Inflación

Precio Relativo

Un precio relativo es el precio de un bien, expresado en términos de otro bien. Por ejemplo, si el precio de un kilo de pan es de $100 y el precio de un litro de agua es de $10, el precio relativo de un kilo de pan con respecto a un litro de agua es de 10.


Otro ejemplo: si el precio de un Mercedes-Benz Clase C es de $41,000 y el precio de un BMW 328i es de $35,000, el precio relativo del Mercedes-Benz con respecto al precio relativo del BMW es $41,000 / $35,000, es decir: 1.17. Lo que significa que se necesitan 1.17 BMWs para comprar un Mercedes Clase C.

Matemáticamente, los precios relativos se definen como:

Precio Relativo del Bien A con respecto al Bien B = Precio de A / Precio de B


Los precios relativos son muy utilizados en microeconomía. Los precios relativos expresan un costo de oportunidad, es decir, la cantidad de unidades de un bien a las que hay que renunciar para consumir una unidad de otro bien.

Por ejemplo, si el precio relativo de un BMW es igual al precio de tres vacaciones, el costo de oportunidad del BMW expresado en vacaciones es 3. Esto significa que quizás tengas que renunciar a 3 vacaciones para comprar un BMW?

Los precios relativos y la inflación



La inflación es una aumento generalizado en los niveles de precios de una economía. Generalmente, la inflación se mide usando un índice de precios, como el índice de precios del consumidor.

Sin embargo, el índice de precios del consumidor no nos informa si hubo variaciones en los precios relativos. Por ejemplo, si todos los precios de una economía aumentan en el mismo porcentaje, digamos, un 10%, no hay variaciones en los precios relativos.

Generalmente este no es el caso, algunos precios suelen aumentar mas que otros. Por ejemplo, si la inflación es causada por una depreciación de la divisa, los precios de los bienes transables (combustibles, commodities, etc.) aumentan mas que los precios de los no transables (servicios no transables, salarios de docentes, electricidad, etc.).

Evolución de los Precios Relativos

El supuesto de competencia perfecta indica que los precios de mercado son precios de equilibrio estático. Los precios relativos reflejan las preferencias de los consumidores (estáticas), la tecnología de producción (estática) y la abundancia de los bienes e insumos de producción (estáticas). En la realidad, estos supuestos nunca se verifican, tanto en economías de mercado como en economías centralmente planificadas.

Entonces, los precios relativos varían con el correr del tiempo. Por ejemplo, el precio relativo de los Mercedes-Benz con respecto a los BMW puede bajar hasta que se igualen. En ese caso, el precio relativo será uno.

El precio relativo de los automóviles depende de un gran número de factores, porque son bienes complejos de producir. Pero también se pueden modificar los precios relativos de bienes mas simples, como el precio relativo del pan con respecto al agua. Por ejemplo, si una cosecha de trigo es mala, puede aumentar el precio del trigo y encarecer el precio del pan, mientras que el precio del agua se mantiene constante.

Análisis Gráfico: Evolución del Precio de la Salud en términos de Hamburguesas

Usando datos de The Economist e índices de precios de Estados Unidos, calculamos la evolución del precio relativo de Medicare en términos de Big Mac. Para los precios de Medicare, un programa de salud pública en Estados Unidos, usamos datos del Bureau of Labor Statistics (Oficina de Estadísticas Laborales).

El precio del índice Medicare en términos de Big Mac, bajó desde 40, a comienzos del año 2000, hasta 34, en Julio de 2018. Normalizando la serie, el índice bajó desde 100 a comienzos del año 2000 hasta 84 en Julio de 2018.

Curva de Phillips

La Curva de Phillips en un gráfico que muestra la relación que hay entre la tasa de desempleo y la tasa de inflación.


Históricamente, se observa que cuando hay menor desempleo, hay mayor inflación.

Entonces, para hacer la Curva de Phillips se coloca en el eje vertical la inflación y en el eje horizontal el desempleo. Cada punto representa una combinación de desempleo e inflación. La Curva de Phillips tendrá pendiente negativa.



La explicación de esta relación tiene que ver con los salarios. Mientras menor sea la tasa de desempleo, habrá menos trabajadores buscando trabajo. Entonces, para lograr conseguir trabajadores, los empleadores deberán aumentar los salarios. Este aumento de salarios se traslada a un incremento de costos de producción y a una mayor demanda agregada, porque los trabajadores ganan mas dinero. Estos dos factores, ocasionarían un aumento de precios o inflación.



Curva de Phillips de Largo Plazo

Una simple receta de política económica sería: "si quieres reducir un poco el desempleo, puedes hacer una política expansiva que aumente un poco la inflación".

Sin embargo, el gobierno no puede reducir permanentemente el desempleo de este modo, porque los trabajadores negocian salarios reales, es decir, ajustados por inflación, no salarios nominales. De este modo, si la tasa de inflación ha sido del 10% en los últimos años, los trabajadores que deseen mantener su nivel adquisitivo constante, buscarán aumentar sus salarios a una tasa de al menos el 10% anual.

Si el gobierno decide reducir el desempleo con una política monetaria expansiva que aumente la inflación al 15%, puede reducirlo durante un corto período de tiempo, pero a medida que los trabajadores ajusten sus expectativas, la tasa de desempleo volverá a su nivel anterior, pero la tasa de inflación permanecerá en un 15%.

Según los economistas Friedman y Phelps, la tasa de desempleo siempre tiende a acercarse a una "tasa natural de desempleo" en el largo plazo. En el largo plazo, esta tasa es compatible con cualquier nivel de inflación. Entonces, la Curva de Phillips de largo plazo es vertical.

La Curva de Phillips de corto plazo sólo sirve para explicar variaciones en el desempleo en el corto plazo.

Algunas personas se oponen al concepto de "tasa natural de desempleo" dado que, a simple vista, para indicar que los economistas aceptan que haya personas que no puedan conseguir empleo y que proponen que no se puede hacer nada para evitarlo. Las estimaciones de la tasa natural de desempleo en diversos países desarrollados es del 5%, y una explicación es que, en todo momento, en una economía dinámica:

  • Hay costos de transacción e información que impiden que los empleadores puedan encontrar rápidamente al trabajador adecuado y que los desempleados puedan encontrar rápidamente un puesto laboral adecuado para ellos.
  • Es normal en una economía dinámica, que muchas empresas dejen de funcionar mientras que surgen nuevas empresas que son mas eficientes o bien que operan en sectores con mayor crecimiento.
  • Para cada puesto de trabajo puede haber exceso de oferta y demanda relacionado con diferencias o desajustes en:

    • ubicación
    • habilidades
    • gustos
    • horas laborales y horario de trabajo

Alta inflación

Sin embargo, la inflación no es neutral en términos de eficiencia, dado que los precios son factores fundamentales para asignar recursos en las economías modernas. Una elevada tasa de inflación ocasionará distorsiones de precios, redistribuciones de ingreso y un menor crecimiento económico en el largo plazo.

Conclusión

En el corto plazo, hay una relación negativa entre desempleo e inflación. La curva de Phillips permite visualizar esta relación en un gráfico. En el largo plazo, en las economías eficientes, la tasa de desempleo tiene a un nivel cercano al 5%, independientemente de la inflación, salvo que la inflación sea tan elevada que ocasione costos en términos de eficiencia.

La inflación y el impuesto inflacionario

Una visión de nuestra economía desde las teorías económicas.


