sería aclarar que el interés de los títulos de deuda es el precio que tiene que pagar España porque alguien le compre sus bonos. El precio depende de cuántos bonos vaya a vender España (la oferta de bonos) y de cuántos compradores de bonos haya (la demanda de bonos). Si hay muchos compradores de bonos el interés será bajo porque aún ofreciendo poco interés siempre habrá alguien dispuesto a comprar ese bono. Si, por el contrario los compradores escasean y España pone en el mercado muchos bonos es posible que no haya suficientes compradores y para captar más compradores España debe ofrecerles condiciones más atractivas, es decir, un interés mayor. Se trata, simplemente, de la vieja regla de la oferta y la demanda.

Así es cómo se explica lo que está sucediendo en la actualidad. En las emisiones de deuda pública española hay poca gente dispuesta a comprar a tipos bajos y por eso España se está viendo obligada a ofrecer tipos de interés muy altos. ¿Y por qué hay poca gente dispuesta a comprar bonos españoles a tipos bajos?: porque hay mucha gente que piensa que es posible que el Estado no pueda devolver el dinero cuando llegue el vencimiento del bono. ¿Por qué piensan eso?: porque han estudiado la cantidad de dinero que tiene que devolver el Estado en los próximos meses (véase el anterior cuadro nº: 3) y los ingresos que está generando y piensan que es posible que los ingresos del Estado no den lo suficiente como para satisfacer todas las cantidades que tiene que devolver a sus acreedores.

Los mercados están centrando su ataque especulativo en España porque consideran que, en este momento, es el país más vulnerable de la Eurozona. De hecho, lo importante es que el tipo medio de la deuda era en abril de este año del 4,07% y antes de la crisis, en 2007, alcanzó el 4,53%, según datos del Tesoro. Sin embargo, si los mercados exigen durante mucho tiempo estos intereses, el tipo medio del coste de la deuda puede dispararse por encima del 5% y en ese caso, los expertos consideran que España entraría en una situación crítica, siempre teniendo en cuenta la sostenida recesión que sufre su economía.

Pues bien, ¿hasta cuando podrá España aguantar esta situación?. Los expertos en economía creen que estamos rozando los límites que ponen en peligro la capacidad de devolución. Nuestro tipo de interés está ahora situado en niveles similares al de los países que en el pasado tuvieron que pedir ayuda a otros países para poder seguir haciendo frente a sus obligaciones de pago. Esto, en si mismo, no resulta peligroso si fuera un hecho meramente puntual o coyuntural, pero sí lo es si los tipos de interés se mantienen a esos niveles de forma prolongada.

Si el interés es demasiado alto España puede resolver no emitir la deuda pero, en ese caso, ¿cómo financiamos el desfase existente entre los ingresos y los gastos del Estado?. Sabemos (lo hemos explicado antes) que un país emite deuda porque gasta más de lo que ingresa. Como no tiene ingresos suficientes para atender todos sus gastos le pide dinero a alguien para poder sufragar los gastos; ese alguien son los compradores de deuda. España puede decidir no emitir deuda en un momento puntual si considera que los tipos son demasiado altos pero si sufre un desfase considerable entre ingresos y gastos, en algún momento se verá obligada a emitir dicha deuda, puesto que de lo contrario no podrá pagar los gastos que tiene comprometidos.

Ahora, una vez localizado el problema y analizada la situación, lo que procede es intentar buscar soluciones. ¿Cómo salir de esta situación? ¿Cómo generar esa confianza que falta? ¿Cómo evitar, en fin, ese enriquecimiento (en mi opinión ilícito) que se está produciendo a nuestra costa?

Precisamente por ello, y con ganas de castigar la usura y la especulación descontroladas, las autoridades monetarias españolas y/o europeas podrían adoptar unas sencillas medidas que acabaran con tan deleznables prácticas especulativas salvajes, aparte de la consabida implantación de la tasa Tobin7 a las transacciones financieras, la posible emisión de los denominados “eurobonos” o “euroletras”, o bien la prohibición de las operaciones “a corto”.

7Fueron los movimientos antiglobalización los que recogieron las propuestas dictadas por la Tasa Tobin, convirtiéndola en el símbolo de la lucha contra el libre comercio. Sin embargo, la paradoja radica en ese reconocimiento, que como comentó el propio James Tobin, premio Nobel de Economía, “el aplauso más sonoro proviene del lado equivocado“. Poniéndonos en situación, recordemos que en 1972, durante un coloquio, este universitario keynesiano, poco después de que la administración del presidente Nixon sacará a los Estados Unidos del sistema de Bretton Woods, sugirió un nuevo sistema para la estabilidad internacional de las divisas, imponiendo una penalización a las mismas. Lo curioso es que con la que ha estado cayendo en los mercados financieros, la tasa Tobin ha cobrado de nuevo actualidad como una herramienta para controlar esos mercados, que desmadrados por la especulación, buscan incorporar controles a los movimientos de capital. En esencia, cuando el concepto fue definido, la tasa Tobin consistía en un impuesto especial sobre cada una de las transacciones financieras (ITF), especulativas, en las operaciones de cambio de divisas.

Este conjunto de medidas, prácticamente, se reduce a dos:

1) La “REGLA del 10” (afecta a los tipos de interés de la deuda): la suma de los tipos de interés de la deuda que debe satisfacer cualquier país de la zona euro, tanto los que se contraen en cada momento en el mercado de capitales como los que vencen por contratos anteriores, no pueden en ningún caso superar la barrera del 10%. Así pues, v. gr., si en la subasta actual de Obligaciones del Estado a 10 años se ha conseguido un interés del 6’5% solo se podrían abonar intereses vencidos del 3’5% con independencia del contrato inicialmente establecido, en cuyas cláusulas deberá contemplarse obviamente esta posibilidad. Este tope del 10% podría modificarse en función de la clase, plazo o naturaleza del título de deuda en cuestión, así como por circunstancias de orden económico general.

2) La “REGLA DE EQUILIBRIO” del flujo de deuda (afecta al principal o nominal de la deuda): en realidad, esta norma establece una corrección a la regla anterior en el caso de que, como consecuencia de su aplicación, no se quiera adquirir deuda ninguna o en cantidad suficiente del país emisor por parte de los mercados (aunque una política decidida de adquisición de la deuda pública del país afectado, por parte del BCE, también podría corregir esta situación a la que podría llegarse en un futuro). Consiste en limitar el pago del principal de la deuda, en todo momento, al monto de la contratación de nueva deuda. Así, por ejemplo, si no se colocara deuda de un país determinado en una subasta, tampoco dicho país quedaría obligado a la devolución de la deuda contraída anteriormente y, en cualquier caso, el importe de dicha devolución quedaría siempre limitado por el volumen de la deuda contraída simultáneamente en los mercados. Parece mejor esta solución que la de permitir imprimir moneda común al banco central del país afectado para hacer frente a su deuda, pues ello podría suponer la ruptura de una de las reglas de oro de la moneda única y del BCE (ver nota 8).

Para poder poner en marcha estas medidas deberán crearse los reglamentos oportunos8 por parte de la autoridad monetaria y ser ratificados, en su caso, por el Parlamento europeo. Por supuesto, jamás deberán aplicarse con efectos retroactivos9, aunque los nuevos contratos que se formalicen para la adquisición de deuda pública deberán contener, desde entonces, las cláusulas correspondientes. Y además deberá extenderse su campo de aplicación a la totalidad de países de la zona euro.

8Los Reglamentos Comunitarios (Derecho derivado) son disposiciones comunitarias obligatorias para todos los Estados miembros y directamente aplicables en ellos a partir de su publicación en el Diario Oficial (DOCE) y entrada en vigor. A través de ellos, la Unión Europea disciplina sus propias políticas y organización.

9Como regla general, y concretamente en el caso español, el artículo 2.3 del Código Civil establece que «las leyes no tendrán efecto retroactivo si no dispusieren lo contrario», irretroactividad que igualmente proclama el art. 9.3 de la Constitución Española en relación con las disposiciones sancionadoras no favorables o restrictivas de los derechos individuales. El principio de la irretroactividad se asienta en «los deseos de certeza y seguridad jurídica y el respeto de los derechos adquiridos y a las situaciones jurídicas beneficiosas» (sentencia del Tribunal Supremo de 30 de mayo de 1984), con la consecuencia de que la interpretación de las normas de derecho transitorio ha de realizarse en sentido restrictivo y, por tanto, sin extender los términos legales a situaciones no contempladas.

Bibliografía y fuentes documentales

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DEPARTAMENTO DE ECONOMÍA EUROPEA, ÁREA DE ESTUDIOS Y ANÁLISIS ECONÓMICO. LA CAIXA. ESTUDIOS Y ANÁLISIS ECONÓMICO: “El caso de la deuda en Estados Unidos: ¿ejemplo de película con final feliz?”, Informe mensual, nº: 354 (febrero de 2012), Barcelona.

FERNÁNDEZ, Enric, LA CAIXA. ESTUDIOS Y ANÁLISIS ECONÓMICO: “¿Es sostenible la posición externa de España?”, Informe mensual, nº: 359 (Julio-Agosto de 2012). Barcelona.

FRANQUET BERNIS, Josep Maria (2002): ¿Por qué los ricos son más ricos en los países pobres?, Ed.: Littera-Books, S.L., Barcelona.

GISPERT GÜELL, Josep (2012): “Dormi tranquil, compri deute alemany”, Diari de Tarragona (23/01/2012). Tarragona.

MANZANO, Daniel y SÁNCHEZ DEL VILLAR, Enrique (1995): “Expansión de los mercados financieros”, Diario El País (15/05/1995). Madrid.

MOCHÓN MORCILLO, Francisco (1998): Principios de Economía, Ed.: Mc Graw-Hill, Madrid.

VERGARA, A. F. (2012): “¿Quién gana más dinero a costa de la deuda española y la prima de riesgo?”, Diario ABC.es Economía (27/07/2012). Madrid.

Crisis en Grecia

DE GRECIA SIN AMOR

Nadie puede sorprenderse ante los acontecimientos actuales en la economía de Grecia. En verdad, tanto economistas como políticos saben, en general, cómo termina la fiesta. Pero no muchos parecen dispuestos a decirlo abiertamente.

Por distintas razones, es cierto. Pero todos saben cómo termina. En economía todo es posible, menos evitar las consecuencias. Repetir estos conceptos es, hoy por hoy, de Perogrullo. Pero no lo ha sido a lo largo de unos cuantos años.


El problema de Europa es esencialmente la falta de competitividad que le impide mantener un estándar para el que, literalmente, no le da el cuero. La economía norteamericana, por su parte, es inmensamente más dinámica, ya que se aviene a las leyes básicas del mundo de los bienes escasos: la oferta y la demanda, el respeto del Estado de Derecho, la ley de quiebras, etc.

Luego de la llamada crisis de las hipotecas, provocada en nuestra opinión por la sobre intervención de una Reserva Federal ávida de encargarse de las leyes del mercado, el gobierno norteamericano decidió intervenir con el método de salvataje esencialmente keynesiano que consiste en emitir moneda para que los actores en dificultades sean sostenidos económicamente mediante ayudas financieras y el sostenimiento de tasas de interés bajísimas, cuando no directamente nulas. No es la primera vez que lo hace. Algo parecido ocurrió con la crisis del petróleo en los años 70.

Pero la fiesta que supone disponer de la máquina de hacer billetes es una ilusión. El gran generador de la burbuja que condujo a la crisis fue, precisamente, el intervencionismo, que consistió en prestar dinero a tasas bajas y sin garantías suficientes para incentivar el mercado inmobiliario y facilitar el acceso a la vivienda.


Con todo y pese a todo, es obvio que los E.E.U.U. tienen esa dinámica de la que hablamos en otras oportunidades y que se basa en el hecho de que prácticamente el 75% de su economía funciona dentro de las leyes del mercado, mientras que la llamada eurozona, tomada en su conjunto, mantiene en manos estatales un porcentaje superior al 50%. Es decir, las leyes del mercado son negadas mucho más en Europa, siendo además la economía en conjunto bastante más pequeña.

La Unión Europea tiene normas que establecen que, por ejemplo, sus miembros no pueden tener un déficit superior al 3% de su P.B. I. . Se ha dicho que en Grecia, por cuestiones políticas y otras, el déficit ha crecido a cerca de un 13% de su P.B.I. Algo parecido ocurre en varios de los países miembros de la Unión.

Sin explayarnos tanto como para volvernos muy aburridos tenemos que decir que las pautas de integración del Mercado Común están destinadas a zanjar aspectos vinculados con la competitividad, que obviamente no es la misma en los 27 miembros que lo integran. Ese 3% permitido es una de tales pautas.


Pero la política del Estado Benefactor, que rige las democracias europeas, no parece entrar en razones. Y cuando no dibuja cifras como ocurre entre nosotros, sale con la lengua afuera pidiendo ayuda y prometiendo que para dentro de unos años el problema estará resuelto.

¿PARA QUÉ SIRVE LA AYUDA?

En última instancia la ayuda significa que los demás integrantes deben colaborar con la ineficiencia del país en cuestión. Ayudar a Grecia es eso. Es un país que funciona a pérdida y esa pérdida hay que cubrirla para que vuelva a fojas cero la falta de competitividad.

Esto que decimos lo hacemos con simpleza y salteándonos varios pasos. Pero es así. ¿Soluciona el problema salir a dar ayudas financieras a países en dificultades por falta de eficiencia comparada? Absoluta y definitivamente no. Y eso es independiente de que, para ayudar, se recurra a la emisión de moneda, a endeudamiento o a excedentes fiscales. Porque el problema lo tiene el país ineficiente. Simplemente se busca que no sea el causante el que pague, sino que lo hagan entre todos en forma mancomunada. Es decir, diluir en lo posible el efecto de la crisis. Disimularlo. No es lo mismo que lo paguen los griegos que si lo hacen todos los países de la Unión. Es como un club o las expensas de un consorcio, digamos.

Pero que quede bien en claro una vez más: no se resuelven estos problemas saliendo a tapar baches pasados con ayudas. Es obvio que una vez utilizado el dinero para cubrir el agujero, nuevos agujeros se generarán a menos que, precisamente, se ajuste la economía griega. Y he aquí el gran dilema.

PRESIÓN FISCAL, INFLACIÓN Y AJUSTE

¿Cómo puede ajustarse la economía griega? Esencialmente puede intentar volverse más eficiente y gastar mejor su dinero. Este es el ideal. Tecnificarse, volverse menos burocrática, ajustar su administración, encarar una visión como Nación de mayor grado de conocimiento, educación, etc. Iniciar el camino de la reforma del Estado para hacerlo más útil y competitivo. Eso hace competitiva a una economía y así se logra recaudar más impuestos y gastar menos, hasta alcanzar el equilibrio. Este camino difícilmente sea el elegido. Es costoso, largo, poco visible en lo inmediato. Es, sobretodo antipolítico, como también lo es el ajuste.

Es más, si verdaderamente se hubiera pensado en el camino de la eficiencia, hace rato que se hubiera iniciado el derrotero. Y esto evidentemente no es lo que ha ocurrido.

Otra posibilidad de la que se ha hablado en estos días, es la de que Grecia salga del euro y vuelva a su moneda propia, el dracma. Así las cosas, podría llevar adelante una gran devaluación similar a la nuestra de 2002 y acabar con el problema. Una devaluación es, en esencia, una estafa a quienes confiaron en su moneda, una manera de trasladar a toda la comunidad el costo de la fiesta, y en definitiva una mentira, que lamentablemente suele digerirse mejor que la verdad.

La emisión de moneda local para cubrir el déficit del P.B.I. evita la recurrencia al euro, implica mermar el poder adquisitivo, disminuye el patrimonio líquido y también arrastra a la baja el valor de propiedades y empresas. Visto desde arriba, se haga lo que se haga la fiesta se paga. Y la emisión habrá de darse, de manera masiva, si se retorna al dracma y se concede una devaluación como forma de distribuir el costo de la fiesta.

La presión tributaria adicional entraría en lo que últimamente se denomina ajuste entre nosotros. Es una denominación cargada de desprecio, pero ese desprecio es evidente y eminentemente político. Como fácilmente puede colegirse, nada de lo que hemos señalado en los párrafos anteriores es otra cosa que un ajuste. Pero la población suele dormir mejor con una devaluación masiva, que es tomada como una catástrofe natural o poco menos, que una decisión de bajar salarios o subir impuestos, que es achacable a un gobierno y por lo tanto a los gobernantes de turno.

EL FUTURO

Grecia es uno de los 16 países de la Unión Europea que tiene como moneda el euro. Esto implica un verdadero corsé, igual que lo era la convertibilidad entre nosotros. Eso significa que, ante la menor competitividad, sólo es posible terminar la distorsión con más eficiencia. Si la economía alemana produce bienes y servicios en una determinada cantidad utilizando determinado capital, Grecia debería lograr lo mismo. Y el resto de los integrantes de la Unión lo mismo. De lo contrario el desfasaje subsiste. Y por más que se intente solucionarlo mediante ayudas y compensaciones varias, no se logra otra cosa que trasladar la ineficiencia de unos al costo de la eficiencia de otros, dañando (y no favoreciendo) la competitividad del conjunto.

De los 16 países citados, son 13 los que han superado el porcentaje del 3% mencionado al comienzo de estas líneas. No estamos ante un caso aislado, estamos ante la generalización de un problema que es inherente al sistema elegido.

Europa ha alcanzado un importantísimo grado de desarrollo y una evidente mejoría en los estándares de vida de su población a partir de la Segunda Gran Guerra. Pero ello se ha debido a la acumulación de capital per cápita, a la tecnología, a la mejor educación y a tantos factores que tienen que ver con la productividad. No a la proverbial quintita de fronteras cerradas y beneficios a rolete.

E.E.U.U. por su parte, sabe que la aplicación de recetas keynesianas tiene un límite. Que es posible inyectar dinero mientras la población tenga confianza en su dólar y no más. Sabe que debe detenerse a tiempo porque una vez pasado ese límite será muy difícil volver.

Es bueno recordar que en 1971 la onza troy de oro costaba 35 dólares y hoy vale 1.200 . Es decir que hoy hace falta contar con casi 35 veces más dinero para comprar lo mismo. Si bien el valor de la tal onza pudo haber variado y seguramente lo ha hecho, lo cierto es que lo que muestran estas cifras es que los norteamericanos no han hecho las cosas todo lo bien que ellos mismos podrían llegar a pensar.

Digamos que tanto la crisis del petróleo en los años 70, como la guerra de Irak luego del atentado a las Torres, y ahora la crisis de las hipotecas originaron fuertes emisiones de dólares y pavorosos déficit. Esos déficit se resolvieron con emisión en gran parte. El efecto no es neutro, como se ve con ese solo dato que vertimos.

Acá lo que está por verse es si la moneda europea común puede subsistir ante las desigualdades de productividad señaladas, el alto porcentaje de participación estatal y la evidente tendencia a no respetar los márgenes de déficit que los mismos miembros establecieron. Y cuando hablamos de subsistir tal moneda, hablamos también de su valor comparado. Porque si la pérdida de valor es muy grande para el euro, habrá nuevos cimbronazos y muy probablemente los países más industrializados del grupo no quieran seguir pagando la comodidad de los que gastan de más alegremente porque ajustar es costoso políticamente y volverse más eficiente lleva mucho tiempo.

FIN DE FIESTA

Lo que vemos hoy es el desencadenante de una estructura económica basada en el sostenimiento de fantasías relativas, por así decirlo. Países viejos, con tradiciones importantes, con enfoques humanitarios y socialmente atractivos que no tienen en cuenta que las cosas cuestan dinero, y que el dinero no sobra, y que no todo se puede alcanzar negando la realidad económica o considerándola salvaje. La realidad pasa su factura. Porque como dijimos al comienzo en economía todo puede hacerse, pero no es posible evitar las consecuencias.