Uno de los mayores males de toda economía es sin lugar a dudas la inflación, quién no solo atenta contra el crecimiento y desarrollo económico, sino también contra bienestar general de una Nación. Nuestra economía no ha escapado a la inflación, durante décadas hemos vivido en una economía inflacionaria que si bien en los años 90 con la convertibilidad se logró finalmente eliminarla, años posteriores y más aún en nuestra panorama actual volvería aparecer.

Cuando se habla de inflación por lo general siempre se hace referencia a sus conocidas consecuencias, pero no así a sus causales. Es que en ocasiones es difícil predecir la causa que genera inflación en la economía, reflejo de ello es que existen diversas teorías económicas que han intentado explicar su generación. En el presente artículo haremos una referencia a teorías económicas más conocidas, para finalmente dar nuestra opinión.

Tres teorías económicas que explican la inflación



Se analizará en líneas generales 3 de las teorías que explican la inflación con el fin de entender de dar nuestra posición al respecto, a los reconocidos economistas BEKER Víctor A. y MOCHÓN Francisco.[fn]BEKER Víctor A. - MOCHÓN Francisco. Economía: principios y aplicaciones. Madrid. Editorial McGraw-Hill 1997. [/fn]



Inflación de Demanda

Dentro de esta corriente económica tenemos dos teorías que explican la inflación: a) la teoría monetarista y b) la teoría keynesiana. A continuación analizaremos cada una de ellas.

Teoría Monetarista

Según la teoría cuantitativa del dinero existe una relación estrecha entre la cantidad de dinero existente en el mercado y la inflación. La ecuación de la inflación según esta teoría es:

V X OF = P X Q

V: es la velocidad del dinero, o sea, la cantidad de veces que el dinero pasa de mano en mano.

OF: es la oferta monetaria, que está constituida por la base monetaria (M) más la creación secundaria de dinero (cheques).

La base monetaria se refiere a la totalidad de medios de pagos existentes en el mercado, que en general es igual a la cantidad de dinero en manos del público más los depósitos (cuenta corriente, cuenta de ahorro, plazo fijo, etc.).

P: es el precio de todos los bienes y servicios.

Q: es la cantidad de bienes y servicios existentes en el mercado.

P X Q = PBI

O sea, de la fórmula de la teoría cuantitativa se desprende que la velocidad del dinero multiplicada por la oferta monetaria es igual al producto bruto interno (precio por cantidad).

Entonces, la explicación monetarista de la inflación (escuela desarrollada en la Universidad de Chicago por Milton Friedman) es que si la velocidad del dinero (V) se mantiene constante y crece la oferta monetaria (OF) en un país donde la cantidad de bienes y servicios (Q) no crece (no se incrementa el PBI), la única manera de mantener la igualdad es subiendo el precio de los bienes y servicios.

Viéndolo en forma simplificada tenemos que:

Masa Monetaria = Bienes + Servicios

Cuando aumenta en forma descontrolada la masa monetaria y no aumenta la cantidad de bienes y servicios (país que no crece) debe aumentar el precio de dichos bienes, dado que a mayor dinero mayor consumo, lo que equivale a decir mayor demanda. Si la demanda aumenta y la oferta por X circunstancias no puede aumentar en la misma proporción, la única manera de volver al equilibrio es incrementando el precio de los bienes y servicios.

Además esto se fundamenta en la ley de oferta y demanda en la cual: Oferta = Demanda. Si la demanda sube, sube el precio, dado que al subir el precio le permite a la oferta cubrir los costos. Mientras mayor sea la cantidad de bienes y servicios que produce el oferente mayor será su costo, por lo cual, mientras mayor sea la demanda mayor será el precio de los bienes y servicios.

Teoría Keynesiana

Los keynesianos rechazan la idea de la estrecha relación entre la cantidad de dinero y los precios, para esta corriente la inflación es un fenómeno asociado al pleno empleo de los factores de la producción. Supongamos que estamos en una economía en donde hay un desempleo aproximadamente del 10% de los factores de la producción, en este caso si aumenta la demanda, los oferentes podrán utilizar ese 10% de los factores para producir una mayor cantidad de bienes y servicios, de este modo aumentará la oferta por lo cual la demanda quedará igualada a la oferta. Caso contrario, si estamos en una economía en la cual el aprovechamiento de los factores de la producción es del 100%, si aumenta la demanda, la oferta no podrá aumentar la cantidad de bienes y servicios dado que todos los factores están ocupados (economía de pleno empleo). Por ende, para igualar la ecuación oferta es igual a demanda deben subir los precios.

Con lo cual podemos concluir que la inflación según la visión keynesiana es un fenómeno relacionado con la demanda agregada (consumo + inversión + gasto público + importaciones = gasto total). Si en una economía de pleno empleo la demanda agregada supera a la oferta agregada (producto bruto interno + exportaciones), ello produciría inflación. Si estamos frente a una economía en donde hay desaprovechamiento de los factores de la producción, el aumento de la demanda agregada podría compensarse con el aumento de la oferta agregada, con lo cual podría evitarse la inflación.

Inflación de Costos

Dejando de lado las teorías económicas de inflación de demanda, a continuación analizaremos la que se aboca a la inflación de costos.

Según esta teoría, si por ejemplo se incrementa alguna partida integrante de los costos de todas las empresas, esto traerá aparejado un aumento generalizado de precios, tal caso ocurre con los salarios.

Muchas veces se fundamentó que la causa de la inflación eran los sindicatos, que reclamaban salarios más altos lo que hacía subir el costo laboral que se trasladaban a los precios. En la Argentina de la década del '80 los salarios subían conforme aumentaba la inflación, lo cual traía como consecuencia una mayor inflación. Lo mismo ocurre con el petróleo, cuando en las dos crisis energéticas de 1973- 1974, y de 1978 - 1979 el precio del crudo empezó a subir drásticamente, ello produjo una inflación mundial dado que el petróleo aumenta los costos no sólo de aquellas empresas que lo usan como elemento esencial del ciclo productivo, sino también para aquellas que no lo usan en el mismo, dado que aumenta por ejemplo el costo del transporte, y esto afecta a todo tipo de empresa ya sea que usen o no el petróleo. Por ende, según esta teoría, la causa de la inflación radica en los costos crecientes.

El caso argentino. Nuestra historia

Demás está decir que nuestra posición respecto a estas tres teorías, es aceptar la explicación monetarista. Por esta razón consideramos a la expansión monetaria como causa principal de la inflación, dado que históricamente cuando el gobierno tomaba políticas monetarias expansivas aumentaba el índice de precios al consumidor. Aunque cabe destacar que esto no implica rechazar las otras teorías, dado que es cierto que en las crisis energéticas de la década de 1970 se vivieron momentos de inercia inflacionaria bastantes importantes provocado por el aumento del crudo, pero pese a ello, habría que considerar que cuando se dieron esas dos crisis energéticas, el gobierno Argentino ya tenía el problema del déficit fiscal por lo cual recaía en el emisionismo para solventar dicho déficit. En cuanto a la teoría keynesiana es muy difícil ejemplificarla en la práctica, dado que se confundiría con las otras dos teorías, aunque esto no implica que descrea de la misma.

Además, la causa principal de la inflación de las décadas de 1970 y 1980, no era el costo ni la sobredemanda agregada (dado que estuvimos durante años con recesión), sino que el Estado emitía dinero para recaudar más vía impuesto inflacionario.

Uno de los agentes económicos que se benefician de la inflación como dicen Mochon y Beker es el Estado, dado que los ingresos fiscales son mayores ya que se incrementa el impuesto inflacionario.

Según Sebastián Edwards (...) como consecuencia de la debilidad de las estructuras financieras públicas, un número cada vez mayor de países se vio obligado a depender de la financiación inflacionaria como forma de acortar las distancias entre los gastos y los ingresos del gobierno.EDWARDS Sebastián. Crisis y reforma en América Latina: del desconsuelo a la esperanza. Buenos Aires. Emecé ediciones 1998. Página 12.

Con la inflación hay dos tipos de bienes que sufren fenómenos contrapuestos:

Bienes monetarios, que se desvalorizan, es decir, pierden valor (cuentas por cobrar, las cuentas por pagar, el dinero en efectivo, etc.).

Bienes no monetarios, que se valorizan, adquieren un mayor valor (bienes de uso, bienes de cambio, entre otros).

Esto equivale a decir a que el dinero cada día vale menos y los bienes y servicios cada día más. Entonces, en épocas de inflación debe elevarse el ingreso de los individuos, dado que aquellos que perciben una renta fija, con la inflación pueden comprar según cómo evolucione la misma una menor cantidad de bienes y servicios, por ende, siempre se eleva el ingreso de aquellos que perciben una renta fija, como por ejemplo lo asalariados. Esto beneficia en cierto modo al Estado ya que hay impuestos en que la proporción a pagar aumenta con el nivel del ingreso nominal y se eleva con la inflación, por ejemplo, las empresas deben pagar mayores contribuciones patronales. A este tipo de tributos se lo denomina inflacionario, es decir, a aquellos en que la proporción a pagar aumenta con la inflación.

Según Mochon y Beker El impuesto inflacionario grava las tendencias monetarias de la población y consiste en la pérdida de poder adquisitivo que sufre el dinero en poder del público cuando se incrementan los precios. Cuando el gobierno financia parte de sus gastos con emisión monetaria no deseada por el público, lo que está haciendo es deteriorar el valor real de los activos monetarios que poseen los particulares y apropiarse de ese monto para cubrir la brecha entre sus erogaciones y lo que recauda a través del resto de los impuestos.BEKER Víctor A. - MOCHÓN Francisco. Economía: principios y aplicaciones. Madrid. Editorial McGraw-Hill 1997. Página 306.

Adicionalmente, al elevarse los precios en forma generalizada, el Estado se beneficia también porque el estado es un deudor por excelencia, y por ende, como en la inflación el valor del dinero en términos reales es menor y en términos nominales no varía, todos los deudores en términos reales deben devolver una cantidad menor.

La reflexión final

Por todo lo expuesto, los problemas vinculados con el déficit fiscal del presupuesto es lo que lleva al emisionismo lo que trae aparejado la inflación, cuando dichas políticas monetarias expansivas no van acompañadas del crecimiento económico del país (aumento del PBI). Esto ocurrió durante décadas en nuestra historia.

Por esta razón, pienso que la actual inflación que vive nuestra economía es principalmente vinculada con el emisionismo, derivado de las dificultades para afrontar el gasto público dada la escases de los recursos del Estado, y en el marco de la recesión mundial por la cual están atravesando todos los estados.

Y a modo de reflexión final, todo mal que afecte a todo aspecto de la vida en general puede ser eliminado mientras se identifique sus causas y se adopten las acciones apropiadas. Decir que la inflación es una característica inherente a la economía argentina, es algo por demás errado, ningún sistema incluso el económico fue pensado para funcionar con falencias. Todo es cuestión de identificar las mismas y emprender las acciones necesarias para su eliminación.

Richard Leonardo Amaro Gómez

Contador Público

Licenciado en Administración de Empresas

Email: richardamaro@yahoo.com

¿Qué es la inflación?

Inflación es el crecimiento continuo y generalizado de los precios de los bienes y servicios y factores productivos de una economía a lo largo del tiempo. Otras definiciones la explican como el movimiento persistente al alza del nivel general de precios o disminución del poder adquisitivo del dinero.



Inflación es el crecimiento continuo y generalizado de los precios de los bienes y servicios y factores productivos de una economía a lo largo del tiempo.

En la práctica, la evolución de la inflación se mide por la variación del Índice de Precios al Consumidor (IPC). Para comprender el fenómeno de la inflación, se debe distinguir entre aumentos generalizados de precios, que se producen de una vez y para siempre, de aquellos aumentos de precios que son persistentes en el tiempo. Dentro de estos últimos también podemos hacer una distinción respecto al grado de aumento. Hay países donde la inflación se encuentra controlada por debajo del 10% anual, otros con inflaciones medias que no superan el 20% anual y países en los que el crecimiento sostenido de precios ha superado el 100% anual. Cuando la variación de los precios alcanza el 50% mensual se la denomina hiperinflación.



Causas de la inflación

La inflación, como fenómeno económico tiene causas y efectos. La definición de sus causas no es una cuestión sencilla debido a que aumento generalizado de los precios suele convertirse en un complejo mecanismo circular, del cuál no resulta sencillo determinar los factores que impulsan al incremento de los precios. Esta dificultad para determinar las causas de la inflación, ha sido el motor que impulsó a diversos teóricos a ensayar diferentes explicaciones sobre los procesos inflacionarios. Las teorías explicativas suelen agruparse en tres categorías. Por una parte, están las que consideran como explicación de la inflación un exceso de demanda agregada, o sea inflación de demanda. Por otra parte, se encuentran aquellos que apuntan a la oferta agregada como disparadora del proceso inflacionario, esto es lo que se denomina inflación de costos. Por último, existe un grupo de teóricos que entienden a la inflación como el resultado de rigideces sociales, esto es lo que se denomina inflación estructural.



Los Déficit Fiscales, su financiación a través de emisión y la inflación

El déficit fiscal es un posible disparador de un proceso inflacionario. Por una parte, suponiendo que partimos de una situación de equilibrio entre oferta agregada y demanda agregada, un incremento en el gasto del gobierno sin que sea acompañado por un incremento similar en los ingresos tributarios, generará tanto un exceso de demanda agregada, como un incremento en el déficit fiscal. Este hecho es el que señalan los keynesianos como disparador del proceso inflacionario.

Los monetaristas también suponen que es un exceso de demanda agregada lo que enciende el proceso inflacionario, pero difieren con los keynesianos respecto a la causa que genera ese exceso de demanda. Desde su concepción, es un incremento en la oferta monetaria, vía mayor disponibilidad de liquidez, lo que provoca el incremento de la demanda agregada. Por lo tanto, si el Estado, luego de haber agotado todas las fuentes de crédito privado, recurre a financiarse a través de incrementos en la emisión de moneda, generará un exceso de liquidez que se traducirá en exceso de demanda e incremento generalizado en los precios.

Cuando un gobierno acarrea una pesada deuda, cada le vez resultará más complicado conseguir financiamiento genuino. Cuando las fuentes de crédito se agotan y los déficits son persistentes, los gobiernos suelen recurrir a la impresión de moneda como último instrumento para financiar sus gastos. La emisión no genuina, es decir un incremento en la oferta de dinero no acompañado de un aumento en la demanda de moneda, genera un incremento en los precios.