El desastre griego, con muertos incluidos, tiene como responsables principales a quienes pergeñaron un sistema que no es viable, que no puede sostenerse indefinidamente. También son responsables los intelectuales, los ideólogos, los que se llenan la boca de compromisos sociales que luego esperan que sean pagados por los demás. Algo de todo esto nos resulta excesivamente familiar.

Tal vez el pueblo griego, como el nuestro, soporte mejor la idea de una catástrofe natural. Allí los responsables encontrarán la puerta para salir del marasmo. Pero una vez más quedará expuesta la realidad: no es posible violar las leyes de la economía sin pagar las consecuencias. Y tal como está ocurriendo con Grecia, lo mismo ocurrirá con varios otros miembros de la Unión si no arreglan sus cuentas. Y como esto último es demasiado difícil, lo más probable es que se busquen procedimientos alternativos para regular las cosas y que la suciedad no se note. Pero se notará.

HÉCTOR BLAS TRILLO

Buenos Aires, 8 de mayo de 2010

Destrucción de Riqueza en Estados Unidos

Por el Enrique Blasco Garma, economista del Centro de Investigaciones deInstituciones y Mercados de Argentina (CIIMA-ESEADE).



El PBI de Estados Unidos alcanzó su máximo esplendor, 11.727 billones (millones demillones) de dólares al valor de 2000, en el segundo trimestre de 2008. La mediciónpara el primer trimestre de 2009 dio 11.354 billones, en dólares de igual poderadquisitivo. Una contracción del PBI en términos reales de casi 374 billones de dólaresde 2000, bastante superior al valor completo del PBI argentino de un año. Una pérdidadel 3,2%, en tres trimestres. Desde que se iniciaron las series trimestrales del PBI, en1947, nunca hubo mayor caída porcentual, en el lapso de tres trimestres. El registro del segundo trimestre de 1958 es ligeramente más leve. En la muy grave crisis de 1981/82se llegó a perder el 2,3% en tres trimestres. Estamos entonces ante la más grave pérdidade riqueza desde la Segunda Guerra Mundial.

Pero eso es apenas la punta del iceberg. La medición oficial revela sólo una porción dela pérdida de riqueza sufrida.

En rigor, el PBI debería medir la creación o destrucción de riqueza del conjunto de loshabitantes. Para lo cual habría que considerar la variación en el valor de los patrimoniosde los habitantes. Porque la verdadera creación de riqueza es el aumento, o disminuciónen este caso, del valor de los patrimonios conjuntos de los habitantes más el consumo que realizan (la parte de la producción que no se incorpora a los activos). El métodotradicional no lo incorpora pues los activos no parecían tan relevantes cuando secomenzaron las mediciones del PBI.



Variación de patrimonios

La Fed publicó la semana pasada la variación de patrimonios en el primer trimestre de2009. En los tres trimestres comentados, la reducción alcanza a 8,95 billones de dólares.En ese lapso, el consumo privado sumó 7,5 billones y el gubernamental, 2,2 billones; elconsumo agregado totalizó 9,7 billones. La verdadera creación de riqueza en esos trestrimestres fueron los 9,7 billones de consumo (producción destinada al consumo), menos la reducción de patrimonios comentada de 8,95 billones. Entonces, la verdaderacreación de riqueza fue de apenas 0,7 de billón de dólares, en el lapso de los últimos trestrimestres. En términos anuales, ello equivale a 0,9 de billón, en vez de los 14 billonesdel método tradicional, a precios corrientes.

La destrucción de riqueza fue tan severa que casi niveló toda la creación de valores. Poreso, el verdadero PBI fue menos del 6% de la cifra declarada. En esas circunstancias nodebe sorprender que aumente el desempleo, y caigan la producción y el comercio. Estasconsideraciones muestran la relevancia de los activos y lo errático de presentar cifrasdel PBI aisladas de los cambios patrimoniales. La desconfianza y el desconcierto mayores, propios de la crisis, destruyeron casi tanto como lo aportado por laproducción, durante los últimos tres trimestres (tercero y cuarto de 2008 y primero de2009).



No hay duda, los EE.UU. se empobrecieron más que lo anunciado y el PBI debieramedirlo. El verdadero PBI se redujo a apenas una fracción de lo medido por las cifrasoficiales del Bureau of Economic Analysis. Para obtener un cuadro completo se necesitasumar la información brindada por la Reserva Federal, de flujo de fondos y variación depatrimonios.

Esta comprobación destaca un aspecto fundamental de la economía. Las instituciones generan confianza y motorizan riqueza al definir el valor de los activos. No sólo en lasfábricas y los campos se crean empleos y valores. Las instituciones son las máscolosales generadoras de riqueza, pues especifican los derechos de decisión, los poderesindividuales.

Las naciones avanzadas lo son porque fueron encontrando sistemas más eficaces paradefinir los poderes o derechos individuales de decisión, los derechos de propiedad.Dentro de una estructura institucional, el sistema financiero es un fundamental creadorde riqueza. Cuando los bancos se debilitan, la riqueza se destruye; cuando ganancerteza, los activos se valorizan y la riqueza se multiplica, incentivando mayor

producción.

En su sentido más amplio, el sistema institucional abarca todo lo que sostiene laconfianza. A los entes reguladores, al Gobierno, la Justicia y el Congreso, pues afectanla creación de valores y determinan propiedades privadas.

Las medidas de los gobiernos de las naciones más avanzadas se enfocaron en restaurarla confianza y el crédito. Apuntalaron la valorización (hasta ahora, frenando ladepreciación) del conjunto de los patrimonios. Cuando los activos se valoricen,aumentarán los incentivos para producir esos bienes y contratar personal.

Autor:

Enrique Blasco Garma, economista del Centro de Investigaciones deInstituciones y Mercados de Argentina (CIIMA-ESEADE) www.eseade.edu.arJulio de 2009

Tareas Frente a la Crisis Internacional

POR: EFRAÍN ESTEBAN CHURAMPI (*)


1- A NIVEL MUNDIAL

1.1 NUEVOS ORGANISMOS INTERNACIONALES

Se debe crear nuevos organismos internacionales, que respondan a los nuevos tiempos, pero principalmente que expresen la nueva correlación de fuerzas. Ante la caída de estados Unidos y la Unión Europea, se percibe que el mundo camina de la hegemonía americana a la hegemonía asiática. En esta última destacan China, Rusia, India, Japón y el sudeste asiático. Se trata de que estos nuevos organismos planteen cambios de políticas, estrategias, haciendo que respondan a un mundo globalizado con eficiencia.


1.2 NUEVO ORDEN ECONÓMICO MUNDIAL

Es necesario un nuevo modelo económico, con una globalización con rostro humano, como reclama Joseph Stiglitz; una globalización sin pobreza, como plantea la iglesia católica; un nuevo orden económico internacional, como plantean los humanistas; un mundo más sostenible, como reclaman los ambientalistas; un modelo económico más cercano a Dios, como exigen los cristianos. Un nuevo orden significará mayor crecimiento y sobre todo una mejor distribución. Ante la gran concentración de las riquezas, se requiere una justa distribución; una democracia verdadera, tanto política como económica.

1.3 ANULAR LOS PARAÍSOS FISCALES



Los paraísos fiscales son centros financieros extraterritoriales que actúan lejos del control estatal, evadiendo sus regulaciones y reduciendo la recaudación fiscal. Estos paraísos constituyen prácticamente la base de la globalización económica. Atesoran fondos mal habidos, ilícitos, especulativos. Según el Fondo Monetario Internacional (FMI) los paraísos fiscales controlan aproximadamente la mitad de la intermediación financiera internacional. Se trata de montos que se estiman entre 11 y 13 billones de euros. Incluso la tercera parte de la Inversión Directa Extranjera procede de ahí. ¿Por qué no puede eliminarse?, simplemente porque es dinero que controla el gran capital financiero internacional. Es como pedir que la bestia destruya su propia madriguera. Sin embargo, esperemos que la nueva correlación de fuerzas, con organismos eficientes, pueda anularlos o reducirlos.

II. A NIVEL NACIONAL

2.1 MEJORAR LA COMPETITIVIDAD

Se trata de que las empresas ofrezcan bienes y servicios de mayor calidad y a menores precios, de modo que en el mercado nacional y mundial sean más demandados. Para ello requerimos mayor ciencia y tecnología. El estado y el sector privado deben invertir fuertemente en ese objetivo. Además, debemos potenciar nuestro capital humano, invirtiendo en conocimientos, capacitación, fortalecimiento institucional, en suma en educación. Todo ello sobre la base de una magnífica infraestructura productiva.

2.2 LUCHAR CONTRA LA CORRUPCIÓN

La corrupción es una lacra que le saca la vuelta al Estado, haciéndolo débil, vulnerable, ineficiente. Por ello el Estado es una maquinaria pesada y odiosa. La corrupción es responsable de obtener menores ingresos y generar mayores gastos, ya que vende barato y compra caro, a fin de dejar margen para los corruptos. Pero la corrupción también permite el ingreso de ineptos a la administración pública, vía acomodos y ventas de puestos. Se requiere pues, una profunda reforma del Estado, a fin de hacerlo eficiente, ágil, honesto.

III. A NIVEL DE LA REGIÓN

3.1 AGROINDUSTRIA EXPORTADORA

He dicho en más de una oportunidad que: para la región, excepto la agroindustria exportadora, todo es un paliativo. La experiencia de los países desarrollados muestra que las dos columnas del desarrollo económico son la industria y la exportación. Nuestra región, básicamente agropecuaria, puede y debe convertirse en eje de desarrollo agroindustrial exportador. Por ejemplo, el narcotráfico es precisamente industria que se exporta, por lo que los cultivos legales jamás serán una alternativa con la sola producción de materias primas. Ahí está el ejemplo de la Cooperativa Naranjillo, inquebrantable en 4 décadas, gracias a la industria exportadora.

3.2 FOMENTO DEL TURISMO

El turismo es otra oportunidad de desarrollo regional. Si bien no significa una industria, pero constituye una forma de exportación, ya que genera divisas que los turistas dejan a su paso. Este dinamiza actividades como los restaurantes, los hoteles, el transporte y otros servicios. Pacificando el Alto Huallaga, controlando la inseguridad ciudadana, invirtiendo en restauración y promoción turística se puede elevar esta actividad. Pero, sobre todo hay que educar a la gente para ser más hospitalaria. Sino veamos cuánto representa esta actividad en Cuzco, Iquitos, Huaraz.

3.3 INTEROCEÁNICA DEL CENTRO

Indudablemente la infraestructura productiva siempre será la base del desarrollo productivo. En esta destaca nítidamente las vías de transporte. Necesitamos muy buenas carreteras. Felizmente viene a nuestro encuentro la pavimentación de la carretera Fernando Belaunde Terry y la carretera Federico Basadre. ¿Nosotros debemos solo esperar?. Respondamos con la construcción de la interoceánica del centro, de modo que no solo tengamos la salida más corta a la costa, sino también comunicación vial con el Brasil. Lo anterior se compatibiliza con la creación de la Macrorregión Centro Oriente, con las regiones de Ancash, Pasco, Huánuco y Ucayali. Aquí se juntan la gran riqueza minera, pesquera, agropecuaria, industrial y turística.

(*) DOCTOR EN ECONOMÍA, PROFESOR PRINCIPAL DE LA UNAS.

www.efrainesteban.blogspot.com ; efrainesteban@hotmail.com

Crisis Financiera: ¿Cuál Nuevo será el Nuevo Multilateralismo? - Banco Mundial

Crisis financiera global – ¿Cuál Nuevo será el Nuevo Multilateralismo?



Autor: Raúl de Sagastizabal - Mayo de 2009

Seguramente en sus inicios, mucha gente común pudo creer, con el romanticismo propio del fin de una tragedia, que las instituciones multilaterales posteriores a la segunda guerra eran una expresión del advenimiento de la concordia entre los seres humanos y la piedra de toque del esfuerzo común por construir un mundo más justo y mejor para todos. Hoy, por simple sentido común, los seres humanos debemos reconocer que, si esa visión tenía algo de cierto, salió mal en el camino. Transcurrido más de medio siglo, tras incontables nuevas guerras, genocidios, pobreza, desigualdad económica, y miles de otras tragedias, debemos decretar que esas instituciones han fracasado.

Sin embargo, curiosamente, los sitios web de los organismos multilaterales sobreabundan en consejos sobre lo que debemos hacer ahora para enfrentar la crisis. Ofrecen toda clase de soluciones, incluidos nuevos fondos para la estabilidad financiera, nuevos “G[rupos]”, comisiones de estudio, programas y naturalmente, servicios de endeudamiento.


Las reuniones de primavera del FMI y el Banco Mundial, celebradas en Washington los días 25 y 26 de abril, terminaron con predicciones escalofriantes.

“Los países en desarrollo enfrentan gravísimas consecuencias, ya que la crisis financiera y económica se ha transformado en un desastre humano y de desarrollo.

Se estima que en 2009 otros 55 millones de personas serán arrojadas a la pobreza extrema. Se prevé asimismo que este año el número de personas que padecerán hambre supere los mil millones”.


Una vez más, como en tantas otras crisis, el devastador impacto sobre la economía real, sobre las personas, es, desafortunadamente, apenas una cifra en las estadísticas.

Y otra vez, como en otras crisis anteriores, se habla de reforma de los organismos; se dice que está en marcha un cambio en la estructura interna y en el poder de voto de los países miembros en desarrollo.

El Presidente del Banco Mundial, Robert Zoellick, propone ahora la modernización del multilateralismo y los mercados, y sostiene:

“Recordar, para pensar el futuro.

Los gobiernos nacionales se inclinan cada vez más a proporcionar ayuda al amparo de su bandera, en lugar de hacerlo mediante el multilateralismo, que alienta la coherencia y fomenta el protagonismo de los receptores.

Las empresas y los mercados financieros privados seguirán siendo las principales fuerzas propulsoras del crecimiento y el desarrollo mundial.

Para construir el futuro debemos aprender de las enseñanzas del pasado”.

Bien, recordemos. Recordemos en qué andaban los organismos mientras se gestaba este desastre.

Téngase presente, ante todo, que se “habla” de reforma desde hace una década. En 2001, bajo el título “Reforma de la arquitectura financiera internacional – Avance hasta finales del año 2000”, publicaba el FMI: “Las crisis financieras de los últimos años han puesto de manifiesto algunos de los puntos débiles del sistema financiero internacional. En consecuencia, la comunidad internacional está reforzando la „arquitectura del sistema financiero internacional? con objeto de reducir el riesgo de crisis”. Posteriormente numerosas voces reclamaron cambios en los organismos. En 2003 tuvo lugar el famoso debate entre el Premio Nobel Joseph Stiglitz y Kenneth Rogoff, del FMI, en medio del cual, este último sostenía: “Fustigado por manifestantes antiglobalización, políticos de países en desarrollo y economistas laureados con el Premio Nobel, el Fondo Monetario Internacional (FMI) se ha convertido en el chivo expiatorio número uno del mundo. Sin embargo, los economistas del FMI no son seres malignos ni se equivocan siempre. Ya es hora de poner las cosas en su sitio y de ocuparse de cuestiones económicas más apremiantes, como encontrar la mejor manera de promover el crecimiento económico y la estabilidad financiera a escala mundial. Independientemente de cómo se distribuyan las culpas por las crisis financieras de las dos últimas décadas, abundan los errores de concepto acerca de las virtudes y defectos de la liberalización de los mercados de capital”. Lo cierto es que las culpas nunca se repartieron, las reformas nunca se concretaron; quienes protestaban se sumieron en el mutismo no bien finalizadas las crisis, y los organismos se reacomodaron hasta el próximo fracaso, el de hoy, casi diez años después, con la peor crisis desde los años treinta. Repasemos entonces en qué andaban los dispensadores de asistencia oficial para el desarrollo, tras las lecciones aprendidas de aquellas crisis. Como los instrumentos financieros innovadores (valores respaldados por activos, por hipotecas, fondos de cobertura, etc.), son el origen del actual desastre colectivo, hemos optado por analizar la participación activa del Banco Mundial en la apertura de mercados de capital a dichos instrumentos y el uso de los mismos. Los propios organismos reconocen hoy que estos instrumentos financieros son complejos y difíciles de valorar e incluso de supervisar “debido en parte a que los mercados financieros se han vuelto tan sofisticados e interconectados que es difícil determinar quién asume realmente el riesgo final”, y que será ”difícil hallar mecanismos prácticos y eficaces para corregir los arraigados incentivos y estructuras –tanto en el mercado como en los sistemas de supervisión y regulación– que han provocado una profunda alteración de la intermediación financiera”. A la fecha no se sabe siquiera si los productos estructurados que están circulando por el mundo no agravarán todavía más la crisis; ni menos aún si alguna vez y bajo qué marco de regulación y supervisión podrían ser beneficiosos para las economías y las personas, en lugar de serlo para los especuladores financieros.

Sin embargo, en medio de la crisis, el Banco Mundial –que lleva una larga década promoviendo el uso de estos productos por instituciones financieras del sector no bancario prácticamente no reguladas– organiza un seminario en Europa del Este, para promover este modelo de intermediación financiera en los países de esa región, algunos de los cuales se cuentan entre los más duramente golpeados por la crisis y haciendo cola por préstamos de emergencia del FMI. Antes que nada, recuerde el lector que el Banco Mundial es un organismo público internacional y un banco multilateral de desarrollo, financiado con dineros públicos, de los contribuyentes de los países ricos y de los países pobres, cuenta con 10.000 empleados y su presupuesto administrativo anual es del orden de los US$2.100 millones. Sus fines, conforme a su Convenio Constitutivo son, en lo pertinente, contribuir a la obra de reconstrucción de sus países miembros, facilitar la inversión de capital para fines productivos, fomentar la inversión extranjera privada y el financiamiento para fines productivos y promover el crecimiento equilibrado y de largo alcance del comercio internacional, alentando inversiones internacionales para fines de desarrollo de los recursos productivos de los miembros, y dirigir sus operaciones con la debida atención a los efectos que las inversiones internacionales puedan tener en la situación económica de los territorios de los miembros. Veamos entonces tan sólo algunas de sus actividades y operaciones en relación con estos instrumentos financieros estructurados.

Mayo de 1998 - INVESTING IT; Yes, Risk-Taking At the World Bank Parte de la entrevista a Afsaneh Mashayekhl Beschloss, Jefa de Inversiones del Banco Mundial, publicada en The New York Times

"Mi trabajo es hacer dinero, y hacerlo de la mejor manera posible?, dijo Beschloss, desechando insinuaciones de que el Banco, muchos de cuyos miembros son países muy pobres, podría indicarle que se inclinara a usar el corazón tanto como el cerebro al dictaminar sobre inversiones. “No se nos presiona en lo más mínimo para que compremos nada”. La Sra. Beschloss …maneja gran parte de su cartera a través de lo que denomina un mundo de inversiones „de vanguardia?, derivados crediticios, operaciones de canje de monedas, acuerdos de recompra y valores respaldados por hipotecas. Esos exóticos instrumentos financieros permiten que las inversiones del Banco a corto plazo, por un monto de US$20.000 millones, superen el rendimiento de la tasa interbancaria de Londres (LIBOR) a seis meses por más de 10 puntos básicos –un décimo de punto porcentual–, lo que constituye un logro digno de mención habiendo tanto dinero en juego. „Estamos siempre dispuestos a utilizar nuevos instrumentos, sean éstos valores respaldados por activos, o del mercado de canjes de activos?, dijo la Sra. Beschloss. La Sra. Beschloss hizo otro buen negocio para el Banco con lo que dio en llamar „los negocios de la euroconvergencia?, sacando provecho de las políticas que deben seguir los países para ingresar a la Unión Monetaria Europea. A fines del año pasado apostó a que el Banco de Inglaterra aumentaría su tasa de interés. “Ganamos así US$22 millones” en un par de días, comentó. „Lo que distingue a Afsaneh es que tiene la extraordinaria capacidad de crear un clima de sector privado en una institución multinacional?, dijo Peter Yu, Director Gerente de AIG Capital Partners, de Nueva York”.