La financiación de un déficit mediante emisión, tiene efectos diferentes según se trate de un régimen de tipo de cambio fijo o flexible. Como se verá, a los países que tengan déficit presupuestario crónico y de alta magnitud, les resultará complicado en extremo mantener un tipo de cambio fijo y tendrán que optar por pasar a tipo de cambio flotante o, al menos, hacer frecuentes ajustes de la paridad monetaria.

Déficits fiscales con tipo de cambio fijo

Cuando una economía que opera bajo un sistema de tipo de cambio fijo ha agotado sus fuentes de financiamiento provenientes de préstamos directos del público, interno y externo, la única herramienta que le queda para financiar el exceso de gastos sobre los ingresos es tomar préstamos del banco central.

Cada vez que el gobierno intente financiarse a través de préstamos del banco central, incrementará la base monetaria, pero dado que los saldos monetarios que se demandan permanecen constantes se generará un exceso de oferta de dinero. Las familias convertirán los saldos monetarios excedentes en activos externos, presionando hacia la devaluación del tipo de cambio. Como el banco central está comprometido a mantener el valor de la moneda doméstica a un nivel dado, deberá cambiar el exceso de moneda nacional por divisas. Este proceso continuará hasta que la oferta de dinero retorne a su nivel inicial e iguale a la demanda por saldos monetarios que se mantuvo constante durante todo el proceso.

Mientras el banco central disponga de divisas para sostener el tipo de cambio, la inflación se mantendrá bajo control dado que los precios internacionales no varían y se supone el cumplimiento de la ley de un solo precio. De esta forma, el gobierno podrá mantener el nivel de precios financiando sus gastos a través de la emisión. Pero esto es una solución que no puede sostenerse por mucho tiempo, ya que si el gobierno insiste con financiar sus déficits mediante la creación de dinero, sólo conseguirá agotar las reservas del banco central. Cuando los residentes del país advierten que el banco central no podrá mantener el valor de la moneda, cambian con mayor velocidad sus activos domésticos por activos externos, para protegerse de la eventual pérdida de valor que sufrirán ante la futura devaluación. Finalmente, cuando las reservas del banco central han llegado a su límite, no hay más opción que dejar que la moneda nacional se deprecie. El proceso finalizará con el abandono del sistema de tipo de cambio fijo, ya sea devaluando y fijando un nuevo valor más alto del tipo de cambio o permitiendo que la moneda nacional fluctúe libremente. Al colapso de un sistema de tipo de cambio fijo cuando se agotan las reservas del banco central se le llama crisis de balanza de pagos.

Déficits fiscales con tipo de cambio flotante

Cuando una economía se maneja bajo un sistema de tipo de cambio flotante ante un eventual incremento en la oferta monetaria el banco central ya no debe salir a defender el valor de la moneda ofreciendo divisas. Si la emisión se concreta, el valor de la moneda foránea aumentará. Dado que existe una relación entre los precios domésticos y externos, formalizada en la ley de un solo precio o paridad del poder de compra, la tasa de inflación será igual a la tasa de devaluación. En un sistema como este, hay una relación directa entre la magnitud del déficit que se pretende financiar y la tasa de inflación. El financiamiento del déficit proviene efectivamente del impuesto inflación.

Efectos de la inflación sobre la economía de un país

Los efectos de la inflación dependen en cierta medida según ésta pueda ser prevista o sea sorpresiva. Cualquiera sea la forma que tome la inflación, acarrea costos y mientras mayor sea la tasa de variación de los precios mayores serán los costos.

Existen costos de mantener dinero en efectivo, por lo que los agentes económicos dedican más tiempo a analizar qué harán con sus saldos monetarios. El proceso inflacionario implica, para los comerciantes, costos reales para actualizar los precios. El incremento continuo del nivel general de precios tiene efectos redistributivos a favor de los deudores, en la puja distributiva los asalariados y todos aquellos que dependan de ingresos nominales fijos verán disminuir sus ingresos reales. Por último, según ha sido estudiado por Olivera-Tanzi, la inflación también ocasiona costos para el fisco debido al retardo que existe entre el momento en que se realizan los gastos y el cobro de los impuestos.

Existen dos tipos de inflación; por un lado tenemos aquella que se conoce con anticipación y se incorpora a las expectativas de los agentes económicos; por otra parte, la inflación puede ser no anticipada por los agentes económcios, que es la que se presenta antes de que los individuos hayan ajustado sus expectativas.

Inflación Anticipada

- Los agentes tratarán de minimizar dicha pérdida reduciendo sus saldos medios de dinero.

- Se asignará mayor parte de la riqueza al consumo de bienes durables, como medio de protección contra el impuesto inflacionario.

- El proceso de actualización de los precios nominales implica costos reales asociados a las erogaciones que deben realizar los comerciantes en el proceso de demarcación.

- La inflación puede generar distorsiones en la presión tributaria. Por ejemplo, suponiendo que los tramos de impuesto a los ingresos se fijan en términos nominales, con el paso del tiempo los ingresos nominales se incrementarán, y la gente se desplazará a tramos tributarios más altos, incrementándose así su tasa tributaria marginal. De esta forma, una persona cuyo ingreso real antes de impuestos es constante sufrirá un incremento gradual en sus obligaciones tributarias y la pérdida consiguiente de ingreso disponible, debido simplemente a la inflación. Mientras mayor sea la variación en los precios, mayores serán los costos implicados.

- La inflación también implica costos para el Estado, ya que socava el valor de los tributos que recauda. Esto se debe a que existe un lapso de tiempo entre el momento en que se produce el gasto del Estado y el momento en que se recaudan los impuestos para cubrir dichas erogaciones. En muchos países, durante este tiempo de rezago, no existe ningún mecanismo para mantener el valor real de la obligación tributaria. Este fenómeno se conoce como el efecto Olivera-Tanzi, que puede llevar a un círculo vicioso. Un incremento del déficit fiscal se traduce en un aumento en la inflación, que a su vez, reduce los ingresos tributarios; menores ingresos tributarios, por su parte, incrementan aún más el déficit fiscal, y así sucesivamente.

Inflación no anticipada

Los principales efectos de la inflación no anticipada son redistributivos. Las sorpresas en las tasas de inflación conducen a desplazamientos del ingreso y la riqueza entre diferentes grupos de la población. Durante un proceso inflacionario, los deudores se verán beneficiados a costa de los acreedores, ya que la inflación socava las tasas reales de interés. Dependiendo del grado de aumento en los precios las tasas reales de interés pueden volverse negativas, lo que termina favoreciendo claramente a los sujetos que tomaron préstamos.

En general, todos los poseedores de activos financieros que tengan una tasa de rendimiento nominal fija, sufrirán una pérdida ante aumentos en la tasa de inflación. Para evitar el desgaste que sufren estos activos frente al aumento en los precios, se han desarrollado instrumentos indexados, que se comprometen a pagar una tasa de interés real o, dicho de otra manera, ajustan la tasa de interés nominal que pagan por un índice que evita la pérdida de valor provocada por el aumento en los precios.

Los efectos redistributivos de la inflación inesperada también se manifiestan dentro del sector familias. Los propietarios de viviendas hipotecadas resultarán beneficiados al ver que la cuota de su hipoteca disminuye en términos reales. Por otra parte las personas mayores, mantienen más saldos nominales que las más jóvenes, por este motivo un proceso inflacionario redistribuye ingresos a favor de los individuos de menor edad.