Junio de 2000 – Consideraciones legales y regulatorias referentes a la emisión de valores respaldados por hipotecas residenciales en países en desarrollo – Los casos de Malasia y México

“Aunque la „titularización? ha tenido un gran éxito en los Estados Unidos, es importante tener presente que las condiciones legales y regulatorias que facilitaron el crecimiento de ese mercado, podrían no ser de fácil emulación en otros países. Introducción al proyecto: En algunas jurisdicciones los problemas legales y regulatorios son los más complejos y costosos de resolver antes de iniciar un programa de emisión de valores respaldados por hipotecas residenciales (RMBS). Nuestro objetivo consiste, por medio de no menos de dos estudios de casos, en completar el examen del marco jurídico y el proceso de solución pertinente antes de que pueda establecerse un programa de RMBS. Conclusión – Malasia: En la actualidad parece haber numerosos impedimentos significativos para el desarrollo de un eficaz mercado de RMBS en Malasia. No obstante, esos obstáculos podrían superarse por vía legislativa, como se hizo en México. (…) Conclusión – México: El contexto legal mexicano está suficientemente desarrollado como para dar cabida a un eficaz programa de RMBS; no obstante, se requieren algunas enmiendas legislativas (…)”.

Noviembre de 2004 – Titularización de activos de IPDC en Bangladesh

Palabras de apertura – Funcionario del Banco Mundial “Es un gran privilegio para mí estar aquí hoy participando del lanzamiento de la primera titularización de activos en la historia de Bangladesh. La idea de introducir la titularización de activos en este país se originó en 1999, cuando el Banco Mundial estaba analizando los problemas que enfrentaban las instituciones financieras del sector no bancario (NBFI) para movilizar fondos del mercado. A diferencia de los bancos comerciales –en especial los de propiedad estatal– que tienen fácil acceso a depósitos, pero que con frecuencia no pueden prestar esos fondos de manera eficiente a prestatarios viables, las NBFI típicamente cuentan con una firme demanda de préstamos de buenos prestatarios, pero están siempre muy escasas de fondos. Fue en ese momento, en que el equipo del Banco Mundial trabajaba con el Gobierno en el diseño del Proyecto de Desarrollo de las Instituciones Financieras (FIDP), que surgió la idea que las NBFI pudieran emitir valores respaldados por activos. El proceso de cuatro años de duración que permitió alcanzar esta meta ha sido arduo y lleno de contratiempos. Hubo que superar problemas tributarios y de incentivos, obstáculos regulatorios y deficiencias en materia de conocimientos y aptitudes. Hubo que traer al país a un experto internacional en titularización para que familiarizara a los diversos protagonistas en los fundamentos de ese mecanismo. Entiendo que todas las instituciones financieras privadas que operan en el marco del FIDP están preparándose para emitir sus propios valores respaldados por activos, para movilizar fondos directamente del mercado.

Es alentador que varias otras instituciones financieras estén también listas para emitir sus propios valores respaldados por activos. Existe un enorme potencial: las empresas de financiamiento para la vivienda pueden titularizar sus hipotecas, los prestamistas microfinancieros pueden titularizar sus microcréditos, las compañías de tarjetas de crédito pueden hacer lo propio con sus cuentas por cobrar, las de teléfonos móviles con sus facturas. Subsisten algunas cuestiones que el Gobierno debería abordar para hacer estos instrumentos más populares y abaratar su emisión: (i) eliminar el derecho de timbre del 1,5% sobre la emisión y la transferencia de valores extrabursátiles; (ii) reducir la tasa del impuesto deducido en la fuente aplicable a los Bonos del Tesoro, para crear un mercado secundario; (iii) estandarizar el tratamiento regulatorio y contable aplicable a la titularización, y (iv) a su debido tiempo promulgar una ley de titularización. Tengo la firme esperanza de que estas pocas arrugas pronto desaparecerán, de modo que ‘los instrumentos financieros del nuevo milenio’ puedan contribuir a ampliar y dar mayor dinamismo a los mercados financieros en Bangladesh”.

Mayo de 2008 – Instrumentos financieros respaldos por activos de pequeñas y medianas empresas (PYME): Oportunidades en Europa - Bratislava, Eslovaquia

“La Región de Europa y Asia Central del Banco Mundial, en colaboración con KfW Bankengruppe (KfW) y el Instituto del Banco Mundial (WBI), ha organizado una conferencia de dos días de duración destinada a aumentar el conocimiento sobre los mecanismos de financiamiento respaldado por activos disponibles en Europa para PYME. Los instrumentos de financiamiento respaldados por activos representan una oportunidad para mejorar el financiamiento de PYME, empresas que cumplen un papel esencial en Europa, pero que con frecuencia tienen escaso acceso al crédito. Esos mecanismos pueden incrementar el financiamiento para esas empresas, convirtiendo activos de alto riesgo e ilíquidos relacionados con PYME en valores comerciables que cuenten con el respaldo de inversionistas institucionales. Aunque han ganado mucho terreno en diversas partes del mundo, a menudo bajo el impulso de las autoridades de finanzas, siguen subdesarrollados en algunas partes de Europa. El desarrollo de instrumentos financieros respaldados por activos entraña evidentes beneficios en Europa. Ellos proporcionan fuentes adicionales de financiamiento para PYME, ofrecen a inversionistas institucionales nuevas oportunidades de inversión, y ayudan a las instituciones financieras a manejar sus balances, liquidez y riesgos. No obstante, la reciente inestabilidad en los mercados ha puesto de manifiesto que el riesgo debe ser adecuadamente supervisado y regulado, a la vez que se promueve la creación de mecanismos innovadores. Objetivo general de la conferencia: Proporcionar experiencia práctica en el desarrollo de mecanismos financieros respaldados por activos para PYME, incluidas soluciones de financiamiento de la cadena de suministros, factoring inverso, y titularización de préstamos y cuentas por cobrar de PYME”. Cuesta entender que fomentar –y financiar con dineros públicos– un sistema de transferencia de riesgos no regulado, con incentivos perversos tras el rendimiento y sumamente especulativo, fabricante de dinero virtual –expresión acuñada por el Presidente brasileño al cabo de la última reunión del G20– tenga algo que ver con el mandato de promover un crecimiento equilibrado y a largo plazo mediante inversiones productivas y con fines de desarrollo.

Si algo nos ha enseñado el pasado reciente y si “alguna” cepa de multilateralismo puede tener algún sentido para el mundo en desarrollo, son muchas las cosas que deberían cambiar; por ejemplo el uso discrecional de dineros públicos; los programas y proyectos de resultados intangibles, los ingentes costos de la asistencia técnica; los préstamos al sector privado y la información pública sobre proyectos del sector privado, por mencionar sólo algunas, y todas las cuales pueden ser expuestas conforme al enfoque que empleamos en el presente artículo. No está claro sin embargo todavía el alcance de los mentados cambios. Al fin y al cabo cambiar el poder de voto en los organismos no es otra cosa que repartir poder político, y por ahora el mundo desarrollado se lo está pensando. Pero el mundo en desarrollo ya no es el de otrora; su peso en la economía y el comercio mundial ha aumentado, y en consecuencia reclama mayor poder. Cuatro de los grandes países en desarrollo –Brasil, Rusia, India y China– esperan respuestas.

Raúl de Sagastizabal

Consultor Internacional

Montevideo, Mayo de 2009

Crisis Financiera Global y Guerra Monetaria

Autor: Raúl de Sagastizabal - Abril de 2009


Como comentara en cierta ocasión uno de los fundadores de las instituciones de Bretton Woods, Harry Dexter White, las guerras monetarias son la forma más destructiva de guerra económica. La guerra económica conduce por último a la guerra armada.

El mundo se acerca a su primer “bienio global perdido”, cuyo resultado en términos de crecimiento y desarrollo es devastador, y en término políticos es de final abierto.

Independientemente del resultado de las medidas, en realidad por ahora promesas de las cumbres del G-20, o de cualquier otro “G”, a esta altura parece improbable que en el corto plazo tales medidas puedan moderar los impactos de la crisis en la economía real.


También parece improbable que baste una declaración política para poner coto a una crisis que nadie sabe siquiera cómo evoluciona.

Si tomamos nota de que los valores respaldados por hipotecas son sólo un segmento de los valores respaldados por activos (que comprenden, entre otros, valores respaldados por préstamos personales, préstamos de consumo, cuentas por cobrar de tarjetas de crédito, préstamos para la compra de automotores), todos los cuales se basan, en el último escalón, en la demanda y el consumo, sólo tendremos que sentarnos a esperar las siguientes olas de la crisis, cuando la gente deje de pagar las cuotas de sus autos, o sus tarjetas de crédito, limite sus gastos, no tome créditos de ninguna naturaleza, o simplemente ahorre en lugar de comprar.

Si además consideramos que los fondos de pensiones, los fondos de inversión, privados o soberanos, y los propios organismos financieros multilaterales, tienen parte de sus inversiones en estos valores respaldados por activos, y que grandes corporaciones tienen garantizados sus préstamos con estos activos y otros instrumentos financieros estructurados, sin que nadie tenga certeza sobre la “toxicidad” de tales activos, cabe afirmar que la magnitud real de la crisis es desconocida.


La crisis lleva ya dos años de su irrupción en escena, y desde entonces no hace más que agravarse.

Hubo una vez, como dicen los cuentos, una crisis financiera global, resultado de una combinación peligrosa: especulación y avaricia, promoción abierta y activa de la apertura de los mercados de capital a bancos extranjeros e instrumentos financieros innovadores, y falta de control y regulación.

No parece difícil encontrar culpables: la banca y las instituciones financieras privadas, con la complicidad de las calificadoras de riesgo crediticio, los organismos multilaterales de crédito, promotores activos de la apertura de los mercados de capital y de los instrumentos financieros estructurados, y finalmente los gobiernos, que deciden en exclusiva, por un lado, en qué invierten sus fondos soberanos, y por otro la regulación y los controles internos.

Los miles de millones de dólares volcados en la banca en sucesivos rescates ponen en evidencia la magnitud del problema en los países industrializados. El foro elegido para buscar una salida concertada, el G-20, hace suponer que estamos ante la incapacidad de los líderes de los grandes países de dar una respuesta desde foros más cerrados, como el G-5 o el G-8, o bien, simplemente, ante una estrategia de reparto de costos para cuando se sientan los mayores impactos globales. Los países en desarrollo y las economías en transición, muchos de las cuales no tienen ni arte ni parte en la crisis ni en la solución, pagarán culpas ajenas con más pobres y desempleados, y endeudándose nuevamente, a cambio de promesas de mayor participación en la toma de decisiones, que tendrá lugar, si es que se concretan, entre el 2010 y el 2011. De los países en desarrollo de las Américas, hay dos señales a tener en cuenta: Brasil pondrá US$10.000 millones para recapitalizar el Fondo Monetario; México, por el contrario, solicita una línea de crédito del organismo por US$47.000 millones. Una tercera señal es la falta de un foro político regional para actuar como bloque, con más fuerza que aisladamente, para tratar de evitar las consecuencias más penosas y obtener algo en contrapartida por cargar con costos ajenos. China, por su parte, que es la tercera economía del mundo, cobra fuerza como actor en la toma de decisiones reclamando un lugar de par en la mesa chica, y a cambio acepta poner más recursos para reactivar la economía mundial, mientras mantiene su nueva estrategia de liderazgo comercial de facto, mediante acuerdos y swaps bilaterales y regionales. En los últimos tres meses el gigante asiático ha celebrado swaps por más de US$100.000 millones, ingresado como país miembro en el Banco Interamericano de Desarrollo y liderado el reclamo de reforma de la condicionalidad del FMI y de la redistribución del poder de voto en el organismo (su poder de voto en el Fondo es de tan sólo 3,67%, en tanto que el de Estados Unidos es de 16,83%). Los países industrializados, y no tanto, culpan a Estados Unidos por la crisis, en tanto éste sostiene que el consumo americano no puede ser el único motor del crecimiento, y que este último arrastró al mundo durante el reciente ciclo ascendente. Si embargo en esta crisis hay muchas responsabilidades y culpas compartidas. Esta es la crisis más predecible de la historia reciente. Sobraban las advertencias de que ese crecimiento era insostenible. Sobraban también las advertencias de la tormenta que se avecinaba. Pero, como señaló Charles Prince, Presidente y Director General de Citigroup, a un reportero a principios de julio de 2007 “mientras la música sonara había que seguir bailando”. Esto es tan válido para el sector privado como para el sector público. Sin embargo, a esta altura las causas de la crisis importan poco; en todo caso sólo para evitarlas en el futuro. Y ni siquiera sobre esto último hay certezas puesto que se habla de diseñar nuevas reglas e instituciones que reduzcan los riesgos sistémicos, “sin imponer cargas innecesarias ni ahogar la innovación”. A esta altura, en Londres, la urgencia era poner fin a la caída. Entre tanto, sobre la crisis se ha montado un debate económico y monetario, casi una guerra monetaria. Algunos líderes del mundo hablan de un nuevo orden económico y otros adelantan un nuevo orden mundial multipolar.

Desde comienzos de marzo la ruta a la cumbre de Londres aparecía jalonada de obstáculos insalvables. En particular en cuanto a las medidas inmediatas: la posición de Estados Unidos, que pedía un gran estímulo fiscal y rechazaba la idea de crear un superregulador y la de la Unión Europea que se negaba a inyectar dinero público en la economía y hacía hincapié exclusivamente en una mayor regulación y supervisión interna e internacional. En el camino aparecieron otros debates, tampoco menores, como el papel de China en la mesa de las decisiones, urgencia de fondos de algunas economías emergentes y países en desarrollo, los paraísos fiscales y la reforma de los organismos multilaterales de crédito. Y algunas sorpresas, como el documento del gobernador del Banco de China, proponiendo la creación de una nueva supermoneda de reserva, que podría ser el derecho especial de giro (DEG) del FMI. De inmediato la propuesta fue apoyada por Rusia, que ya había hecho un pedido similar, considerada legítima por el FMI, e impulsada rápidamente por el premio Nobel Joseph Stiglitz, quien desde su Comisión en Naciones Unidas adelanta que podría estar en curso en apenas 12 meses. La otra sorpresa, tal vez mayor, es que todos coinciden en reflotar a los organismos multilaterales de crédito, FMI y Banco Mundial, que llevan ya una larga década de desprestigio, tras tantos fracasos en la prevención y solución de crisis, episodios de corrupción y cuestionados resultados en materia de desarrollo, y que además, como ya se mencionó, son parte del problema. Los líderes del G-20 han acordado aumentar sus recursos para apagar el incendio en las economías emergentes y países en desarrollo y por ahora prometido un cambio en la condicionalidad y poder de voto. La magnitud del aumento indica la gravedad de los impactos previstos. La reforma en serio de los bancos multilaterales de desarrollo seguirá pendiente. Entre tanto varios países iniciaron una devaluación competitiva de los tipos de cambio y otros tantos adoptaron una gran cantidad de medidas proteccionistas. Para el 30 de marzo el escenario era de aquellos en los que todos pierden. El Presidente Obama llegó a la cumbre bajando el tono de las diferencias. Reconoció que las medidas que propone son costosas y que los contribuyentes reclaman certeza sobre el destino de ese dinero. Que temen que los gobiernos sigan poniendo dinero en rescatar a la banca, a la que consideran responsable de esta catástrofe, sin consecuencias para la solución de sus problemas concretos. Sostuvo asimismo que Estados Unidos no podía solo, que no estaba allí buscando culpables sino soluciones, y que la gente esperaba una muestra firme de esfuerzos concertados. No dejó de mencionar, sin embargo, que los países no podían esperar aumentar sus ingresos de exportación sobre la voracidad del consumo americano. Finalmente sostuvo que confiaba en llegar a una postura común. Contó no sólo con el apoyo británico frente al eje Alemania-Francia en la pelea entre estímulo fiscal o mayor regulación, sino que otros países, como los del BRIC (Brasil, Rusia, India y China), por ejemplo, compartieron su postura de impulsar la demanda y el consumo para reactivar el comercio y la economía en general. La suerte estaba echada: lo peor que podía pasar en Londres era que entre todos empeoraran las cosas. Entre bastidores primó la urgencia, y finalmente llegaron, por temor, a una solución de compromiso.

Al conceder cada bando algo de lo que el otro pedía, reconocieron responsabilidades compartidas. En ese sentido Estados Unidos ganó la partida: ya no es el único culpable y sólo es parte de la solución. Pero, como mera solución de compromiso, es apenas transitoria. Un respiro en tiempos de urgencia. Queda claro sin embargo que a partir de las medidas que se han acordado, ninguna inmediata por cierto, en el mañana inmediato hay sólo dos resultados posibles: que sean o no el punto de partida para revertir el desastre global. Queda claro también que en cualquiera de esos dos escenarios van a disputarse espacios de poder, otra vez, en otro nuevo orden mundial. Desde la segunda guerra mundial pasamos por la Guerra Fría y su orden de dominación bipolar; con la caída del Muro de Berlín apareció un orden unipolar, liderado por los Estados Unidos como potencia planetaria, y hasta no hace mucho todavía se insistía en que la globalización conduciría a la creación de instituciones supranacionales, militares, económicas y políticas; una suerte de gobierno mundial. Ahora parece asomar un mundo multipolar en el que ya se vislumbran tres grandes bloques: el anglosajón; el de Alemania y Rusia + Francia, y el de China y sus vecinos asiáticos. Cada polo parece dispuesto a pelear por su espacio y suponemos nuevamente a arrastrar a los países menores, que a lo sumo sólo podrán elegir donde alinearse. Repasemos un poco cómo fue gestándose esta nueva agenda y qué fueron planteando los principales actores de este tiempo turbulento. La siguiente es una recopilación seleccionada mínima de documentos que se han publicado en los grandes medios. Separados en tiempo y espacio parecen una noticia más en la superabundancia informativa; juntos anuncian sobre qué versará el combate futuro. 26 de septiembre (2008) Las máximas autoridades de Alemania culpan a Estados Unidos por la crisis financiera.

“Estados Unidos, y permítanme enfatizarlo, Estados Unidos, es el único culpable por la crisis financiera, … no Europa, ni la República Federal de Alemania”. El Ministro de Finanzas alemán predijo además que "el mundo nunca más será como era antes de la crisis; el sistema financiero se volverá más multipolar. Wall Street nunca más será lo que fue". 6 de febrero Una guerra comercial entre China y Estados Unidos empeorará la crisis global. Creciente preocupación en la comunidad internacional por una posible guerra comercial entre Estados Unidos y China en momentos en que el mundo necesita desesperadamente esfuerzos concertados para hacer frente a la crisis financiera global. El Secretario del Tesoro de los Estados Unidos, Tim Geithner, acusó a China de manipular el yuan.