También se ven sujetos a una puja redistributiva los sectores asalariados. El aumento en los precios socava el salario real de los trabajadores contratados. Aun cuando los contratos laborales incluyan cláusulas de ajuste, la efectividad de estás para evitar la pérdida de los ingresos de los trabajadores, se ve reducida ya que los contratos se revisan esporádicamente mientras que el aumento en los precios es un proceso continuo, de esta forma los ajustes en los contratos sólo logran mejorar por cierto tiempo el salario real, a medida que la inflación sigue su curso ascendente, los salarios reales vuelven a caer. De esta forma, el proceso inflacionario no solo disminuye el salario real sino que también afecta su variabilidad.

Hiperinflación

Hiperinflación es una inflación muy elevada, según Philip Cagan es aquella que sobrepasa el 50 por ciento mensual.

Presiones Inflacionarias y Mecanismos de Propagación de la Inflación

En todo proceso inflacionario pueden distinguirse dos elementos: las presiones inflacionarias, que son los desequilibrios básicos causantes de aumentos autónomos en los precios y los mecanismos de propagación. Las presiones inflacionarias se originan en un proceso de demanda que provoca un ascenso de los precios en uno o varios mercados. Los mecanismos de propagación hacen que esos aumentos de precios se extiendan al sistema económico en su conjunto y se repitan a través del tiempo. Es posible que la presión inflacionaria luego desaparezca, incluso que se presenten tendencias deflacionarias, pero no por ello el proceso inflacionario habrá de detenerse: mecanismos de propagación, fundamentalmente las expectativas de inflación, pueden perpetuarlo y mantener o crear nuevas presiones inflacionarias. En todo proceso inflacionario prolongado los desequilibrios básicos van cambiando, en tanto que los mecanismos de propagación se hacen permanentes. (Arnaudo, Aldo "El progama antiinflacionario de 1973")

Causas de la Inflación en México

La inflación en méxico en 2011 fue del 3.82% anual, mientras que en el 2010 fue del 4.40% de acuerdo al INEGI.


Históricamente, desde la década del 70 la inflación fue en ascenso paulatino, hasta alcanzar picos de inflación en los años 83, 87 y 88, cuando alcanzó el valor de 114% anual. Luego del año 88, la inflación fue disminuyendo hasta el 1994, cuando fue del 7% . En 1995 la inflación subió nuevamente alcanzando el 35%. Luego comenzó a bajar nuevamente. Entre 2002 y 2011 se mantuvo por debajo del 5.30% y por encima del 3.63% anual.

Inflación Anual México, en %

Inflación Anual México,en %



En general las causas de inflación mas importante son:

- Monetaria: cuando el gobierno realiza una política monetaria expansiva, que no va acompañada con un aumento de la oferta de bienes y servicios.

- De costos: cuando por algún motivo estructural, sube el precio de un insumo clave en la economía (por ejemplo, el petróleo), y el aumento del precio se traslada al resto de la economía.


- Inercial: luego de períodos prolongados con inflación, o luego de una elevada inflación, las expectativas de inflación causan que cueste disminuir la inflación en el tiempo.

- Puja de sectores: cuando los empresarios, trabajadores o el gobierno, aumentan su participación en el ingreso nacional, ocasionando que el aumento en su ingreso, mediante el margen de beneficios, salarios o presión tributaria, se traslade al precio de los productos.

La inflación elevada tiene efectos negativos en la economía:

- Los precios pierden eficiencia como asignadores de recursos, dado que cambian los precios relativos y es mas difícil predecir las variaciones futuras de precios relativos y absolutos. Esto ocasiona que disminuya la eficiencia general de la economía.

- Cae la inversión de largo plazo.

- Puede ocasionar un deterioro en la distrubución del ingreso, dado que los ingresos de los asalariados, jubilados y beneficiarios de planes sociales se ajustan con retardo.

Causas de la Inflación en México.

Inflación Monetaria

En la siguiente tabla, vemos como en ciertos períodos, el aumento del circulante fue superior al aumento del PIB, esto es una causa de la inflación.

Años

Aumento del PIB

Aumento del circulante

1970-1976

0.06

0.223

 

 

1976-1982

0.06

0.367

 

 

1982-1988

0.001

0.695

 

 

1988-1992

0.14

0.6

 

 

A partir de 1999, el Banco de México adopotó un esquema de objetivos de inflación. A partir de 2006, se introdujo la ley de presupuesto equilibrado. Según diversas opiniones, si bien esto ayuda a mantener baja la inflación por motivos monetarios, esto dejó al gobierno con un instrumento menos para amortiguar los ciclos económicos.

Puja de Sectores

Ciertos sectores México tienen una estructura molopólica u oligopólica (petróleo, cemento, telecomunicaciones, etc.) , lo que ocasionó aumentos de precios que se trasladaron al resto de la economía.

Inflación Estructural

En los últimos años, en Estados Unidos, el impulso que se le dió a los biocombustibles ocasionó un aumento del precio del maiz. México se había convertido en un importador neto de este alimento, lo que ocasionó que el aumento en los precios internacionales del maíz se traslade parcialmente al índice de precios al consumidor. Entre 1982 y 1986 el precio del maiz importado también fue superior al precio del maiz nacional.

Inflación Inercial

En épocas de alta inflación, se presentó un fenómeno conocido como "Espiral Inflacionaria". Los comerciantes y empresarios ajustaban los precios previendo que la inflación del mes sería igual o superior a la del mes pasado, de este modo, se aseguraban poder proveerse de mercancías el mes siguientes y un margen de ganancias. Como los agentes son aversos al riesgo, esta estrategia es preferible a correr el riesgo de tener pérdidas o no poder suministrarse de mercancías el mes siguiente. Además, los consumidores tardan en ajustar sus niveles de compras de acuerdo al precio ajustado por la inflación.

Otro fenómeno relacionado con la inflación inercial fue el hecho de la disminución de los recursos del estado en términos reales, dado que ciertos ingresos no se ajustaron por la inflación. Entonces el estado emitió para poder financiar sus actividades, causando inflación monetaria.

La adopción de la política de objetivos de inflación por parte del Banco de México, busca sincronizar las expectativas inflacionarias de los agentes y de este modo poder disminuir la inflación inercial sincronizadamente y evitando fenómenos como el descrito anteriormente. Con las metas de inflación, se plantea un objetivo de inflación y un margen de error del +- 1%. Esto puede tener consecuencias negativas para atenuar los ciclos económicos por causas externas (por ejemplo, recesión en Estados Unidos).

Control de la Inflación en Argentina

Control de la Inflación en Argentina



Junio de 2002

PAPP, Paula I. E-mail: paupapp@eco.unc.edu.ar

Trabajo presentado para la cátedra de Economía Monetaria, Universidad Nacional de Cordoba, Facultad de Ciencias Economicas Profesor Ángel Enrique Neder.

Abstract



El presente trabajo analiza la posibilidad de implementar un régimen de control de la inflación en Argentina. Se establecen lineamientos generales de la política, ventajas que surgen de su utilización y requisitos que deben cumplirse para que su puesta en práctica sea exitosa. Se mencionan experiencias de países latinoamericanos de similares características. Finalmente se realiza una confrontación entre lo desarrollado y la situación actual de nuestro país, para concluir que, para llevarse a cabo, es necesario desarrollar serias reestructuraciones y modelos de predicción de la inflación que se ajusten a las condiciones domésticas.