China respondió que no tolerará la intervención de Estados Unidos en su proceso de adopción de decisiones sobre el tipo de cambio. 10 de marzo Stiglitz pide una solución global a la crisis. “Naciones Unidas es la única institución que puede impulsar las medidas necesarias". "Necesitamos un nuevo comienzo". 12 de marzo Las medidas adoptadas por Suiza encienden la chispa de una guerra monetaria. El Banco Nacional de Suiza intervino el jueves en el mercado de cambios para devaluar el franco suizo: ésta es la primera vez que un gran banco central interviene en este sentido, desde que Japón hizo lo propio en 2004, para devaluar el yen. "Esta medida es el inicio de guerras monetarias", dijo Chris Turner, de ING Financial Markets. Países de todo el mundo, enfrentados con el problema de tasas de interés cero, pueden considerar aceptable intervenir para devaluar sus monedas de modo de facilitar las condiciones monetarias, dijo, y agregó que otras economías dependientes de las exportaciones, como Japón, probablemente estén “a la cabeza de la cola".


Marzo 16:

Rusia propone la creación de una supermoneda de reserva mundial

“La creación de una moneda supranacional de reserva que sería emitida por las instituciones financieras internacionales”.

“Las decisiones que debemos tomar en la cumbre de Londres deben ser no sólo adecuadas para la situación actual, sino además para satisfacer las exigencias de un nuevo mundo post crisis”.


17 de marzo:

Preocupante aumento de las medidas proteccionistas desde el inicio de la crisis financiera

En una nueva investigación del Banco Mundial se señala que, desde noviembre de 2008, cuando los líderes del Grupo de los Veinte (G-20) suscribieron un acuerdo mediante el cual se comprometían a evitar medidas proteccionistas, varios países, entre ellos 17 miembros del G-20, han adoptado 47 medidas que restringen el comercio a expensas de otros países.

“Los líderes no deben escuchar el canto de sirenas que los impulsa a aplicar medidas proteccionistas, ya sea en el comercio, en los paquetes de reactivación económica o las operaciones de rescate”, señaló el presidente del Grupo del Banco Mundial, Robert B. Zoellick. “El aislamiento económico puede generar una espiral de acontecimientos negativos como los que ocurrieron en los años treinta, que profundizaron la gravedad de una situación que, de por sí, ya era mala”.


19 de marzo:

Valores para una economía mundial sostenible

La actual crisis financiera mundial trae consigo una oportunidad para crear un nuevo orden económico, sostuvieron la Canciller alemana Angela Merkel y el Primer Ministro Holandés, Jan Peter Balkenende.


22 de marzo:

Nuevo análisis: La Unión Europea adopta un enfoque diferente frente a la crisis financiera

Autoridades de los Estados Unidos han pedido repetidamente a los países de la UE que tomen medidas de estímulo fiscal para impulsar la demanda, como medio para salir de la actual crisis financiera. En vísperas de la cumbre de la Unión Europea, Merkel y el Presidente francés Nicolás Sarkozy recalcaron que la posición común de la UE para la cumbre de Londres se centrará en la construcción de un nuevo sistema financiero internacional. Esta posición fue adoptada por todos los líderes de la UE. En la reunión de los ministros de finanzas y autoridades de bancos centrales de los países del G-20, que tuvo lugar el 14 de marzo, Brasil, Rusia, India y China – que forman el llamado grupo "BRIC" – pidieron la adopción de medidas inmediatas para ampliar el poder de esos cuatro países en el FMI. Aparentemente existen desacuerdos incluso entre los tres grandes de la UE, Gran Bretaña, Francia y Alemania. Estos dos últimos temen ahora que en la cumbre de Londres, Gran Bretaña cambie su actual postura y apoye finalmente a los Estados Unidos, lo que debilitaría la posición europea común. 23 de marzo Gravísima crisis económica, riesgo de disturbios y guerra. La crisis empujará a millones de personas a la pobreza y el desempleo, aumentado los riesgos de desórdenes sociales e incluso guerras. Se requieren medidas urgentes, dijo el Director Gerente del FMI Dominique Strauss-Kahn. "Todo esto afectará dramáticamente al desempleo, y éste, en muchos países, provocará desórdenes sociales, peligros para la democracia y en algunos casos podría también culminar en guerras". 23 de marzo Reforma del sistema monetario internacional - Gobernador Zhou Xiaochuan. El estallido de la crisis actual y su propagación en el mundo nos confrontan con una pregunta de larga data que aún no tiene respuesta; qué tipo de moneda de reserva internacional necesitamos para garantizar la estabilidad financiera global y facilitar el crecimiento económico mundial, que fue uno de los objetivos al crear el FMI. Confiar parte de las reservas de los países miembros a la administración centralizada del FMI no sólo mejorará la capacidad de la comunidad internacional de hacer frente a las crisis y mantener la estabilidad del sistema monetario y financiero internacional, sino que ampliará el papel de los derechos especiales de giro (DEG)


24 de marzo:

China apunta al dólar

China pide la creación de una nueva moneda que eventualmente reemplace al dólar como parámetro mundial, reflejando un creciente descontento con el papel de los Estados Unidos en la economía global. La inusitada propuesta, formulada por el gobernador del Banco Central de China Zhou Xiaochuan, en un ensayo publicado ayer en Beijing, es parte del firme y progresivo enfoque de China en la búsqueda de una respuesta global a la crisis financiera. La propuesta del gobernador Zhou fue presentada en medio de los preparativos para la cumbre de países industrializados y en desarrollo, el Grupo de los 20, prevista para la próxima semana, en Londres. En el pasado, en esas reuniones, las naciones desarrolladas han criticado las políticas económicas y monetarias de China. Esta vez China está a la ofensiva, respaldada por otras economías emergentes, como Rusia, dejando claro que quiere un nuevo orden económico mundial menos dominado por los Estados Unidos y otras naciones ricas. La propuesta del lunes sigue a otra similar formulada por Rusia este mismo mes. Al igual que China, Rusia recomienda que sea el Fondo Monetario Internacional el que emita la nueva moneda, e hizo hincapié en la necesidad de actualizar el “obsoleto orden económico mundial unipolar". 25 de marzo El debate sobre una nueva moneda de reserva mundial es legítimo: dijo el Director Gerente del FMI. El Director Gerente del FMI, Dominique Strauss-Kahn dijo este miércoles que es “legítimo” el debate sobre una nueva moneda de reserva que reemplazo al dólar, lo que podría tener lugar “en los próximos meses".


27 de marzo Angela Merkel:

“Cuando pase la crisis, habrá que barajar, dar de nuevo y ver quién salió fortalecido”

La canciller rechaza la idea de EE.UU. de que Alemania impulse la demanda interna para contribuir a reequilibrar una economía mundial asimétrica. Merkel considera que más crucial para el futuro que fortalecer el consumo es asegurar que las empresas alemanas no pierdan su liderazgo tecnológico. “China hará lo mismo. EE.UU. hará lo mismo”. Estamos hablando de crear una nueva arquitectura para el mercado financiero mundial y no podremos darle forma final en la reunión de Londres … Tendremos que volver a reunirnos.


30 de marzo:

La nueva moneda de reserva podría llegar rápidamente

La propuesta de un sistema de moneda de reserva basado en la unidad del FMI, en lugar del dólar de los Estados Unidos, presentada por China, podría introducirse paulatinamente en el curso de un año, sostuvo el jueves el economista ganador del Premio Nobel, Joseph Stiglitz.

“El sistema de reserva basado en el dólar es deflacionario, inestable y conlleva además algunas desigualdades" dijo Stiglitz.


31 de marzo:

Fortalecer la cooperación financiera regional e impulsar activamente swaps de moneda - Banco Central de China

Desde la irrupción de la crisis financiera internacional, el banco central de China ha participado activamente en iniciativas de cooperación a nivel internacional y regional, incluida la firma de unos pocos acuerdos de canje de moneda con países y regiones vecinas, lo que ha mejorado la confianza y capacidad de las partes involucradas para manejar la crisis en curso. Recientemente el BCC ha suscrito seis acuerdos de canje de moneda con otros bancos centrales (autoridades monetarias), por un total de 650.000 millones de yuan, incluidos el acuerdo marco suscrito el 12 de diciembre de 2008 con el Banco de Corea por 180.000 millones de yuan, los acuerdos formales suscritos con la Autoridad Monetaria de Hong Kong por 200.000 millones de yuan, el 20 de enero de 2009, con el Bank Negara Malaysia por 80.000 millones de yuan, el 8 de febrero, 2009, con el Banco Nacional de la República de Belarús, por 20.000 millones de yuan, el 11 de marzo de 2009, y con el Banco de Indonesia, por 100.000 millones de yuan, el 23 de marzo de 2009. El 29 de marzo de 2009, en forma paralela a la Reunión Anual del Banco Interamericano de Desarrollo, el Gobernador Zhou Xiaochuan suscribió con el Banco Central de Argentina un acuerdo marco sobre canje de moneda por 70.000 millones de yuan, que pronto será seguido por el correspondiente acuerdo formal.


1 de abril:

Beijing anota otro tanto en la guerra monetaria al hacer que Argentina utilice el yuan

Beijing pone presión sobre Washington mediante el acuerdo de swap de monedas celebrado entre China y Argentina para no utilizar el dólar estadounidense en su comercio bilateral. Procurando forzar a Estados Unidos a reducir su control sobre las instituciones financieras mundiales, China anunció ayer un acuerdo con Argentina. China ha venido presionando para terminar con la dominación internacional del dólar. El economista Ben Simpfendorfer, del Royal Bank of Scotland, manifestó que podría estar en juego "la adopción de facto del yuan como unidad de moneda asiática", lo que convertiría a China en el mayor asociado comercial de la mayoría de los países asiáticos.


2 de abril:

El acuerdo de hoy del G-20 resolverá la crisis financiera, sostuvo Gordon Brown

“Este es el día en que el mundo se unió para luchar contra la recesión global”, sostuvo el Primer Ministro, dado que el G-20 acordó un plan de recuperación económica. "Creo que un nuevo orden mundial está emergiendo, sentando las bases de una nueva era progresista de cooperación internacional" dijo Brown.

El Presidente francés dijo que había comenzado una nueva era en el mundo de las finanzas globales: "Desde Bretton Woods el mundo ha vivido conforme a un modelofinanciero, el modelo anglosajón, no soy quien para criticarlo, ha tenido sus ventajas, pero, claramente, hoy se ha dado vuelta la página".


3 de abril:

"El FMI ha vuelto"

El título no es un eslogan sino la frase de apertura de Dominique Strauss-Kahn, el exultante director del Fondo Monetario Internacional, para describir el nuevo rol de la cuestionada institución financiera tras la Cumbre del G-20. ¿Sigue pensando que la crisis puede provocar rebelión social? -Yo dije que, según la decisión que adoptaran los líderes, podíamos encontrar una salida a la crisis. Si no se hacía nada, en países pobres podían surgir revueltas, amenazas a la democracia o guerra civil. Tengo confianza en que la decisión adoptada es la prueba de que no estamos más en la encrucijada, sino que estamos mejor.


3 de abril:

Entrevista al Presidente Lula da Silva:

"Podemos cambiar si queremos"

El mandatario brasileño no sólo se refirió a un nuevo orden económico, sino también a un nuevo escenario político en el que América Latina estaría jugando un papel importante. “Cada peso de cada financiamiento tendrá que generar una prenda, un zapato, un auto, una camisa. Es para esto que existe el sistema financiero y no sólo para vender acciones de papel”. ¿Qué piensa que nuestros hijos y nietos obtendrán de esta cumbre? Quiero decir: ¿será una de las muchas cumbres que se hacen o será éste un punto de inflexión para la economía mundial, por la manera en que el mundo será reorganizado? “Le pido a Dios que mis nietos no se avergüencen de esta cumbre dentro de 15 ó 20 años”.


4 de abril:

El Presidente Obama habla en la Cumbre del G-20

"No comparto la idea de que Estados Unidos no pueda ir a la cabeza en el mundo", dijo Obama, pero agregó que es "muy importante para nosotros que podamos forjar asociaciones en lugar de soluciones impuestas". "En la vida no hay garantías, en la economía no hay garantías. Siempre hay riesgos. Sin embargo, no dudo que los pasos que se han dado son decisivos para prevenir que nos deslicemos hacia una depresión". Esas medidas "eran necesarias" dijo Obama. “Tendremos que esperar y ver si son suficientes".


Autor:

Raúl de Sagastizabal - Abril de 2009

Políticas ante la Crisis



Las Similitudes de las Políticas de EEUU y Argentina

Autor: Lic. Aldo M. Abram

Según nuestro gobierno, EE.UU. estaría copiando las políticas de la gestión K. No sabemos si Obama habrá leído a Perón; pero parece que algunos funcionarios locales leyeron un artículo que publiqué en un diario el 1 de octubre de 2008, “EE.UU. cae por argentinización”. No hay duda que podemos enumerar algunas similitudes entre las políticas económicas del pasado reciente de ambos países, que justifican lo que está pasando la potencia del norte.



Desde que asumió en 2000, el Presidente Bush se dedicó a aumentar el gasto fenomenalmente, acumulando enormes déficits fiscales; con lo que colaboró a impulsar artificialmente el nivel de actividad y a gestar la actual crisis. Durante el gobierno K, también, se forzó el crecimiento de la economía incrementando las erogaciones del sector público en función de los aumentos extraordinarios de recursos provenientes de la bonanza internacional, la recuperación de la actividad local y el fuerte incremento de la presión tributaria. No se ahorró nada para las épocas de “vacas flacas” y, ahora, habrá que aguantar un ajuste económico “sin anestesia”. Sin embargo, en este punto, sí hubo una diferencia entre ambos países; ya que, al no tener crédito suficiente, el gobierno argentino se vio obligado a tener algún ahorro primario para evitar caer en un nuevo default.

El ex-Presidente Bush dejó a las generaciones futuras una enorme deuda pública, que ahora se incrementará más aún para pagar el costo de la “fiesta” de su período de gestión. En los últimos siete años, la Argentina se dedicó a destruir su credibilidad, es decir su crédito; incumpliendo sus compromisos, haciéndole enormes quitas a los deudores en default y dejándole la deuda a pagar a nuestros hijos y nietos. Como “cereza del postre”, la estatización del sistema de capitalización permitirá al gobierno gastar más en el presente año electoral, a costa de heredarle un impagable pasivo previsional a las generaciones futuras.

Desde principios de siglo, la Reserva Federal se dedicó a “inflar” la economía y los mercados estadounidenses, inundando de liquidez el mundo. Esta estrategia, insostenible en el tiempo, es la que llevó a la actual debacle financiera e incentivó a los inversores y bancos a asumir cualquier riesgo para ganar un centavo más. Por supuesto, en la Argentina, la política de tipo de cambio real alto, implicó básicamente lo mismo; ya que significó una fuerte expansión monetaria para seguir la depreciación del dólar, comprando reservas. Ahora, el ajuste mundial encuentra al Banco Central local con menos instrumentos para enfrentar la crisis; por que los niveles de inflación, que ya eran excesivamente altos, se potenciarían con una mayor devaluación.



Hasta acá, algunos puntos en los qué se parecieron las políticas pasadas de ambas naciones. Sin embargo, si bien es cierto que, para enfrentar la crisis en EE.UU., su gobierno se hizo accionista de varias empresas y bancos, fue sin ánimo de tomar el control o de sustituir al sector privado, sino para preservarlo. En cambio, en la Argentina, la gestión K llevó adelante una estrategia explícita de estatización o “argentinización” de empresas de servicios públicos de accionistas extranjeros; mediante el ahogo de tarifas congeladas y el uso del enorme “poder de convicción” de un Estado con nulos límites institucionales.

Otra diferencia, en EE.UU. y el mundo, los gobiernos se preocuparon por tratar de sostener sus sistemas bancarios y sus mercados de capitales. Por su parte, la gestión K importó la crisis financiera internacional con la confiscación de los ahorros para la vejez de los afiliados a las AFJPs. Junto al mal manejo oficial de la crisis con el campo y al empeoramiento de la crisis internacional desde mediados de 2008, esta decisión provocó una fuerte fuga de capitales, mayor a la de la crisis 2001-2002. Es decir, los argentinos de todos los niveles de ingresos, preocupados por el futuro del país, ahorraron (dejaron de consumir e invertir) y sacaron sus depósitos de los bancos para comprar divisas y mandarlas al exterior, guardarlas en una caja de seguridad o en el fondo de un placard. Por lo tanto, la demanda interna empezó a desacelerarse y a descender, arrastrando al nivel de actividad y empleo.

Tampoco hemos escuchado que en los países desarrollados se plantee la estatización del comercio de exportaciones u otras ideas en las que, supongo, el gobierno pretende hacer “punta” nuevamente. Por ello, además de un potencial nuevo conflicto con el campo, otro de los principales factores locales de riesgo futuro es que nuestro gobierno quiera seguir dando “cátedra” e “innovando” con resucitadas medidas que ya fracasaron en el pasado y que profundice el rumbo estatista e intervencionista actual. De esta forma, la economía argentina se volverá más vulnerable y pagaremos un costo mayor, en términos de producción, empleo y bienestar, en el marco de las actuales turbulencias internacionales.

Por el Lic. Aldo M. Abram, Director Ejecutivo del Centro de Investigaciones de Instituciones y Mercados de Argentina (CIIMA-ESEADE)

Ordenador de la Deuda

INTRODUCCION:



Se divide en dos estudios introductorios:

a.- Reitra los conceptos principales del libro “RESERVAS MONETA-RIAS en la formación del crédito”“BASES PARA UN ORDENADOR DE LA DEUDA”.- Editado En el año 2000.- Editorial Dunken.- Bs. As.

El objetivo es que el lector pueda ir a la segunda parte con una orienta-ción clara de los conceptos más importantes expuestos en el libro.-



a.- primera parteEstudia el mercado donde actúan “deudores-acreedores” el que está influí-dopor las variables de la economía produciendo, entre otros efectos, alte-raciones en las expectativas que motivan a de los operadores a efectuar negocios al tiempo de tomar decisiones.-

En este medio, en donde también ocurren e influyen acontecimientos socia-les y naturales, se desarrolla el “crédito” nexo entre el deudor y acreedor que es relación permanente del movimiento económico.-

Por último, y dentro de éste contexto, queda el “pago” o la cancelación de la deuda, como cierre del ciclo y que ocurrirá, en la granmayoría de los casos, en tiempo futuro al “crédito”.-



Es decir, el “crédito” nace permanentemente, al igual que la “cancelación” dentro de “tiempos” diferentes donde las “variables señaladas” cambian o pueden cambiar.-

En éstas circunstancias el “pago” de los créditos otorgados está ligada no sólo a la calidad del “deudor”. sino también a una serie de factores muy di-versos, la mayoría y más importantes, ajenos al origen de los créditos y ala voluntad de los contratantes.-

Si se cumplen las expectativas de origen de la relación “deudor-acreedor” se producirá el “pago” en el tiempo acordado y en tal caso la operación oel ciclo puede repetirse en condiciones aceptables.-

Sin embargo cuando algo negativo ocurre en el sistema, cuya naturaleza es el movimiento, las expectativas cambian y ya no guardarán relación con lasde inicio o partida.-

Cabe señalar que si los factores negativos no cesan en un determinado punto, que será variable según el operador económico-financiero que se trate semovilizan los conceptos sobre el estado de la situación económica-financiera en sentido desfavorable.-

Estos hechos producen la entrada a una nuevafase donde decae la confiabilidad y con ella, en mayor o menor medida y en diferentes tiempos y formas, se traslada a las decisiones que tomarán los “deudores-acreedores” que actúan en el mercado.-

La “deuda”, en éstas condiciones, crecerá (por mayores costos motivados, entre otros, por menores ventas, o ventas a o plazos mas largos), el aumento de la tasa de Interés” con lo cual y,más allá de las resultados esperados,posiblemente se esté operando con márgenes menores.-

En otro órden, y en tanto, en la cumbre de la pirámide económica-financie-ra en torno a un avance tecnológico excepcional que llega a casi todos loscampos de la actividad humana, se han producido cambios profundos quetienden a ser exponenciales.-

Nueva tecnología en bienes y servicios, a otros costos y formas de ventapueden dejar fuera de mercado, en poco tiempo, a un número considerablede productos y productores.-

Todo ello también está relacionado con el ritmo vertiginoso y la velocidadextraordinaria en que opera el centro económico-financiero, difícil de se-guir y de predecir, en particular para los países en la medida que descien-den en la escala económica.-

Este gigantismo está acompañado de otro hecho como es la “globalización”que produce efectos más generales (atento que abarca a más países con mercados distintos), quizá, no considerados cuidadosamente.-

En éste cuadro de situación, el autor estima, que el sistema debe y puedeadaptarse para licuar los efectos negativos que produce.-

Por último, es de destacar, que lo expuesto es una exposición que procura sólo ubicar el planteo de la situación pero que esta lejos de estar agotado.

Por otro ladoéste trabajo, esun conjunto de ideas que necesitanun desarrollo y estudio más profundo.-

ESTOS CONCEPTOS FUERON EXPUESTOS EN EL AÑO 2000.- EN EL LIBRO “RESERVAS MONETARIAS EN LA FORMACION DEL CREDITO”“BASE PARA UN ORDENADOR DE LA DEUDA”

b.- Desde la publicación del libro aludido más arriba, hasta la fecha“año 2008” el autorcreyó oportuno presentar una forma más pragmática de llevar a cabo lo que estima serían, en gran parte, unanueva forma o método para encarar los difíciles tiempos venideros.-

Cabe destacar que si se hubiese procedido como se señalaba en aquellaoportunidad creando reservas monetarias en la moneda de pago es muy probable que la situación hubiese sido otra mejor a la actual.-

Hoy podemosapreciar, con más claridad, que estos errores acumulativos entregaron resultados negativos como la “crisis” actual (año 2008) que comienza a verse como incontrolable en sus consecuencias y que dejó a la vista parte de su magnitud.-

Estalla en el sistema financiero de donde provino el descontrol y ahora se está a la expectativa por el efecto que tendrá en la economía real .-

De cualquier manera los desaciertos comienzan mucho más atrás y se fueron agravando para llegar a éste resultado con un Estado que alentó, con medidas erróneas, a que se produjera éste verdadero ” agujero negro” (haciendo alusión al fenómeno conocido en astronomía donde la enorme fuerza de gravedad que tiene, éste, absorbe y traga todo lo que está cercano).- Van desapareciendo empresas de primer nivel por quiebras.-

La crisis que asistimos proviene, en la práctica de las transacciones, de la ineficiencia de los controles de todo tipo ante la enorme rapidez en queson superados por medios computarizados en tiempo real y de un conceptodemasiado laxo sobre la naturaleza de la función del Estado en el mercado.

Que sentido tienen los controles estatales y privados tradicionales ante ésta realidad de operaciones inmediatas con un pulso de computación?

Como serán las transacciones futuras y que tipo de documentos o valores serán suficientes para garantizar el pago?

Como y cual debe ser la función del estado?

Esto no exime a las políticas de Estado desafortunadas, en gran parte los hacedores de ésta situación, y tampoco a aquellos que usaron de manera inconciente o haciendo caso omiso de los indicios negativos claros que i-ba dando el mercado con quiebras y derrumbes que no podían obviarse.-

Así fue posible que, con éstos vetustos sistemas de control y sin entrar aconsiderar otros motivos ,una empresa financiera de muy buen nivel se comprometiera asumiendo deudas que superaban 32 (treinta y dos veces) su capital –

No se reúne una cantidad de deuda impaga de ésta magnitud, ni sumas de ayuda del estado como a la que asistimos, ni todos los países involucrados sin que nos preguntemos “se seguirá con un sistema queya no da los resultados esperados o realmente se cambiará”

Fué un descontrol que llegó y parece que no dejó de pegar en todos los estamentos tanto públicos como privados.-

Como se expresó antes, éste es un conjunto de ideas y de proponer una so-lución concreta.-

Pero no puedo dejar de señalar, por lo grave de los acontecimientos, los conceptos de IMMANUEL WALLERSTEIN, investigador de sociología de la Universidad de Yale y teórico de “economía-mundo” que estima “que el capitalismo, como lo conocemos, estaría en su fase final”.- Queda, como ha sucedido antes, el esfuerzo y trabajo para corregir los problemas y este es un pequeño aporte.-

NUEVO MARCO CONCEPTUAL

El nuevo eje conceptual pasa por incorporar el “pago” a la relación “deuda-crédito” con el que forman una unidad y un método para lo-grar una tendencia concreta para hacer posible el “pago”.-

Es un replanteo entre “deuda-crédito” y el “pago” al vincularlos a lastransacciones y no a la ganancia o responsabilidad del deudor a lo quese agrega el correlato de “resguardos monetarios”que los une en unsistema marco.-

Se trata de lograr una suerte de “registro general de todas las transa-cciones que fuere posible” como primer paso.-

Los objetivos resultan obvios.- Con ésta información, que sería en tiemporeal, el estado y los particulares, con los datos recogidos pueden ajustar susdecisiones y medidas.-

Este informadorde la situación general pasará a convertirse en unordenador y deberá ser transparente para conocimiento del Estado y delsector privado.-

Una herramienta actualizada, como la que se propone,permitirá tomar decisiones y ajustes de diverso tipo.-.El estado podrá alentar por medios monetarios o fiscales a rubros que lo re-quieran o ajustar el plan económico general a las tendencias dominantes yotras que ahora contarán con información precisa.-

Es decir, tomar medidas adecuadas, antes que estalle el sistema o produzcadaño difícil de erradicar.-

Este sistema está pensado para cubrir a gran parte del sistema económico-financiero, y quizá pueda reducir a un mínimo los períodos negativosquesiempre existirán puesto que no es posible cubrir todas las contingencias.-

RESGUARDOS MONETARIOS

Es un objetivo secundario, en la secuencia del trabajo, que se considera perfeccionará el sistema propuesto.-

Se parte de la constitución de “resguardos monetarios” al momento de concretarse la relación “deudor-acreedor”.-

Lo constituye el deudor a favor del acreedor y estará indisponible para ambos.- No es un impuesto, es un activo indisponible con capacidad de serusado de acuerdo con las normas que se fijen.-

La norma aludida es cuando el “deudor” reúne las condiciones de incobra-bilidad o cuando la transacción fué liquidada donde se devolverá el depósito.-

Los “resguardos” se depositarán en una institución creada al efecto y que acá se la denomina “fondo único”

Habrá transacciones que deberán contar con un alto grado de certeza de pa-go con lo cual el “resguardo monetario” a favor del acreedor será en pro-porción o relacionado con el riesgo.-

Los “acreedores con los deudores” evaluarán la garantía a depositar, y don-de el estado puede o no apoyar determinados rubros con distintas medidas.-

Lo expuesto no invalida la actuación de seguros contratados a tal efecto,pero éstos deberán ser informados al fondo unico.-

La finalidad es que el “acreedor” cobre su crédito.-

MEDIDAS ESPECIALES

Están relacionadas con el cumplimiento de denunciar la/s operaciones y e-ventualmente de depositar el “resguardo” dentro del “Ordenador de la deuda” y el “Fondo Unico” según el caso.-

La naturaleza de ésta crisis no permite crear otro sistema anémico o sin quese cumpla con el objetivo propuesto.-

Tendrán que crear normas terminantes.-

Si una dupla de “deudores-acreedores” no cumple con la denuncia de la operación o depósito serán sancionados.-

Por ej. El acreedor perderá el derecho a cobrar y el deudor tendrá quepagar la totalidad de lo pactado al Estado.-

Este ejemplo debe tomarse en el sentido del contexto general en que está expresado éste informe.-.

Del estudio saldrán otras variantes más aceptables o que lleguen al objetivo propuesto por otras vías.-

Por último hay una enorme masa de dinero fuera del circuito legal.-

Acá debe entenderse claramente que el autor se refiere a la “masa mone-taria” y no entra a considerar otros motivos más que el efecto sobre la economía y la parte financiera (en particular).-

Quizá haya que sincerar los problemas que generan ésta situación y lograr que esos fondos se encaminen hacia lo que podríamos llamar sistema legal de transacciones.-

No se puede ignorar que existen y tampoco que propicia la corrupción y crean condiciones de permisividad.-

BASES POSIBLES SOBRE COMO SERAN LOS APORTES.-

Ingresarán directamente al FONDO UNICO y será prudente consideraresta información como protegida de otro uso para evitar confusionessobre su propósito.-

Debería procederse rubro por rubro y en tiempos distintos.-La experiencia traerá el perfeccionamiento de los instrumentos ausar.-

En éste caso, individualizado el origen del desorden parece apropiado comenzar por la parte financiera y sus operaciones de riesgo.-

La confiabilidad que se obtendrá será muy rápida en la medida que lo pac-tado se cumpla.-

Para ello se contará con los resguardos y la información previa que decidi-rán los “deudores-acreedores” a hacer negocios.-

EL RESGUARDO MONETARIO EN LA MONEDA PACTADA es unaManera de formar un conjunto de garantía de pago que puede mejorara laschances del “acreedor” a percibir su “crédito”.-

Aquella operaciones (en especial las especulativas) que tengan un alto contenidode inseguridad deberán con un alto porcentaje de reservas monetarias en la moneda pactada y en efectivo.-

Depositadas, en éste caso, por el deudor y el presunto acreedor (por ej.los derivados) ya que en éstos casos se conoce al “deudor” cuando seliquida la operación.-

Aumenta el riesgo debe aumentar la reserva.-

ALICUOTAS QUE SE ESTIMAN DEBEN DEPOSITARSE

El sistema está pensado, conceptualmente, en que la mayoria de las ope-raciones queden registradas para tener UN ORDENADOR confiable almomento de tomar decisiones.-

Sin embargo, EL RESGUARDO MONETARIO EN LA MONEDA PAC-TADA, es una manera de formar un conjunto de garantía de pago que pue-de mejorar las chances del “acreedor” a percibir su credito.-

Si un deudor hace un aporte sobre una transacción es probable que los Ban-cos, hagan otro tanto para apoyar la ejecución de la operación y quizá el es-tado ayude con otro cantidad similar, en busca de promover un sector.-

El monto de la alícuota, que puede ser variable según la relación entre “deudor y acreedor,”.- Habrá operaciones que requieran un monto alto.-.

Al empezar se estima que puede ser del l% (uno por ciento) de lo transado.-

Se va a ir generando una suerte de SUMATORIA de posibles interesadosen participar con aportes donde comienza a perfilarsela CONFIABILIA-BILIDAD.-

De ésta manera habrá más negocios y quizá un poco menos de márgen peroel“pago”, a medida que aumente su certeza, hará que este activo se consi-dere de otra forma dentro de un balance empresario.-

La empresa con éstos activos distintos y privilegiados contará con más oportunidades de conseguir créditos a tasas más bajas y otros negocios.-.-

MONEDA PACTADA

Será la del contrato entre el “deudor-acreedor” y es la que se usará en la formación de los resguardos.-

No podrá ser cambiada, salvo, que por expresa disposición del “deudor-a-reedor”.- Los terceros involucrados tampoco podrán hacerlo.-

JURISDICCION DEL FONDO UNICO

Se entiende por jurisdicción aquella que, fijado los límites geográficos del“Fondo Unico” (que puede ser uno o varios edificios o superficie adecuada)el estado y los terceros (salvo los interesados directos) requieren de diver-sos requisitos para ingresar.-

No se trata de requisitos mínimos, la jurisdicción distinta al estado tiene unStatus jurídico similar al de otro país, donde pueden o no atender reclamos o solicitudes.-

NO SE PODRA CON OTRA LEY, CONVENIO O COMO SE DENOMINE CAMBIAR EL DESTINO ORIGINAL DEL DEPOSITO.-Para ello será necesario el consentimiento expreso de todas las partes(acreedor y/o deudor y/u destinatarios), operación que se practicará den-tro del Fondo Unico el que homologará el nuevo contrato.-

Es evidente que dentro de la crisis no habrá mayor confianza en que se cumpla con lo expuesto atento que el estado demostró saltear normas queparecían inalterables.- En tal sentido serán los juristas que puedan apor-tar formulas que perfeccionen la naturaleza de lo que se espera lograr.-

CONTRATO DE DEPOSITO

Es la figura jurídica que se estima identifica al Fondo Unico.-

La única operación que puede hacer es recibir y devolver lo recibido al depositante y/o al acreedor según el contrato dondedebe existir unaclaúsula “gatillo” clara y concreta para proceder.-

Estos conceptos son los rudimentos jurídicos que serán pulidos por losjuristas.-

En cuanto a la Organización del “Fondo Unico” parte de ser un depositarioy tratándose de dinero o valores la forma se asemeja a la de una Instituciónbancaria de depósito (no realiza operaciones comerciales o especulativas”.

Puede financiarse mediante una comisión que cubra sus gastos.-

RESUMEN: Lo expuesto, y las definiciones sobre la forma práctica quede cómo se podría constituir tanto el “ORDENADOR DE LA DEUDA”,como el “FONDO UNICO” deben tomarse como indicativas para realzarla naturaleza de lo que se propone.-

Es evidente que se trata de una acción concertada de los países ya que tantoel “ORDENADOR DE LA DEUDA” como “EL FONDO UNICO” será deverdadera utilidad si, como se dijo, SE PUEDEN CONTABILIZAR TODAS LAS OPERACIONES POSIBLES.-

Cada país, si bien es independiente del resto, las transacciones que se rea-licen por éste sistema estarán fuera del alcance de los mismos salvo que intervengan apoyando con dinero o descuentos fiscalespor los “deudores-acreedores” y por lo ingresado.-

Será efectivo contar con un método que relacione las transacciones con elpago y que además que genere sus propias “reservas monetarias en la moneda pactada” al margen de los resultados y distinto de la responsabi-dad patrimonial.-

Se estará en inmejorables condiciones al contar con un “ordenador de la deuda” que se irá perfeccionando hasta alcanzar un grado de estado de si-tuación puntual en tiempo presente y tomar decisiones antes que se pro-duzcan los acontecimientos negativos.-

Es posible que la propuesta tenga sus peores detractores en quienes se verán afectados por éstas medidas, en particular, cuando la crisis parezca que tiende a licuarse o desaparecer.-

La constitución de “reservas monetarias” inmovilizadas, como fue expues-to, será de utilidad dentro de una política monetaria ya que podrá extraer del mercado (sin emitir bonos u otros valores), y esterilizar en parte, esaenorme masa de dinero que hoy fue emitida u comprometida por el estado

Esta crisis no es una más, es una sumatoria de errores, que se han instalado en todo el sistema.- Esperamos que la humanidad, como ha sucedido en otras etapas históricas, no se muestran indiferentes y reacias a un cambio.-

Parece que caminar hacia el abismo formara parte de la naturaleza del hombre que tiende a repetir los mismos errores.-

Si no se efectúa un cambio de sistema,las crisis serán más frecuentes y desvastadoras.- Esperemos que de cualquier forma no ocurra.-

Octubre del año 2008.-

Dr. Raul Greco

Extratos del libro "RESERVAS MONETARIAS EN LA FORMACION DEL CREDITO-

BASES PARA UN ORDENADOR DE LA DEUDA".-

1999 Raúl E. Greco - ISBN 987-518-329-6,

Para información ampliada acerca de éstos temas no dude en visitarnos en nuestra

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www.ordenadordeladeuda.com

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Algunas Ideas Para Enfrentar la Crisis



Lic. Aldo Abram

18 de febrero de 2009

No solamente el efecto de la sequía amenaza el nivel de actividad de la Argentina, también la posibilidad de vivir un nuevo conflicto agropecuario. En el segundo trimestre del año pasado, el Gobierno manejó mal la crisis con el sector y esto incentivó una fuerte fuga de capitales. Cuando se habla de esto, la gente se imagina un señor rico, con un maletín lleno de dinero, saliendo por el aeropuerto de Ezeiza. Sin embargo, también es gente común y corriente que ahorra (es decir, que deja de consumir e invertir) para, junto con todo peso que tiene a mano, comprar divisas y guardarlas en el fondo del placard o en una caja de seguridad. Además, con el mismo fin, se retiran los depósitos del sistema financiero y, de esa forma, se desfinancia y también se reduce la demanda interna, por lo que los empresarios producen menos y aparecen las tendencias recesivas. Pues bien, si en un momento de altos precios de las commodities y de mucho menor nivel de incertidumbre mundial el costo pagado por el país fue tan alto, cabe imaginarse lo que podría suceder ahora.

Por lo tanto, ambas partes deberían dialogar y asumir el compromiso de evitar resucitar la crisis. Por su parte, los dirigentes del campo deberían tratar de no pedir cosas que son incompatibles entre sí. Es cierto que el Gobierno debe asistir a aquellos que sufren el duro impacto de la sequía y no porque les esté dando "un privilegio que no le da a ningún otro sector".



La gente del campo está acostumbrada a que haya épocas de buen tiempo y buenos precios internacionales en los que debe acumular "espaldas" para enfrentar los tiempos, que también llegan, de sequías, heladas, granizo y bajos valores de la producción. Lamentablemente, durante el período de "vacas gordas", el Gobierno se apropió de buena parte o de todo el excedente de la bonanza, y ahora el campo se encuentra debilitado para encarar esta dura etapa. Si el Estado fue un "codicioso" socio en las buenas, ahora tiene que ayudar en las malas.

Al mismo tiempo, el sector agropecuario reclama la eliminación de las retenciones; lo cual siempre defendí públicamente. El problema es que este tipo de medidas redistribucionistas y populistas son imposibles de desmontar de un día para el otro, sin desfinanciar al sector público, incluida la asistencia a los damnificados por la sequía. Por lo tanto, aquellos que tengan la suerte de poder cosechar, ordeñar o engordar su ganado deberán aportar para la asistencia de los que no son tan afortunados.

Lo que sí habría que exigirles al Gobierno y al Congreso es que se apruebe una ley por la que se vayan bajando gradualmente los impuestos a la exportación hasta su eliminación en un tiempo razonable. Además, en la misma norma, debería dejarse claro que solo el Congreso tiene la facultad de aplicar este tipo de tributos. También, habría que agregar un punto por el cuál se eliminen las restricciones a las ventas externas y que la Legislatura también retenga esa facultad. Es cierto que esto no implicará una mejora inmediata para el sector, sino de sus perspectivas futuras, que les permitirá invertir y contar con un mayor financiamiento que el que tendrían si las cosas se mantienen como hasta hoy.