Introducción

En la actualidad, los Bancos Centrales implementan regímenes de política monetaria cuya principal característica es el uso de anclas de tipo nominal. Siguiendo los lineamientos dados por Mishkin, Frederic S. (1999), existen cuatro tipos básicos: control sobre el tipo de cambio nominal, los medios de pagos, la inflación o una política que establezca un ancla nominal implícita pero no explícita. Estos anclajes reducen las expectativas inflacionarias y disminuyen las políticas discrecionales que conllevan problemas de inconsistencia temporal.



En la última década se ha observado una tendencia hacia la adopción de un régimen de control de la inflación: países como Nueva Zelanda, Inglaterra, Suecia, Canadá, Finlandia, Australia, España, México, Israel, lo llevan a cabo, y en América Latina los principales representantes son Chile, Brasil y México.

En Argentina, se abandonó el control del tipo de cambio implementado a través de la Ley 23.928 de Convertibilidad, para establecer un sistema dual, con una cotización oficial fija de 1.4 pesos por dólar, y un segundo valor de la moneda determinado por el mercado. El gobierno esperaba que en pocos meses las dos cotizaciones convergieran a un valor "razonable", para de esta forma eliminar la tasa oficial y contar con un único tipo de cambio flotante. En este momento, Argentina se encuentra bajo un régimen de flotación sucia, sin un ancla nominal creíble.

El presente trabajo analiza la posibilidad de éxito de un régimen de control de la inflación en la situación coyuntural actual. Para ello, en la primera parte se establecen las características generales de este marco de política, determinando condiciones previas, ventajas e inconvenientes de la misma. En la segunda sección consideraremos las experiencias vividas por países latinoamericanos de similares características como Chile, Brasil y México. Luego, confrontaremos lo establecido en las dos primeras secciones con la realidad argentina para determinar la factibilidad de una exitosa implementación.

Inflation Targeting no consiste en una simple regla, sino en un marco para aplicar política monetaria, donde el objetivo principal de la autoridad monetaria es alcanzar y mantener una tasa de inflación reducida y estable. El ancla nominal utilizada es el anuncio público de una meta inflacionaria y el compromiso de cumplirla, lo cual da credibilidad y transparencia al sistema.

Siguiendo a Mishkin (op. Cit.), este sistema, en contraposición con el control del tipo de cambio, permite ejercer política monetaria independiente para resolver cuestiones domésticas a la vez que permite a las autoridades monetarias utilizar toda la información disponible al momento de determinar cursos de acción. Otra ventaja es ser un sistema transparente y entendido fácilmente por el público debido a la comunicación regular, reduciendo de esta forma la incertidumbre. Brinda mayor responsabilidad al Banco Central, reduciendo presiones para llevar a cabo políticas inflacionarias, facilitando la focalización del debate político hacia objetivos de largo plazo y disminuyendo el problema de inconsistencia temporal que ocasiona la búsqueda de objetivos de corto plazo en detrimento de los de largo plazo. Un error es considerar la meta de inflación como una regla rígida, la misma contiene discreción, la cual debe ser administrada responsablemente. Como indica Calvo (1997), este sistema da flexibilidad a la política monetaria, lo cual puede resultar de gran utilidad para lograr la estabilidad.

Un modelo simple para entender el funcionamiento de una meta de control de la inflación es el señalado por Walsh (2001), donde se emplean: una Curva de Phillips aumentada por expectativas y una descripción de política monetaria, reflejando las preferencias del Banco Central.

Siguiendo a Masson, Savastano y Sharma (1998), los requisitos previos para que un país implemente una meta inflacionaria y logre su objetivo son:

  1. ¿Qué es Inflation Targeting?

    • Grado considerable de independencia del Banco Central. Este objetivo se logra otorgándole libertad de orientar los instrumentos hacia objetivos nominales. Para que sea posible, no deben presentarse síntomas de "predominio fiscal", es decir, los préstamos del Banco Central y del sistema bancario al sector público deben ser escasos o nulos a la vez que los mercados financieros ser lo suficientemente activos para absorber colocaciones de deuda pública; así el gobierno no depende de los ingresos generados por la emisión monetaria. De no cumplirse con estas condiciones, los desequilibrios fiscales generarán presiones inflacionarias y llevarán a que la política monetaria actúe en forma acomodaticia.

    • Abstención de fijar un nivel o camino para otras variables nominales como salarios o tipo de cambio nominal, para no subordinar la política monetaria hacia dichos objetivos. Otras metas, como evitar gran variación del tipo de cambio, pueden coexistir con el objetivo de inflación, siempre que quede en claro, que el segundo es el primordial. Existe riesgo de disminuir la credibilidad o transparencia del sistema de implementarse objetivos múltiples.

    • Marco de política monetaria, con cuatro elementos:

      1. Metas de inflación explícitas: Anuncio público de estrategia de mediano plazo para lograr la estabilidad de precios y una meta intermedia para la inflación en el futuro. Información regular sobre estrategias y decisiones.

      2. Compromiso institucional hacia la estabilidad de precios en la forma de reglas de operación para la autoridad monetaria.

      3. Existencia de un modelo de análisis con variables claras y pertinentes. Datos económicos y capacidad analítica para permitir realizar correctas proyecciones a través del modelo.

      4. Procedimiento operativo orientado hacia el futuro, donde las previsiones de la inflación utilicen como meta intermedia principalmente a la política monetaria.

  • Experiencias en economías emergentes

América Latina presenta una dicotomía entre dos regímenes de política monetaria extremos: fijación del tipo de cambio (implementada principalmente a través de Cajas de Conversión o Dolarización) y sistemas de metas inflacionarias.

Según Corbo y Schmidt-Hebbel (2001), entre 11 países latinoamericanos, 8 contaban con un sistema de control del tipo de cambio en 1994, mientras que sólo 3 lo continuaban haciendo en el 2000 (Argentina, Uruguay y Venezuela). Argentina y Uruguay ya no lo implementan.

Existe una tendencia a abandonar el régimen monetario de control del tipo de cambio para considerar el control de la inflación. Entre los países latinoamericanos observamos: Chile, Brasil y México

Chile cuenta con la mayor experiencia entre los países de América Latina en la implementación de un régimen de control de la inflación. Brasil posee el sistema más sofisticado técnicamente, cuenta con un conjunto de modelos para apoyar el proceso de decisión de política monetaria. México luego de la crisis del tequila, comenzó a implementar un régimen de control de medios de pago, que gradualmente se convirtió en una meta intermedia del control de la inflación.

 

 

Chile

Brasil

México

Fecha de Adopción del Sistema

Septiembre de 1990

Junio de 1999

Gradual desde Tequila

Inflación al momento de implementación

Excedía el 20% anual

Cercana al 3% anual

Superaba el 15%

Independencia del Banco Central

 

 

 

 

Formal

Sí, desde 1989

No total



 

De objetivos

Si

No

No. Tipo de cambio flota con algunas intervenciones.

 

De instrumentos

Si

Si



Conflicto con otras metas

Implementaba bandas para el tipo de cambio (hasta Septiembre 1999)

No

No. Tipo de cambio flota con algunas intervenciones.