¿Qué más se puede hacer para enfrentar la crisis económica actual? La primera mala noticia es que nadie puede gastar más por cambiar la plata de bolsillo y eso es lo que significan la mayoría de las medidas lanzadas por el Gobierno. No obstante, independientemente de que se podría ampliar la lista, a continuación, se proponen algunas políticas públicas con las que se podría mejorar la situación:

a) Renegociar los contratos de concesión de servicios públicos en el largo plazo, con condiciones estables y fórmulas de actualización de las tarifas que se mantengan en el tiempo. Esto permitirá darles a las prestadoras la posibilidad de volver a invertir y, de esa forma, sacarle esa carga al Estado e incrementar la demanda interna.

b) La actualización de las tarifas, con un cronograma claro y con plazos más largos cuanto menor el ingreso de las familias, permitirá al Gobierno ahorrar recursos.

c) Es prioritario mantener el superávit primario, por lo menos, en el 3,15% del PBI pautado en el presupuesto y lanzar un programa que explique cómo se harán los pagos de deuda pública de 2009. El total de los fondos públicos disponibles debería tener como prioridad darles subsidios directos a los sectores más pobres o aquellos trabajadores formales e informales que pierdan su trabajo, asistir a los que pasen por una emergencia y para la construcción de obras de infraestructura, en ese orden.

d) Evitar usar en exceso las reservas internacionales para financiar al Gobierno; ya que eso traerá dudas sobre la capacidad de la autoridad monetaria de defender el valor de la moneda y los ahorros del sistema financiero. En el pasado, ésta fue la puerta de ingreso a varias crisis.

e) Maximizar el vínculo con los organismos internacionales para contar con la mayor asistencia externa posible. El Gobierno debería evaluar recomponer la relación con el Fondo Monetario Internacional (FMI), lo cual implicará realizar algunos cambios, pero nos daría acceso a mayor financiamiento. Contar con dichas líneas de crédito de emergencia podría permitir reducir el ahorro primario estatal, contra el compromiso de compensarlo cuando la economía se reactive, sin causar temores de cesación de pagos. Tener que vivir con lo nuestro no es una virtud; ya que tendrá un alto costo social.

f) Usar los instrumentos que tiene el Banco Central para continuar con la "flotación administrada" y evitar movimientos bruscos del dólar que puedan hacer estallar el pánico en la población; ya que, si sucede, será imposible evitar una debacle cambiaria y bancaria.

g) Es imposible recuperar la credibilidad de la Argentina si el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) sigue funcionando como instrumento de propaganda oficial y no como un proveedor de estadísticas confiables. Nadie le da crédito a quien, se sabe, engaña a los demás. Por ley, el Indec debería pasar a depender del Congreso y tener la misma autarquía que el Banco Central.

h) Aprobar por ley un proyecto que recupere para la Legislatura la facultad constitucional de determinar el valor de la moneda, es decir, su poder adquisitivo. Para eso, debería fijarle al Banco Central metas descendentes de inflación, hasta llevarla a niveles razonables, y exigirle que las cumpla. Por eso, es importante que controle el organismo que mide la suba de precios.

i) Las negociaciones salariales deben ser libres entre las partes. Los sindicatos y los empresarios deben entender que la prioridad es mantener el empleo y no aumentar el ingreso de quienes tengan la suerte de conservarlo, a costa de que otros lo pierdan.

Por el Lic. Aldo M. Abram

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Plan de Rescate Economía Estadounidense

¿Ahora sí EE.UU. puede liderar la recuperación de la economía mundial?



“Es esencial que todo estadounidense entienda que la batalla por la recuperación económica debe combatirse en dos frentes. Tenemos que hacer arrancar la creación de empleo y la inversión privada, y debemos hacer que el crédito fluya de nuevo a las empresas y las familias”. Palabras del Secretario del Tesoro de los EE.UU., Timothy Geithner, al anunciar el nuevo plan de salvataje para el sector bancario.

Ayer dos buenas noticias surgieron desde los Estados Unidos: el lanzamiento de lo que se ha dado en llamar el Plan de Estabilidad Financiera, anunciado por Geithner y el Paquete de Estímulo Económico (llamado Plan de Recuperación y Reinversión para EE.UU.), pero los mercados no reaccionaron de la manera esperada y cerraron en rojo, en una de las peores jornadas del año. En EE.UU. el Dow Jones perdió un 4,6% de su valor, S&P 500 cerró 4,91% abajo, mientras que el Nasdaq lo hizo 4,2% en rojo.

La poca información, principalmente relacionada al Plan de Estabilidad Financiera, en donde por ejemplo, no se precisó cuánto iba a pagar el gobierno estadounidense por los activos tóxicos, generó una gran desilusión en los mercados de valores, un mal inicio para un plan que busca cambiar las expectativas para reestablecer el crecimiento económico.


El paquete de estímulo económico, por su parte, que contempla un monto total de US$ 838.000 millones, no las tuvo fácil y fue aprobado por 61 votos a favor y 37 en contra (apenas un voto más del necesario para que resulte aprobado). Ahora resta que entre el Senado y la Cámara de Representantes se consensúe el proyecto de ley final.

Las diferencias entre los programas de estímulo económico aprobado por ambas cámaras se encuentran principalmente en el destino de esos fondos. Mientras que la Cámara baja aprobó exenciones fiscales por un monto estimado en US$ 182.300 millones, el Senado contempla en el proyecto que acaba de aprobar, exenciones por un valor de US$ 292.500 millones. Por otra parte, en relación a la cobertura de salud, trabajo y educación, el texto del Senado destina US$ 66.800 millones a ser destinados, mientras que el documento aprobado por la Cámara baja estipula un monto de US$ 92.300 millones.

El Plan de Recuperación y Reinversión para EE.UU. incluye inversiones en infraestructura, energías renovables y transporte, además de ayudas a los estados que están teniendo problemas para cumplir con sus presupuestos. Las estimaciones realizadas por el propio presidente estadounidense indican que el plan salvará o creará entre tres y cuatro millones de empleos.


En relación al plan de rescate financiero se estima que el mismo podría movilizar cerca de US$ 2 billones en dinero público y privado. En el plan de rescate del sector bancario, habrá un programa para la compra de activos tóxicos que captará fondos privados y se iniciará con una inversión de US$ 500.000 millones. Posiblemente se ampliará hasta US$ 1 billón.

De manera complementaria al plan de rescate del sector bancario, la Reserva Federal respaldará nuevos créditos hasta US$ 1 billón. El plan tiene estipulado además intervenir en el mercado inmobiliario (por un monto de entre US$ 50.000 y US$ 100.000 millones) con el objeto de evitar que las familias sufran el embargo de sus viviendas e incluso puedan acceder a la refinanciación de sus créditos hipotecarios.

Con este plan para el sector bancario se pretende limpiar los balances de las entidades para evitar nuevos episodios de crisis, lograr que las mismas cumplan con su fin que es generar financiamiento. Pero el plan también cuida que la calidad de la cartera hipotecaria no se deteriore producto de la preocupante situación económica. Con estos condimentos, el plan de estabilidad financiera pone en condiciones al sector bancario para que reactive el circuito crediticio, necesario para recuperar el crecimiento económico. En este sentido, Geithner decía: “En lugar de catalizar la recuperación, el sistema financiero es un freno para la recuperación y la recesión está poniendo presión sobre los bancos. Esa es una dinámica peligrosa que tenemos que cambiar”.

Si bien el mercado no ha recibido de la mejor manera estas noticias, la pregunta a responder es qué implicancias pueden tener estos dos anuncios para la economía estadounidense en particular y para la economía global en general.

Luego de los múltiples anuncios previos que incluían multimillonarios paquetes de estímulo económico y rescate del sistema financiero, hay que reconocer que existe un cierto nivel de desconfianza acerca de la eficacia de estas medidas para sacar a la economía estadounidense de la situación recesiva en la que se encuentra.

Todavía habrá que esperar un poco más para conocer más detalles sobre dichas medidas y con qué timing se implementarán las mismas. Estas cuestiones no son menores en términos de su efectividad.

El plan de rescate del sistema financiero es de gran relevancia para lograr que el mismo comience a generar el financiamiento necesario para las familias y las empresas. En este sentido quizás sea necesario lograr un compromiso explícito por parte de las entidades financieras para que apoyen a la economía estadounidense generando crédito a la recuperación de la economía. Después de todo, son las mismas grandes responsables de esta crisis y su salvataje se produce con dinero de los contribuyentes estadounidenses.

Por su magnitud, el plan de estímulo económico puede lograr un impacto sensible en la economía estadounidense dándole el empujón necesario para que la misma comience a recuperarse, aunque ello se produciría a un ritmo lento.

La recuperación de la economía estadounidense modificaría las perspectivas para el resto de las economías desarrolladas ya que la reversión en la dinámica de la demanda estadounidense de productos externos producirá un estímulo (aunque probablemente débil), en el resto de las economías.

Pero lo más importante para que el inicio de la recuperación de la economía estadounidense y su influencia positiva en el resto de las economías tenga lugar se relaciona a cómo evolucionarán las expectativas tanto de las familias como de las empresas ya que ello influirá en la dinámica de la demanda interna. Si las familias y las empresas no confían en el efecto positivo de ambos planes sobre la economía, no consumirán ni invertirán por lo que no se reactivará el círculo virtuoso que lleva al crecimiento.

Tanto el programa de estímulo económico como el Plan de Estabilidad Financiera son de utilidad en función de la recuperación económica estadounidense, pero no logran ser una condición suficiente para asegurar la misma ya que los temores que puedan permanecer en los mercados puedan jugar en contra de los mismos.

Luego de que tanto el plan de salvataje como el de estímulo económico estén claramente definidos en su metodología de implementación y en el alcance de los mismos, habrá un tiempo de espera que se tomará el mercado para evaluar la utilidad de los mismos. Este tiempo será clave para discernir si comienza el ciclo ascendente en la economía estadounidense y mundial o si deberemos seguir navegando en los mares tempestuosos de la crisis con la amenaza de que la situación pueda agravarse aún más.

Fuente: latinforme.com

Crisis Global

Es negro el panorama que se avecina para América Latina en este 2009 que apenas empieza, no logro hacerme de optimismo ante lo que observo. Tengo que reconocer que estoy emocionalmente agotado cuando me esfuerzo por comprender el alcance de esto, y que a veces es tentador simplemente cerrar los ojos y hacer eco a lo que dicen los optimistas empedernidos. Si lo que usted busca es que le digan que estamos tocando fondo, sus ojos están en la lectura equivocada.


Creo que el reto más difícil al hacer este análisis es distinguir entre los problemas temporales y circunstanciales, de las tendencias que serán irreversibles y seculares. Sin la perspectiva que sólo da el tiempo, es fácil equivocarse; pero nada hay más fácil que decir qué se debió hacer o en qué se debió invertir, si simplemente se mira hacia atrás cuando el vendaval ha pasado.

Se ha hablado mucho de la inusual dependencia del consumo estadounidense que la economía mundial desarrolló. También se habla sobre el abuso del crédito que permitió a los estadounidenses gastar mucho más allá de sus posibilidades reales. La pregunta clave es si lo normal es que gasten, o no lo es; la abundancia de crédito es una condición ya intrínseca a nuestra realidad, o fue simplemente el resultado de desbalances temporales.

Mientras más lo analizo, más me convenzo de que la contracción del consumo que viene no es una reacción temporal sino un cambio secular que tiene raíces mucho más profundas. Igualmente, creo que la abundancia de crédito más que una bendición ha sido el reflejo de un desbalance anómalo, enfermizo e insostenible entre las economías del mundo.


Empecemos por el consumo. Éste tiene que reducirse por tres razones fundamentales: por el altísimo endeudamiento de las familias estadounidenses, por la fuerte caída en el patrimonio de éstas, y por el envejecimiento de la población.

Es interesante observar el fuerte incremento en la tasa marginal de ahorro de los estadounidenses a lo largo de 2008. Ésta pasó de 0.2% a 2.7% del PIB. Sin embargo, a pesar de los sacrificios, hoy están más endeudados que antes.

Parece lógico medir el endeudamiento en términos relativos al patrimonio. Si debo cien, y tengo mil de patrimonio es mucho menos grave que deber los mismos cien pero teniendo cincuenta. Siguiendo esta lógica, los estadounidenses hicieron un esfuerzo épico para pagar 29 mil millones de dólares de lo que debían durante el tercer trimestre de 2008. Pero si consideramos que perdieron casi siete billones de dólares de su patrimonio (9%) durante el año, como consecuencia de las caídas en los mercados inmobiliario y de valores, su pago fue intrascendente y están hoy mas endeudados que antes.


Comparemos, por otra parte, esta crisis inmobiliaria con la última que ocurrió, en 1990. La diferencia sustancial es demográfica. Recuerde que el mayor crecimiento poblacional en Estados Unidos se dio entre 1946 y 1964, cuando nacieron 78 millones de personas en el llamado "baby boom" de la postguerra. En 1990 el "baby-boomer" promedio tenía 35 años, hoy tiene 54. A los 35 años uno está en pleno proceso de hacerse de una casa, de acumular cosas; a los 54, los hijos se han ido de casa y las necesidades cambian.

Es vital entender que los estadounidenses acumularon muchas cosas en los últimos años, y por ello su capacidad de ajustarse el cinturón es mucho mayor. Recuerde, no lo harán por gusto sino por necesidad.

La familia estadounidense promedio tiene 40 mil dólares de bienes duraderos (además de su casa), 2.2 automóviles (1.2 por cada persona que tiene licencia para conducir), y 68% de las familias viven en casa propia cuando el promedio histórico es de 64%.

Por primera vez, la demanda anual por automóviles es inferior a la tasa de reposición del parque vehicular, diez millones versus doce millones de autos.

Hay un mito que se repite una y otra vez con respecto a lo que ocurrirá cuando los bancos sean recapitalizados por el gobierno, se dice que los tienen que forzar a prestar. Es absurdo el concepto.

La primera regla que debe respetar un banco es que sólo hay que dar crédito a quien tenga la capacidad para pagarlo. Ha habido un claro deterioro en la calidad crediticia de los estadounidenses. El desempleo, la merma patrimonial y el endeudamiento excesivo se reflejan en ésta. La calificación crediticia promedio es de 690 puntos. Para obtener una hipoteca a 30 años, se requiere de 760 puntos, para el préstamo para comprar un auto 720.

Es importante subrayar que los estadounidenses están muy endeudados y tienen que gastar menos para poder pagar lo que deben y para acumular ahorro para su retiro. Una vez más, el envejecimiento de la población es más que relevante. En cuanto al endeudamiento, imagine lo siguiente: la familia promedio gasta más haciendo pagos anuales de capital e intereses sobre lo que ya deben que lo que gastan en comida.

Y con respecto al tema de la abundancia de financiamiento, hay también situaciones insostenibles. Imaginemos el caso de un país que tiene gran poderío manufacturero y que provee al mundo de bienes. Un país que acumule un superávit comercial equivalente a 0.5% del producto mundial, y acumule tantas reservas internacionales que tiene con qué financiar los déficit de sus socios comerciales. No me refiero a China hoy, sino a Estados Unidos en 1929.

En aquel entonces, después del desplome bursátil, cuando cayó la demanda internacional por bienes estadounidenses, el congreso decidió imponer exorbitantes aranceles a las importaciones para forzar a la demanda local de los productos que antes se exportaban. Los socios comerciales de Estados Unidos, al verse afectados por la brutal medida, impusieron medidas similares a los productos de éste país. El resultado final fue una contracción de 70 por ciento en el comercio internacional y la resultante depresión a nivel mundial que culminó en la Segunda Guerra Mundial.

Hoy, China tiene la capacidad de inundar a los mercados financieros con las abundantes reservas que han acumulado al mantener su moneda artificialmente baja. Al hacerlo, imposibilitan que los chinos demanden "carísimos" productos importados y subsidian la compra de sus productos por los habitantes de los países que los importan (pero que no pueden producirlos y competir con sus precios). Esta medida les permite a los chinos mantener empleada a su población, por lo que están "exportando" desempleo.

Los enormes superávit de China (399 mil millones), Alemania (279 mil millones), Japón (195 mil millones), y de los países exportadores de petróleo (813 mil millones) financian los grandes déficit -y el consumo excesivo- de Estados Unidos (664 mil millones).

En el entorno actual, los países que se han acostumbrado a exportar desempleo sufrirán al ver la enorme contracción en los déficit de los países cuyo consumo se está contrayendo. Estimular la demanda local no es trivial, y sufrirán mayores niveles de desempleo.

El abundante financiamiento que proviene de los países superavitarios dejará de ser la constante en los mercados financieros internacionales. Esto ocurrirá en un año en el cual muchas economías emergentes tienen que salir a renovar emisiones de deuda que vencerán en 2009. Brasil tiene 205 mil millones de dólares de vencimientos, Rusia 605, la India 257 y China 2.4 billones. Argentina esta vez tuvo suerte, no logro ingresar a los mercados internaciones y esto lo ha beneficiado.

Los enormes desbalances entre las cuentas corrientes de las economías del mundo pueden provocar sanciones comerciales, aranceles, subsidios y prácticas desleales que podrían, como en 1930, generar proteccionismo y una contracción en el comercio internacional que sería más que inoportuna.

Mientras duró, fue cómodo contar con el colosal financiamiento que provino de los insostenibles vicios comerciales chinos. Como en el caso del consumo estadounidense, corregir los desbalances no es una tendencia temporal sino un cambio secular indispensable.

Siempre he tenido cierta fascinación con la posibilidad de saber qué depara el futuro. Claramente, no soy el único. El analista de una casa de bolsa, por ejemplo, difícilmente pronosticará una fuerte y prolongada baja en los precios de las acciones pues, al hacerlo, va en contra del negocio de la empresa para la cual trabaja. Ha sido, también, común ver a analistas de grandes fondos que pronostican "talking their book" (término que se usa para quienes están simplemente promoviendo escenarios convenientes para las posiciones en las que se encuentran invertidos). Probablemente, el analista pueda tener la honestidad para decir lo que realmente piensa, pero su siguiente observación será hecha desde la perspectiva del analista "independiente" (también conocido como "desempleado").

Muchos analistas y expertos quieren ver la situación actual como un ajuste temporal y una corrección menor. Pero desear que así sea no es razón suficiente para provocarla. Es más, muchos observadores del mercado están esperando a que haya verdaderamente una "capitulación" desesperada y generalizada que señalará el punto en el que, finalmente, hay que zambullirse en el mercado.

En mi opinión, muchos economistas han caído en la trampa keynesiana de pensar que es la voluntad de los gobiernos la que puede evitar que una crisis se profundice, que es cuestión de gastar con suficiente determinación y contundencia para lograr salir de la tormenta. Otros pensamos que el camino es harto más sinuoso y que requiere de provocar cambios profundos antes de generar las condiciones que nos regresen a un desarrollo sano y bien sustentado.

Pronosticar qué va a pasar es siempre difícil. Hoy lo es más, debido a la alta sensibilidad del mercado a rescates y decisiones políticas. Un mundo financiero que ha movido su centro de gravedad de Wall Street a Washington es no sólo inusual, sino también altamente volátil.

Le ofrezco, por ello, decirle qué creo que va a pasar. No lo hago desde la arrogancia del analista que cree tener la bola de cristal, sino con el sano intento de hacer que usted esté de acuerdo conmigo o no, el proceso intelectual de llegar a una u otra conclusión le será de mayor utilidad que la tediosa alternativa que yo tendría de darle muchos escenarios diferentes y docenas de conclusiones probables y mutuamente excluyentes.

La crisis actual no es, como se dice, producto de un par de años de laxa política monetaria, expansión crediticia y especulación inmobiliaria. Esas condiciones, sin duda, exacerbaron y agravaron el problema, pero el proceso ha sido mucho más largo y gradual, por lo que la salida también lo será.

Hemos visto a la economía estadounidense perder casi 2.6 millones de empleos en un año. El desempleo ha pasado de 3.5% en su mínimo a alrededor de 7.2% en este momento. Sin embargo, esa cifra es muy conservadora. Las estadísticas de empleo cuentan sólo a la gente activamente buscándolo. Hay una base mucho mayor de gente desempleada que se ha dado por vencida y no busca más, y otro numeroso grupo de gente subempleada quien se ha resignado a trabajar menos horas y por menor paga.

Como dije anteriormente, los cambios en el comportamiento de los consumidores no son temporales. El crecimiento en el ahorro marginal que vimos que el año pasado aumentó de cero a más de dos por ciento podría eventualmente regresar a 8%, como ocurría antes de la formación de las burbujas en los mercados de activos. Esa premisa implicaría un comportamiento de los consumidores radicalmente diferente al que ha tenido en las últimas décadas.

Todo esto me lleva a hacer algunos pronósticos poco atractivos.

Creo que el desempleo seguirá aumentando a un ritmo acelerado hasta rebasar 9% u 10 %. Esta condición contribuirá a una enorme contracción en el consumo. Provocará también que continúe el deterioro del crédito. Los problemas para los bancos van a seguir. El crédito al consumo, las tarjetas de crédito, el deterioro en las hipotecas serán los mecanismos para el deterioro de los balances. Los bancos tendrán que seguir siendo recapitalizados y seguirá la consolidación entre estas instituciones. Habrá mucho menos de ellas a fines de este año, ya sea porque se fusionen o porque quiebren.

Los grandes grupos financieros internacionales retendrán tanto cash como sea posible en el desesperado intento por sobrevivir más tiempo y en mejores condiciones que sus competidores. La reciente venta de Smith Barney nos recuerda que aún falta mucho para sanear los balances bancarios.

La situación de los bancos será, además, golpeada por la caída de los bienes raíces comerciales (cuya deuda está mucho menos bursatilizada -o titularizada- que la deuda residencial), y por los precios de bienes raíces residenciales que caerán 20% más en el año. No veremos a los precios de éstos tocar fondo sino hasta que haya una fuerte reducción en el inventario de propiedades por vender, el cual equivale a más de once meses de demanda en este momento.

Seguramente habrá decisivos planes para fomentar la demanda por inmuebles. Éstos incluirán la deductibilidad fiscal de enganches ("down payments"), tasas agresivamente subsidiadas y todo tipo de estímulo que, de funcionar, pudieran retardar -más no evitar- la caída. Al final del día, sólo la gradual digestión del exceso de inventario parará la caída, pero no hay razones ni demográficas, ni rezago en la demanda que justifique perspectivas optimistas.

La inversión privada también va a contraerse. Las empresas van a retener el "cash" que logren generar. Será un año de evidente presión deflacionaria y algunas empresas tendrán dificultades en ese entorno, particularmente las empresas apalancadas y más aún aquellas necesitadas de acudir al mercado para renovar líneas de financiamiento este año.

Recordemos que la economía estadounidense está más de 8% por debajo de su producción potencial y, por ello, el principal problema provendrá de encontrar qué hacer con la gigantesca proporción de la capacidad instalada que se encuentra ociosa. En su afán de sobrevivir más tiempo que el vecino, los productores estarán dispuestos a estrangular sus utilidades, con tal de seguir generando flujo. Repito, por ello, que la deflación será un tema dominante.

Los inversionistas tendrán una clara aversión al riesgo y también se mantendrán en cash. Esto reducirá la velocidad del dinero en forma determinante, por lo cual los estímulos fiscales tendrán un impacto mucho menor a lo esperado. Habrá más dinero, pero cambiará de menos manos; el efecto neto es que se sentirá como si hubiese menos.

En su esfuerzo por reducir las tasas hipotecarias, el banco central seguirá comprando bonos del tesoro, haciendo que las tasas de los bonos a plazos más largos sigan bajando (lo cual presenta una oportunidad de inversión a corto plazo). El dólar se fortalecerá contra el euro cuando la tasa en este último baje y desincentive la especulación de quienes se financian en dólares a tasas cercanas a cero para invertir en euros. El yen seguirá estando fuerte, y la libra llegará a estar a la par con el euro.

El crecimiento chino va a ser mucho menor a lo esperado, calculo que debería estar entre cinco y seis por ciento, y las economías desarrolladas considerarán imponer sanciones comerciales a las exportaciones de este país, dada su desesperada persistencia de mantener el yuán artificialmente barato.

Será un pésimo año para mercados emergentes. Los de Europa oriental y la vieja esfera soviética estarán particularmente afectados. Creo que Rusia tendrá una recesión severa, y los paises de la ex union sovietica, que intentan incorporarse a la Eurozona, tendrán igual resultado (vean Clarín 5/3/2009, Letonia, "paraíso del consumo y crédito fácil, a la ruina económica") y eso les hará mucho menos predecibles en temas geopolíticos. España enfrentará niveles de cesantía sin precedente, y la pésima situación económica generará tensión política.

A pesar de que se espera que el enorme estímulo fiscal estadounidense provoque presión inflacionaria y que genere escepticismo sobre el dólar, creo que esas no serán tendencias que veremos aún en 2009. Posteriormente (quizá después de 2010), sin embargo, parece probable un entorno de tasas a largo plazo más altas -ante las altas necesidades de financiamiento estadounidenses- e inflación.

El petróleo se mantendrá entre las bandas de los 40 a 60 dólares, a no ser que haya tensiones geopolíticas crecientes, en las cuales Irán debe estar involucrado. Otras materias primas industriales estarán débiles, pero la perspectiva de altos niveles de gasto público en infraestructura -más relevantes en 2010 que en este año- pudieran comenzar un ciclo de recuperación.

El oro, sin embargo, es la gran interrogante. Un entorno deflacionario parece ser negativo para el metal amarillo cuyo precio tiende a fortalecerse en períodos inflacionarios. La incertidumbre sobre las monedas duras y las tasas de interés cercanas a cero, por otra parte, pudieran incrementar el interés de los ahorradores. Creo, sin embargo, que pudiéramos ver ventas por parte de bancos centrales en este año.

En fin, como dije, pocas veces ha sido más difícil pronosticar de lo que lo es ahora. Seguramente, habrá incontables sorpresas en todos los niveles. Recuerde que hace apenas un año los analistas se debatían sobre si habría o no una recesión en los Estados Unidos. Aun quienes éramos muy pesimistas, jamás hubiéramos imaginado el desmoronamiento del sistema financiero mundial y el nivel de contracción económica que hemos visto.

En mi opinión, Obama, esta intentado sostener la demanda interna vía reducciones impositivas y generando un aumento colosal de inyecciones de liquidez al sector crediticio. Es ahí donde se está haciendo un esfuerzo fútil y poco sensato. Considerando que la descomunal demanda estuvo financiada con endeudamiento, y que el valor de los activos que fueron ofrecidos como colateral para obtener ese crédito se ha desplomado, ha llegado la hora de que esas familias endeudadas se aprieten el cinturón y paguen lo que deben.

Mientras tanto, los bancos quedarán lamiéndose las heridas y viendo cómo paulatinamente se vuelven a hacer de capital para compensar el enorme deterioro que han tenido y seguirán teniendo en su base de activos, conforme no puedan cobrar, las garantías que tienen no valgan lo que se creía, y sus propias inversiones bajen de valor.

¿Y esto qué tiene que ver con los países pobres? Nuevamente, mucho; la inusual abundancia de crédito se dio como consecuencia de los enormes sobrantes de ahorro que provenían de los países superavitarios. Idealmente, más que irse a financiar consumo, esa alta generación de ahorro debió irse a financiar inversiones de capital, a financiar el desarrollo de capacidad productiva y de infraestructura en países en vías de desarrollo. Si eso hubiese sido posible, ahora tendríamos una base de demanda mucho más amplia y balanceada.

En su lugar vemos un desesperado esfuerzo por hacer que los países deficitarios sigan demandando, lo cual equivaldría a convencer a un drogadicto en sobredosis de que se inyecte la última ración de heroína. Este ejercicio me recuerda al desatinado esfuerzo que los países en desarrollo hacen por incrementar sus ingresos fiscales recurriendo siempre al mismo pequeño grupo de causantes cautivos, en vez de incrementar la base de contribuyentes motivando incluso a los contribuyentes menores a que paguen impuestos.

Éstos pueden tener una menor capacidad individual de pago, pero su número los puede volver una fuente de recaudación más estable. La otra alternativa sería que sean los propios países superavitarios los que se lancen a consumir, a pesar de que muchos de ellos no tienen (a corto plazo) las condiciones sociales básicas que les permitan frivolizarse, pues no tienen sus necesidades básicas cubiertas por una red de servicios sociales eficientemente provistos.

Eso es lo que ocurre en China, por ejemplo, con los deficientes servicios de salud estatales que fuerzan a que la población acumule ahorro en caso de que requieran acudir a los proveedores de medicina privada. Pretender que los problemas actuales se resuelvan con las mismas herramientas que provocaron el colapso, si bien puede generar frutos en un plazo más corto, garantiza que eventualmente volveremos al mismo punto del cual partimos. Se habla de la necesidad de recapitalizar a los bancos, con la cual estoy de acuerdo, pero se condiciona el proceso a que éstos se comprometan a volver a empezar a prestar. Eso es absurdo.

Tenemos que entender que el problema requerirá de soluciones mucho más realistas y, desafortunadamente, de más lento efecto. El principal problema de los balances de los bancos hoy es de opacidad. Hace veinte años, en éstos había activos fáciles de valuar y, por lo mismo, susceptibles de ser fácilmente liquidados -aunque fuese con descuento- en caso necesario.

Hoy tenemos bancos con estructuras de alta complejidad en sus libros. Algunas de éstas son el resultado de haber titularizado o bursatilizado hipotecas de baja calidad crediticia (el infame "subprime"), pero donde el banco no tiene directamente la hipoteca en sus libros sino una rebanada de un pastel donde hay muchas de éstas mezcladas. No sabemos si en esa rebanada hay estructuras tóxicas o si tiene otras que no lo son tanto.

Para agravar la situación, la necesidad de liquidez de los bancos para rehacer su capital ha provocado ventas de emergencia de estos valores. Al no tener éstos una valuación transparente, sus precios se han colapsado pues los inversionistas institucionales evitan comprarlos (aunque puedan hacerlo con enorme descuento) ante el miedo a no poder deshacerse de ellos después. Desafortunadamente, la probabilidad de que la rebanada del pastel sea tóxica seguirá aumentando conforme los precios de los bienes raíces sigan cayendo y conforme el crédito al consumo también se siga deteriorando. Y no, la solución no pasa por artificialmente crear demanda por inmuebles para que los precios dejen de caer.

Al final del día, de una u otra forma tenemos que volver a niveles razonables de los precios de éstos relativos al nivel de ingreso de la población y al posible rendimiento que éstos generan si son ofrecidos en renta.

Personalmente creo que los parámetros que hoy se usan para analizar el mercado inmobiliario están sesgados por un periodo de bonanza demasiado largo. Por ejemplo, se estima que más de 25% de la demanda por inmuebles en los últimos años provino de gente buscando especular, no tratando de hacerse de vivienda. Ésta se ha retirado del mercado y no va a volver.

También creo que todo mercado que produce una burbuja genera también una corrección excesiva en la baja. Esta condición es necesaria para volver a atraer capital a invertir en un activo a todas luces barato. Estamos aún lejos de ese punto. El problema está en que ese ajuste seguirá erosionando el capital de los bancos cuya única posibilidad de acción sensata es concentrarse en sanear su balance -ya sea incrementando su base de capital o disminuyendo sus pasivos- olvidándose de paliativos cortoplacistas y utópicos que sólo posponen la posibilidad de soluciones reales.

Desafortunadamente, tomará años que nos deshagamos de los excesos provocados por la euforia y el comportamiento irracional. Sería absurdo pensar que la solución está en que éstos continúen. El sistema bancario mundial está herido y la preocupación tiene que estar más en sanarlo que en asegurarnos de que se levante de la cama y empiece a correr pronto. Hacerlo garantiza simplemente una recaída. Los consumidores tienen que regresar a patrones razonables y vivir de acuerdo a su realidad. Hacerlos ver como las inocentes víctimas del engaño bancario es irresponsable y suscita un peligroso precedente.

Los bancos tienen que regresar a modelos de negocios prudentes y los excesos tienen que castigarse. Algo que "opaca" aún más la situación de los bancos es la enorme proporción del negocio que ni siquiera está formalmente en sus balances. Citibank, hoy en boca de todos, tiene más activos fuera de su balance que en éste. Quienes propiciaron esta situación tienen que mostrar que llegaron a ésta manteniéndose dentro de parámetros legales. La globalización de la economía provocó la aceleración de la fase expansiva del ciclo económico. Esa misma interacción entre las diferentes regiones y mercados tiene que sentar las bases para un desarrollo balanceado y realista.

En su discurso de toma de posesión, Barack Obama dijo que "la riqueza de Estados Unidos se mide no por el tamaño de su PIB sino por el alcance de su prosperidad". Lo mismo podemos decir del mundo. Las soluciones sustentables tienen que afrontar el problema de desigualdad porque sólo en la medida en que se desarrollen soluciones que incorporen a los miles de millones de marginados a la economía mundial, podremos generar niveles de demanda que no requieran de la frivolidad excesiva y el endeudamiento a niveles peligrosos de los habitantes de países como Estados Unidos, Inglaterra o España que ahora tendrán que sufrir la resaca posterior a la larga fiesta.

El mundo entero parece estar gradualmente dándose cuenta de que la tremenda crisis económica que empezó a manifestarse en Estados Unidos el año pasado no es un problema exclusivo de ese país. Las absurdas teorías que hablaban de la inmunidad de ciertos países o regiones al "contagio" están aún más devaluadas que todas las clases de activo en los mercados. España tiene una fenomenal crisis, el crédito ya extinguido empieza a generar incertidumbre en la cadena de pagos, los bancos mas importantes comienzan a demostrar flaquezas. Argentina es vulnerable en cierta medida, ya que los bancos españoles impactan directamente sobre sus acciones. No obstante bancos de primera línea que ya se han visto en problemas en España, sus repercusiones en el mercado local fueron rápidas y directas, los depositantes reaccionaron comúnmente a la cancelación de plazos fijos y retiros de ahorros, generando hacia el banco en cuestión una aumento de sobre tasas de "call" (prestamos entre bancos con el sencillo fin de llegar al encaje determinado por el Banco Central) para disipar una corrida.

En fin, el mundo globalizado tiene infinidad de mecanismos de conexión financiera no sólo por el vigoroso comercio internacional, sino también por la presencia de intermediarios financieros con exposición global. Ésta se da ya sea por la presencia física en otros países, o por haber invertido en valores emitidos por gobiernos o empresas de países diferentes al de origen.

Según una excelente publicación escrita por Olivier Blanchard, profesor de MIT (The crisis: Basic mechanisms and appropriate policies; diciembre 29, 2008), la exposición al resto del mundo de los bancos procedentes de los cinco países más industrializados se incrementó de 6.3 billones (millones de millones) de dólares en el año 2000 a 22 billones en junio de 2008, 4 billones de los cuales estaban en mercados emergentes. Ese nivel de inversión asegura un fugaz contagio.

Es significativo preguntarnos qué hizo que creciera tan rápidamente el apetito por tomar riesgo originado en otros mercados. Según otro prominente economista de la misma universidad -MIT- Ricardo Caballero (A global perspective on the great financial insurance run: Causes, consequences, and solutions; enero 23, 2009), lejos de que la explicación esté en el deseo de alto rendimiento, el origen se explica por la escasez de instrumentos financieros para proteger valor que se manifestó a fines de los noventa.

El incremento en la demanda provino no sólo del envejecimiento de las poblaciones de Japón y Europa, sino también de la integración de países altamente ahorrativos a la demanda global por instrumentos financieros, a la precavida respuesta de países emergentes como consecuencia de crisis financieras previas y a la estabilidad de economías productoras de materias primas.

Según Caballero, esa creciente demanda por instrumentos "seguros" es lo que explica la fuerte baja en las tasas de interés estadounidenses, no sólo la relejada política monetaria de la Reserva Federal de Greenspan.

¿Por qué es esto relevante? Lo es por dos motivos. Primero, porque para saciar esa demanda los "creativos" banqueros de Wall Street diseñaron instrumentos "seguros" cuya calidad crediticia se explicaba no por la fortaleza financiera del emisor, sino por la certeza de que si se empaquetaba a cientos de emisores de baja calificación de crédito en una canasta, éstos no dejarían todos de pagar al mismo tiempo.

Eso, entonces, satisfacía dos propósitos. Primero, alimentaba a esa creciente demanda por instrumentos que fuesen refugio de valor, mientras que permitía incrementar la cantidad de crédito disponible para deudores de baja calidad crediticia. Esta demanda creció exponencialmente en respuesta al "American Dream Downpayment Act" firmado en 2003 por la administración Bush para proveer de 5.5 millones de viviendas a familias de escasos recursos. Es aquí donde Geespan le guiño el ojo a Bush bajando drásticamente la tasa de referencia desde la reserva federal.

Como dije anteriormente, es precisamente la creación de estas complejas estructuras lo que le quitó transparencia a los balances bancarios, haciendo imposible valuar a ciencia cierta el nivel real de riesgo -y descomposición- que hay en éstos. Esto no sólo ha llevado a que a los bancos comerciales les sea imposible emitir papel comercial para fondearse, o convencer al público de que les pierda el miedo; incluso ha provocado que la única parte donde los ahorradores se sienten seguros es en la parte más conservadora y de corto plazo de las emisiones gubernamentales donde está hoy estacionado todo el ahorro.

Este análisis puede generarnos un cierto grado de esperanza. Por una parte, esas enormes cantidades de recursos no se quedarán para siempre inmóviles y resignadas a rentabilidades nulas. Cuando los mercados recuperen la confianza -lo cual no ocurrirá pronto, pero sí ocurrirá- es posible que se genere una redistribución colosal y rápida hacia activos más rentables conforme se generalice la sensación de que no pueden perderse las gangas que hoy abundan en el mercado. Por otra parte, si ese es el caso, quizá es en esa necesidad de tener "seguros" donde deben enfocarse los esfuerzos de los gobiernos que intentan estabilizar la situación.

Sin duda, uno de los factores más devastadores de esta crisis ha provenido de la sensación que tienen muchos inversionistas que pensaban haber comprado algún tipo de seguro, y que hoy descubren que esa cobertura no existe. Por ejemplo, en el mercado había tres billones de dólares de emisiones aseguradas por "monoliners" (Empresas aseguradoras dedicadas a cubrir el riesgo de no pago de un emisor de deuda. Es decir, si una empresa que emitió un bono pierde la capacidad para pagarlo, la monoliner lo hace. Esto permite que el emisor tenga una mejor calificación de crédito y un menor costo de financiamiento, a cambio de pagarle una prima de seguro a la monoliner.)

Sin embargo, esa sensación de seguridad desapareció cuando en una situación de riesgo extremo el mercado ponderó que las monoliners no podrían cubrir ese nivel de emisiones teniendo tan sólo 34 mil millones de dólares de capital propio.

Esa realización llevó a que hubiera ventas masivas de instrumentos que se percibían como de bajo riesgo sólo bajo el amparo de la monoliner, pero no sin éste.

Lo mismo pasa con los CDS's ("credit default swaps"), otro tipo de seguro contra riesgo crediticio, en el cual la inestabilidad de los intermediarios financieros que ofrecen cubrir el riesgo generó duda que se ha manifestado en la fuerte caída en los precios de las emisiones.

Esa es la teoría de Caballero, que la estabilización de los mercados comenzará cuando regrese la confianza por el seguro. Eso permitirá el gradual regreso hacia activos que no estén tan a prueba de balas como un bono de corto plazo emitido por el Tesoro estadounidense.

Sin embargo, entendamos que de lo que se está hablando es de que simplemente empiece el proceso de normalización de los mercados, de que gradualmente se vuelva a distribuir el ahorro entre diferentes clases de activo, lo que llevaría a una paulatina recuperación de los precios y que se reflejaría, por ejemplo, en un incremento en los niveles de capitalización de los bancos y de recuperación de los patrimonios familiares. Conforme esto ocurra, el consumo pudiera empezar lentamente a recuperarse.