Valor de la meta establecida por

Banco Central en acuerdo con el Ministro de Economía

Conjuntamente Gobierno y Banco Central

Banco Central

Instrumento utilizado

Tasa de interés Overnight (real)

Tasa de interés Overnight

Base Monetaria (Diaria)

Indice Utilizado para el anclaje

IPC

IPCA

IPC

Cláusulas de excepción o de escape

Ninguna

De no cumplirse las metas, el presidente del BC emitirá justificación abierta al Ministro de Finanzas

Ninguna

Transparencia

 

 

 

Publicación de Reportes de Inflación

Si (desde Mayo del 2000)

Si

Si (desde abril del 2000)

Cuadro 1- Inflation Targeting en algunos países latinoamericanos

Hasta el momento, esta técnica ha demostrado ser exitosa para los países que la implementan. Brasil, Chile y México han presenciado un rico crecimiento económico y fortalecido la entrada de capitales. Utilizaron inflation targeting para aumentar la credibilidad, disminuir expectativas inflacionarias y lograr un camino de convergencia hacia una baja inflación. La mayoría de ellos lograron alcanzar bajas tasas de inflación a través de políticas gradualistas con las cuales acrecentaron la confianza en el régimen.

  • Posibilidades de implementación en Argentina

Desde principios de este año, Argentina, ha seguido una política monetaria de flotación sucia, donde el Banco Central, a través de intervenciones en el mercado, intenta modificar el valor del tipo de cambio. Al ser un componente muy importante en la determinación del índice de precios y de las expectativas de la población, el manejo del tipo de cambio se vuelve necesario para lograr el control de la inflación. Experiencias de países como Chile, demuestran que la implementación de un objetivo dual de inflación y tipo de cambio crea la posibilidad de generar conductas especulativas que hacen fracasar el régimen elegido. El compromiso de actuar en el mercado cambiario hace a la política monetaria susceptible a ataques especulativos. El establecimiento de una meta para el tipo de cambio puede bloquear el mecanismo mediante el cual la política monetaria afecta la inflación con mayor rapidez. La efectividad de la política monetaria se reduce de fijarse bandas para el tipo de cambio. Al aproximarse éste al límite superior de la banda, las expectativas inflacionarias no se relacionan con la tasa de interés ni con los cambios en la brecha del producto ya que no existe credibilidad en que se va a mantener la búsqueda de la inflación y de esta forma fracasa el régimen monetario. El Banco Central, al defender el tipo de cambio, vende divisas extranjeras y adquiere moneda local, contrayendo la oferta monetaria, se elevan la tasas de interés y existe la posibilidad de que se genere una inflación de costos que no puede combatirse a menos que se esté dispuesto a abandonar la meta de control del tipo de cambio.

El Banco Central de la República Argentina cuenta con independencia de jure, es decir, según la legislación vigente: El presidente es designado por el Poder Ejecutivo Nacional con acuerdo del Senado de la Nación. El período de duración del mismo en el cargo (6 años), es mayor que aquél que le corresponde al presidente de la nación (4 años). Según el artículo 1ro de la Carta Orgánica del Banco Central, se considera al mismo como una entidad autárquica del Estado Nacional, lo cual le otorga independencia económica. El artículo 3ro obliga a dar publicidad de sus actos, congruente con un régimen democrático y le proporciona independencia, ya que establece que "En la formulación y ejecución de la política monetaria y financiera el Banco no estará sujeto a órdenes, indicaciones o instrucciones del Poder Ejecutivo nacional".

En la práctica se observa que la independencia está muy limitada. Se advierten constantes influencias del Poder Ejecutivo en el funcionamiento del Banco Central, manifestadas a través de pedidos de inmunidad del banquero central (a mi juicio, si bien otorga mayor independencia, no es consistente con un régimen democrático de gobierno y disminuye la responsabilidad del funcionario), cierre y reapertura reciente de la Secretaría de Prensa del Banco Central por el Ministro de Economía, declaraciones de los banqueros centrales que si los "obligan" a emitir más allá de un límite dejarían el cargo, y renuncias de diversos funcionarios encargados de la política económica.

Otro inconveniente que se presenta en Argentina relacionado con el Banco Central, es la falta de credibilidad que presenta el mismo como combatidor de la inflación. Durante los períodos de inflación e hiperinflación que se presentaron, el Banco Central no logró disminuir la tasa de crecimiento de los precios. Fue necesario la implementación de un régimen de tipo de cambio fijo a través de una Caja de Conversión para lograr credibilidad, quitándole de esta manera la posibilidad al Banco Central de llevar a cabo política monetaria autónoma.

Con respecto a los síntomas de "predominio fiscal", el gobierno nacional presenta déficit, gran parte del cual se encuentra en manos de diversas entidades financieras y bancarias. El crédito privado para financiamiento de deuda pública se encuentra muy limitado por el alto grado de desconfianza de la capacidad de pago, la tasa de riesgo país y la falta de apoyo de los organismos internacionales de crédito, lo que determina la inexistencia de mercados financieros suficientemente activos para financiamiento gubernamental. Según datos oficiales, 23% de la deuda indirecta de la administración central con garantía de contrapartida, es con el Banco Central. Es importante llevar a cabo políticas destinadas a reducir el déficit fiscal, no sólo para evitar que la política monetaria actúe en forma acomodaticia, sino también para lograr credibilidad en el compromiso con la meta inflacionaria.

La presencia de inflación actual dificulta predicciones futuras precisas. El establecimiento de metas en estas condiciones dañan aún más la credibilidad del Banco Central. Sin embargo, países como Chile y México, quienes presentaban altas tasas anuales de inflación, implementaron el régimen exitosamente a través de políticas graduales. La inflación actual no es necesariamente un impedimento para llevarlo a cabo.

Debe establecerse una estrategia y un modelo de predicción de la inflación con variables precisas y relevantes. No será una tarea sencilla, ya que modelos simples como Curva de Phillips aumentada por expectativas no se aplican, al presenciarse crecimiento en el nivel de precios acompañado por una gran recesión (estanflación). Al momento de diseñarse el modelo, es importante considerar la influencia que generan las variaciones del tipo de cambio en la inflación (a través de las expectativas, precio de bienes transables y costos). El objetivo de inflación debe considerarse primordial, de no ser así la política no tendrá éxito.

El programa a implementar estará orientado hacia el largo plazo, por lo cual deben minimizarse presiones políticas donde priman objetivos inmediatos, evitando así la inconsistencia temporal.

  • Comentarios finales

Las características actuales de la coyuntura argentina no cumplen la mayoría de los requisitos necesarios para la implementación de un sistema de control de la inflación. No obstante, por lo visto en experiencias realizadas en otros países, hay condiciones que no son estrictamente necesarias, o bien son solucionables, aunque no sin un gran esfuerzo.

La primera medida necesaria para poder adherirse a esta política, de la misma forma que fue realizada por Brasil, es disminuir el déficit fiscal, mediante lo cual se genera mayor confianza, demuestra el compromiso hacia el control de la inflación, a la vez que brinda posibilidades de realizar política monetaria no acomodaticia.

El Banco Central debe actuar con mayor independencia. Si bien, el mismo no posee aún credibilidad como combatidor de la inflación, por experiencias como las de Chile, Brasil y México se observa que ésta puede ganarse gradualmente, instituyendo en primera instancia objetivos inflacionarios poco exigentes, para luego, una vez obtenida cierta confianza, comenzar a establecer metas fijas para la evolución de los precios. La presencia de independencia de jure no es importante, lo primordial es la de facto. Esto puede ser observado para Brasil, donde a pesar de no poseer independencia legal completa, el Banco Central cuenta con libertad de implementación de instrumentos lo cual lo habilita a llevar a cabo políticas de control de la inflación. También es necesario aumentar el nivel de comunicación entre la autoridad monetaria y el público.