Claramente, no estamos hablando -por mucho- de regresar a la bonanza en la cual estábamos. Esa se fue y quizá no regrese en décadas. Como dice David Rosenberg, el analista de Merrill Lynch, en este entorno no estamos hablando realmente de una recesión sino de una depresión. La diferencia entre una y otra es que un ciclo recesivo es mucho más corto -típicamente alrededor de año y medio- pues es provocado por un incremento en los niveles de inventarios conforme la demanda cae. En el proceso de reducir los inventarios, las empresas dejan de comprar y hay altos niveles de capacidad instalada que quedan ociosos. Eventualmente, la demanda se logra reactivar y la situación se normaliza. En una depresión el problema es de endeudamiento excesivo, cuya normalización pasa por una prolongada contracción de la demanda y un fuerte crecimiento del ahorro. Ese es un proceso más largo y lento, pues implica una venta masiva de activos y un prolongado cambio en patrones de consumo e inversión para ir pagando lo que se debe.

Si ésta es una depresión, es la primera desde la de los años treinta, y sólo hubo otras cuatro en el siglo XIX. Si lo es, el proceso de ajuste será largo y delicado. Considerando que alrededor de 30% de la capacidad industrial estadounidense está parada, tomará mucho para que la capacidad vuelva a utilizarse y el empleo se recupere. El proceso de contracción de éstos, de hecho, apenas está empezando.

La situación laboral contribuirá necesariamente a complicar el ciclo. La tasa de desempleo real en Estados Unidos es de alrededor de 13.5%, si tomamos una definición más amplia que la de desocupación entre quienes activamente están buscando trabajo (en cuyo caso es 7.2%). La Organización Mundial de Trabajo dijo el miércoles 28 de enero que más de cincuenta millones de trabajadores perderán su empleo este año, como consecuencia de lo que vivimos.

Como esperaba, la presión sindical ha comenzado. La primera huelga general en Francia paralizará al país ante la muy "francesa" demanda por "proteger al empleo y al poder adquisitivo". Habrá que preguntarle a los obreros franceses de dónde creen que vienen los recursos para proveer esa protección.

La depresión económica empieza y la psicológica va de la mano de la primera.

Desde mi humilde posición, quiero hacerles saber que la única y mejor forma de proteger el empleo es aumentando los esfuerzos y optimizando recursos. Los tiempos que se vienen son de una fuerte y ardua competencia, pero debemos tener presente que toda crisis genera cambios y estos pueden ser una oportunidad, solo hay que verlo como un desafio.

Luis A Sebastián Cuadros

luissebastianc@hotmail.com

La Economía Argentina ante la Crisis

Argentina: Ejemplo del Mundo... de Perseverante Decadencia



Lic. Aldo M. Abram - 12 de enero de 2009.

Desde que estalló la crisis en EE.UU. nos hemos cansado de escuchar a nuestros funcionarios decir que es la muestra del fracaso del capitalismo, poniendo como ejemplo de modelo alternativo a la Argentina. Pues ni esta interpretación ni la supuesta inmunidad argentina se han demostrado ciertas. A continuación demostraremos que el origen de los problemas estadounidenses es el resultado de la “argentinización” de la política económica de la potencia del norte. También, concluiremos a dónde llevará a nuestro país, nuestra perseverancia populista y el actual “régimen económico” que el gobierno promueve mundialmente.

EL COMPORTAMIENTO DE LAS BOLSAS DEL MUNDO



Base Diciembre 1998=100



Fuente: ESEADE en base Bloomberg

Se puede anticipar un escenario internacional muy desfavorable; ya que quienes tienen que “curar” al paciente parten de un diagnóstico equivocado. Suponen que un grupo de especuladores se dedicó a prestarle irresponsablemente a gente que quería comprar una vivienda y no calificaba para un crédito. Sin embargo, cuando uno ve lo ocurrido en el mundo, observa que las tasas de riesgo país de las economías emergentes nunca bajaron tanto como hasta principios de 2007. En tanto, los mercados de activos financieros e inmobiliarios alcanzaron valores récords medidos en dólares en casi todo el planeta. Entonces, parece que fue generalizado el incentivo desmesurado a asumir riesgo para ganar un centavo más; lo cual sólo pasa cuando la liquidez abunda y, estos excesos, sólo los pueden generar los bancos centrales. ¿Cómo sucedió? En el año, 2000, la economía de EE.UU. amenazaba con iniciar un proceso de ajuste. Por ello, la Reserva Federal, dirigida por Alan Greenspan, en pos de alentar la demanda interna, empezó a inyectar fuertes dosis de liquidez, bajando su tasa de referencia hasta un 1%. Por otro lado, el Presidente Bush empieza a desandar el camino de superávit fiscal de la administración “Clinton” y aumenta la colocación de deuda del Estado; lo que se agravó desde el 11 de septiembre de 2001. Luego, en 2003, el nivel de actividad comenzó a crecer y el sector privado, también, incrementó su demanda de crédito. Ante dichas presiones al alza sobre la tasa de interés de mercado y para evitar que subiera por encima de la que había fijado como referencia, la Reserva Federal respondió comprando, con emisión, bonos del Tesoro de los EE.UU.



PRODUCTO BRUTO INTERNO y TASA DE INTERÉS DE REFERENCIA



Fuente: ESEADE en base BEA y FED

El problema es que la gente y el gobierno demandaban crédito para gastar y la Fed les daba dólares, que no necesariamente contaban con una demanda para atesoramiento. Por lo tanto, el exceso de oferta hizo bajar a la moneda estadounidense desde 2002, incentivando la suba de precios domésticos, de los bienes comercializables internacionalmente y de los activos financieros e inmobiliarios. En mayor o menor medida, esta política monetaria flexible de la Fed fue seguida por otros bancos centrales; por lo que no extraña que las presiones inflacionarias hayan alcanzado, también, a sus unidades monetarias. Tampoco lo es que, en pos de mejorar los menguantes rendimientos, los inversores se vieran incentivados a asumir riesgo, en forma exagerada.

Desde 2004, la Reserva Federal decidió combatir la aceleración de la inflación aumentando muy gradualmente la Federal Fund Rate. Hacia fines de 2005, había un amplio consenso sobre la necesidad de un “aterrizaje suave”. En mayo de 2006, luego de nuevos récord en los precios de los activos financieros, empezó a crecer la expectativa de un ajuste y pareció iniciarse un ajuste (excesivamente) moderado. Pero la Reserva Federal, con su nuevo Presidente Ben Bernanke, decidió detener, en 5,25%, la suba de su tasa de referencia por temor a las señales de debilidad del sector inmobiliario de los EE.UU. y su impacto negativo en la economía. Para agosto, quedó claro que no habría nuevas subas e, incluso, los inversores comenzaron a descontar una baja, lanzándose nuevamente a maximizar ganancias.

INFLACIÓN ACUMULADA DOCE MESES DE LAS PRINCIPALES ECONOMÍAS DEL MUNDO



Fuente: ESEADE en base BEA, Eurostat, UK Statistics Authority, Statistics Bureau of Japan

Hasta junio de 2007, se siguieron batiendo récord de precios. El “avión” lejos de apuntar la trompa hacia abajo y reducir la velocidad para aproximarse a la pista, siguió acelerando y mirando al cielo. Lo que nos trajo a la tierra fue el estallido de la crisis del sector inmobiliario e hipotecario de los EE.UU. Explotó primero allí porque debía ser el mercado más “inflado”, pero los efectos de los excesos afectaban a los valores de todos los bienes y activos internacionales. Ya no era posible un “aterrizaje suave”, porque la Fed obligó al avión a subir demasiado alto; pero pudimos haber tenido un aterrizaje algo brusco, aunque controlado. Simplemente, se necesitaba que los Bancos Centrales del mundo siguieran proveyendo liquidez a los bancos para evitar una crisis del sistema financiero, como hizo al principio el Banco Central Europeo. Mientras tanto, convenía dejar que los precios de activos financieros e inmobiliarios ajustaran a la baja y que la economía internacional se desacelerara o incluso fuera a una, relativamente, menor recesión. Empero, la Reserva Federal decidió bajar la tasa de interés e incrementar los excedentes de liquidez existentes, respondiendo complacientemente a los ruegos de los inversores, que querían seguir ganando con el alza de los mercados, y de los políticos, deseosos de sostener un crecimiento económico artificial. Según parece, la misma política monetaria expansiva que nos metió en este lío, es la que nos va a sacar de él. Parece difícil, ¿no? Esta historia es una vieja conocida de los argentinos y sabemos como termina. Se postergan los costos de los errores de los funcionarios gubernamentales y/o de los bancos centrales; pero se potencia el ajuste cuando éste se vuelve inevitable. A esta altura, lo que queda claro es que lo que fracasó no es el capitalismo. Fue la eterna vocación de los funcionarios y de los economistas de pensar que pueden hacer crecer “mágicamente” los mercados y la economía más allá de sus posibilidades. Por supuesto, en todo el mundo, el fracaso de estos “curanderos” siempre lo pagan los sufridos ciudadanos. La resolución de la crisis política en EE.UU., por la elección y asunción de un nuevo y más creíble Presidente, más los salvatajes, políticas fiscales y monetarias expansivas, puede que traigan algún alivio. Sin embargo, el definitivo ajuste económico y de los mercados estadounidenses está aún por venir y será muy duro.

“RIESGO PAÍS” – ARGENTINA VS EMERGENTES Promedios mensuales - En puntos básicos



Fuente: ESEADE en base JP Morgan

En ese sentido, es bueno preguntarse cómo está la Argentina para enfrentarlo. En las peores condiciones, con una absoluta falta de credibilidad debido, entre otras cosas, a: a) la estafa a los tenedores de títulos de deuda pública en CER que significan los “dibujos” de la inflación por parte del INDEC; b) el desgaste del gobierno debido a la pésima gestión de la crisis con el campo; c)) las políticas de manotazos de ahogado, como el blanqueo de capitales y las moratorias, que confirman la falta de moralidad e institucionalidad de la Argentina; d) las propuestas de políticas fiscales expansivas para las que no hay recursos y diluirán la solvencia fiscal de un Estado sin crédito; e) las “estatización” o “argentinización” de empresas extranjeras mediante expropiaciones o del “enorme poder de convicción del gobierno”; y f) la clara opción demostrada en el articulado del Presupuesto 2009, de utilizar las reservas internacionales del Banco Central para financiarse, debilitando sus posibilidades de controlar una corrida cambiaria y/o bancaria. Así es que, si bien es difícil que nuestro país entre en crisis por un default de la deuda estatal, los títulos públicos cotizan a valores de cesación de pagos y se observa una continua fuga de capitales. La inconstitucional confiscación de los ahorros para la vejez de los afiliados del sistema de capitalización terminó de diluir el derecho de propiedad y de importar una crisis financiera internacional que, hasta entonces, lográbamos “navegar” con dificultad. Por lo tanto, los orígenes de una debacle local, que en inicios sería cambiaria y bancaria para con el tiempo devenir en default, empiezan a multiplicarse. No solamente pasan por un posible “tsunami” internacional, sino que suma una probable debacle electoral oficialista en 2009, dado un escenario de creciente caída de la imagen gubernamental, debido a la mala evolución de la economía, la pobreza y el empleo. En el mejor de los casos, cuando pase el temporal externo, nos encontraremos con una gestión oficial sumamente desgastada y una elección presidencial en ciernes. Serán tres años duros; ya que es improbable que el gobierno cambie el rumbo y cuanto más haga, más acelerará hacia el precipicio. Ante esta nueva desilusión y fracaso como sociedad, podemos aprender y tener una visión de largo plazo. Deberíamos pensar si no es hora de que abandonemos esta historia de Presidentes populistas de izquierda y de derecha, que caracterizó los últimos casi 80 años de decadencia argentina. Eso exige un cambio de cultura, que nos lleve a asumir nuestras responsabilidades cívicas, lo cual incluye a “Doña Rosa”; pero que no podemos esperar que sea quien la lidere y difunda. Esa es tarea de la dirigencia empresaria, intelectual y profesional de la Argentina, que es quien tiene los medios económicos y de comunicación para lograrlo. Sin embargo, ya sea por acción u omisión, la mayoría de este sector de la comunidad fue cómplice de este continuo avasallamiento de los derechos e instituciones que están en nuestra Constitución Nacional. El temor o la codicia primaron, hoy deberían preguntarse cuál fue el resultado. El Dr. Carlos Escudé dijo en una conferencia que “el populismo, es la única alternativa democrática para los pueblos con altos niveles de pobreza”; lo cual los condena al subdesarrollo. Yo creo que la Argentina es el ejemplo de que “el populismo es la única alternativa democrática para los países con dirigencia pobre”.

Lic. Aldo M. Abram - 12 de enero de 2009.


CONSULTORA EXANTE

Crisis Financiera - Reserva Federal

02 de octubre de 2008



EE.UU. cae por argentinización

Por el Lic. Aldo M. Abram

En la Argentina, hemos escuchado a varios funcionarios públicos y economistas hablar de que la crisis muestra el fracaso del modelo de libre mercado y de que el paquete es una solución que muestra un cambio de rumbo. Ninguna de ambas cosas es cierta. Lo que observamos en la potencia del Norte lo podemos definir como el fruto de la «argentinización» de la política económica y monetaria estadounidense. En tanto que el paquete de salvataje es sólo una muestra más de ello.

Dado que el gobierno estadounidense tiene déficit fiscal, para poder absorber los activos «basura» de su sistema financiero deberá tomar fondos en el mercado. De esta forma, presionará al alza de las tasas de interés; pero como, hasta ahora, la Reserva Federal ha decidido que ésta debe permanecer en 2%, deberá proveer los recursos necesarios a través de operaciones de mercado abierto. Es decir, el Banco Central emite dólares para comprar bonos del Tesoro de los EE.UU. y financia al gobierno. Esto debería sonarle conocido a cualquier argentino medianamente informado ya que es una historia repetida en nuestro país y terminará de la misma forma que aquí.



El exceso de oferta de dólares presionará a su baja y, dado que es la unidad de medida de los valores de los bienes y servicios en los EE.UU. y del comercio internacional, pronto la reducción del « metro» se notará en el alza de los precios domésticos y de los bienes comercializables. Por lo tanto, los tenedores de moneda estadounidense ayudarán a los contribuyentes de dicho país a sufragar el salvataje, pagando el impuesto inflacionario, o sea perdiendo poder adquisitivo.

El paquete de absorción de créditos «tóxicos» puede que permita evitar una crisis sistémica en EE.UU., lo que no está mal; aunque no resolverá el problema de fondo. Esta coyuntural «solución» parte del diagnóstico de que un grupo de especuladores se dedicó a prestarle irresponsablemente a gente que quería comprar una vivienda y no calificaba para un crédito. Sin embargo, cuando uno ve lo ocurrido en el mundo, observa que las tasas de riesgo-país de las economías emergentes nunca bajaron tanto como hasta fines de 2006. En tanto, los mercados de activos financieros e inmobiliarios alcanzaron valores récord medidos en dólares en casi todo el planeta. Entonces, parece que en todas partes hubo un incentivo desmesurado a asumir riesgo para ganar un centavo más; lo cual sólo pasa cuando la liquidez abunda y, estos excesos, sólo los pueden generar los bancos centrales. ¿Cómo sucedió?

En el año 2000, la economía de EE.UU. amenazaba con iniciar un proceso de ajuste y se inició un proceso muy «argentino» de acumulación de déficits fiscales extravagantes y de excesos monetarios. En 2001, la Reserva Federal, dirigida por Alan Greenspan, en pos de alentar la demanda interna, empezó a inyectar fuertes dosis de liquidez, bajando su tasa de referencia hasta 1%. Por otro lado, el presidente Bush empieza a desandar el camino de superávit fiscal de la administración Clinton y aumenta la demanda de crédito del Estado; lo que se agravó desde el 11 de setiembre de 2001.



Luego, en 2003, el nivel de actividad comenzó a crecer y el sector privado, también, incrementó su demanda de financiamiento. Ante dichas presiones al alza sobre la tasa de interés de mercado y para evitar que subiera por encima de la que había fijado como referencia, la Reserva Federal respondió comprando, con emisión, bonos del Tesoro de los EE.UU.

El problema es que la gente y el gobierno demandaban crédito para gastar y la Fed les daba dólares, que no necesariamente contaban con una demanda para atesoramiento. Por lo tanto, el exceso de oferta hizo bajar a la moneda estadounidense desde 2002, incentivando la suba de precios doméstica, de los bienes comercializables internacionalmente y de los activos financieros e inmobiliarios.

Incentivos

En mayor o menor medida, esta política monetaria flexible de la Fed fue seguida por otros bancos centrales, por lo que no extraña que las presiones inflacionarias hayan alcanzado, también, a sus unidades monetarias. Tampoco lo es que, en pos de mejorar los menguantes rendimientos, los inversores se vieran incentivados a asumir riesgo, en forma exagerada.

Desde 2004, la Reserva Federal decidió combatir la aceleración de la inflación aumentando muy gradualmente la Federal Fund Rate. Hacia fines de 2005, había un amplio consenso sobre la necesidad de un «aterrizaje suave» o ajuste moderado en 2006.

En mayo de dicho año, luego de nuevos récords en los precios de los activos financieros, empezó a crecer la expectativa de un ajuste y pareció iniciarse un «aterrizaje (excesivamente) suave». Pero la Reserva Federal, con su nuevo presidente Ben Bernanke, decidió detener, en 5,25%, la suba de su tasa de referencia por temor a las señales de debilidad del sector inmobiliario de los EE.UU. y su impacto negativo en la economía. Para agosto, quedó claro que no habría nuevas subas e, incluso, los inversores comenzaron a descontar una baja, lanzándose nuevamente a maximizar ganancias. El «avión» lejos de apuntar la trompa hacia abajo y reducir la velocidad para aproximarse a la pista, siguió acelerando y mirando al cielo.

Hasta junio de 2007, se siguieron batiendo récords de precios y, más que un aterrizaje, parecía un alunizaje. No obstante, todos sabemos que es imposible que un avión alunice y lo que nos trajo a la tierra fue el estallido de la crisis del sector inmobiliario e hipotecario de los EE.UU.

Explotó primero allí porque debía ser el mercado más «inflado», pero los efectos de los excesos afectaban a los valores de todos los bienes y activos internacionales.

Ya no era posible un « aterrizaje suave» porque la Fed obligó al avión a subir demasiado alto. Sin embargo, pudimos haber tenido un aterrizaje algo brusco, pero controlado.

Simplemente, se necesitaba que los bancos centrales del mundo siguieran proveyendo liquidez a los bancos para evitar una crisis del sistema financiero, como lo viene haciendo el Banco Central Europeo. Mientras tanto, convenía dejar que los precios de activos financieros e inmobiliarios ajustaran a la baja y que la economía internacional se desacelerara.

Empero, la Reserva Federal decidió bajar la tasa de interés e incrementar los excedentes de liquidez existentes, respondiendo complacientemente a los ruegos de los inversores, que querían seguir ganando con el alza de los mercados, y de los políticos, deseosos de sostener un crecimiento económico artificial. Desde entonces, se continúa en este rumbo de colisión.

Esta historia también es una vieja conocida de los argentinos y sabemos como termina. Se postergan los costos de los anteriores errores de funcionarios gubernamentales (en general, fiscales) y/o de los bancos centrales (excesos monetarios); pero se potencia el ajuste cuando éste se vuelve inevitable. Ahora estamos en esa etapa y el paquete de salvataje es un paso más. Más allá del « veranito» que su aprobación pueda traer, la Reserva Federal deberá optar por subir sus tasas y evitar que se acelere la inflación, profundizando la recesión que se viene, o seguir con la «fiesta» y meter a EE.UU. en una « estanflación».

El Lic. Aldo Abram es economista de la UBA con un master en economía del CEMA. Es director-socio de Exante SRL y director del CIIMA – ESEADE-

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