Es fundamental establecer un compromiso claro y firme hacia la estabilidad de precios, con la menor intervención de otras variables de tipo nominal. Este es el mayor inconveniente en Argentina, al recurrir la población al dólar para proteger el valor real de sus ingresos, se obliga a la política monetaria a considerar el exceso de demanda en el mercado cambiario como una de las principales presiones inflacionarias de la economía. Si la política establecida resultara creíble, generará confianza, esta fuga de capitales disminuirá y permitirá alcanzar con mayor libertad un objetivo de inflación.

Resulta, por lo tanto, necesario realizar serias reestructuraciones políticas y en los organismos del gobierno, dando mayor independencia al Banco Central y reduciendo el déficit fiscal. Las mismas, acompañadas por otras medidas como el establecimiento de un sistema de justicia eficaz, mayor comunicación y transparencia, crean confianza y credibilidad en la política económica. De esta forma, se eliminan las expectativas inflacionarias, que en Argentina significa la disminución de la demanda de la divisa norteamericana, permitiendo la implementación de este régimen.

 

Bibliografía

 

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Calvo, Guillermo A., (1997). "Monetary and Exchange Rate Policy for México. Keys Issues and a Proposal". University of Maryland.

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Corbo, Vittorio y Schmidt-Hebbel, Klaus, (2001). "Inflation Targeting in Latin America". Banco Central de Chile. Documentos de Trabajo. Nro. 105, Septiembre.

Masson, Paul R., Savastano, Miguel A. y Sharma, Sunil. (1998). "¿Puede el establecimiento de metas para la inflación servir como marco de la política monetaria en los países en desarrollo?". Finanzas y Desarrollo. Marzo. pp. 34-37.

Mishkin, Federic S. (1999). "International Experiences With Different Monetary Policy Regimes". Journal of Monetary Economics, Edición Especial: Monetary Policy Rules, Vol. 43, Nro. 3, Junio.

Mishkin, Frederic S. y Schmidt-Hebbel, Klaus, (2001), "One Decade of Inflation Targeting in the World: What Do We Know and What Do We Need to Know?". National Bureau of Economic Research. Working Paper 8397. Julio.

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Nader, Nazmi (2002). "Argentina: An Economy Without an Anchor". International Market Analysis. Banc One Capital Markets, Inc. 7 de Enero

Walsh, Carl E., (2001). "Teaching Inflation Targeting: An Analysis for Intermediate Macro". Julio. http://www.indiana.edu/~econed/issues/v33_4/4.htm

El impacto de la política monetaria en las diferentes regiones geográficas: la relación entre la cantidad de dinero y el nivel de precios para el caso de Argentina 2003-2010

El impacto de la política monetaria en las diferentes regiones geográficas: la relación entre la cantidad de dinero y el nivel de precios para el caso de Argentina 2003-2010



Lic. Ignacio Galán galan.ignacio@yahoo.com.ar



Diciembre 2011

Las regiones geográficas que conforman el territorio argentino presentan características disímiles entre sí, entre las cuales se destaca la tasa de desempleo. Una política monetaria aplicada de manera centralizada y que no tenga en cuenta estas diferencias provoca, en el corto plazo, un impacto diferente en el nivel de precios de cada región. Se llevó a cabo un análisis de cointegración entre el agregado M2 privado y los índices de precios al consumidor de aquellos aglomerados representativos de cada región, poniendo en evidencia la existencia de una relación positiva entre la cantidad de dinero y el nivel de precios en el largo plazo. Se estimó un modelo de corrección de errores para cada uno de los aglomerados del cual se desprende que la relación entre la cantidad de dinero y el nivel de precios difiere entre regiones, resultando significativa la dinámica de largo plazo entre ambas variables al momento de analizar el ciclo económico. En aquellas en donde el desempleo es más elevado la relación dinero-precios es más débil que en aquellas regiones más próximas al pleno empleo.



The geographical regions which make up the Argentinian territory present dissimilar characteristics among which the unemployment rate could be mentioned. A centralized monetary policy which does not take into account these disparities provokes, in the short term, a different impact in the level of prices of each region. A co-integration test between an aggregate m2 private and the consumer price index of the representative conglomerations of each region was carried out. This brought to light a positive relationship between the amount of money and the level of prices in the long run. In the same way, an error correction model for each of the conglomerates was considered. This revealed that the difference between the quantity of money and the level of prices differs between regions, therefore making the long term dynamics between both variables at the moment of analyzing the economic cycle significant. In those areas where the unemployment rate is higher, the relationship between money and prices is weaker than in those which are nearer full unemployment.

Palabras clave: política monetaria, regiones geográficas, dinero, precios, desempleo.

Introducción

El impacto que tiene la política monetaria aplicada de manera centralizada, en un área conformada por diferentes regiones con características disímiles entre sí, es motivo de análisis en los principales países del mundo debido a que podría no generar el mismo impacto en cada una de las regiones según las particularidades que cada una de ellas posea.

Julio H.G. Olivera (1991) sostiene que el multiplicador monetario difiere entre las diferentes regiones así como también la velocidad de circulación del dinero. Asimismo afirma que según el nivel de actividad económica que presente cada una de las regiones, las consecuencias de un aumento en la cantidad de dinero serán diferentes. En aquella región con una alta tasa de desempleo, la política monetaria tendrá un mayor impacto en el producto y, por ende, en el nivel de empleo. Diferente es el caso de una región en donde la tasa de desocupación es menor ya que el aumento de la cantidad de dinero se traducirá en un incremento en el nivel de precios. De esta afirmación se desprende que el impacto que pueda tener una determinada política monetaria en el nivel de precios puede variar de una región a otra de acuerdo a la tasa de desempleo que cada una de ellas presente. Olivera destaca que, si bien en largo plazo estas diferencias no tienen mayor relevancia, en el corto plazo deben ser tenidas en cuenta a la hora de adoptar medidas de política monetaria.

El objetivo principal de este trabajo es analizar el impacto de la política monetaria implementada de manera centralizada por el Banco Central de la República Argentina durante el período 2003-2010 en el nivel de precios de cada una de las regiones geográficas que conforman la nación. Para alcanzar este objetivo, este trabajo pretende estimar un modelo con corrección de errores para cada una de las regiones, a través del cual se pueda verificar la existencia de una relación entre la cantidad de dinero y el nivel de precios así como también la dirección e intensidad de dicha relación. Para ello previamente se incluirá un análisis de cointegración entre las variables seleccionadas.

La hipótesis central de este trabajo es verificar que la implementación de una política monetaria de manera centralizada genera diferente impacto en el nivel de precios según el nivel de desempleo que presente cada región. De acuerdo a lo que sugiere gran parte de la literatura, al haber capacidad ociosa de los recursos una expansión monetaria provoca un mayor estímulo al nivel de actividad económica, mientras que cuando una economía se acerca al pleno empleo allí las expansiones monetarias tienen un mayor impacto en el nivel de precios. En ese sentido se buscará verificar que en aquellos aglomerados en donde la tasa de desempleo es mayor, la relación entre la cantidad de dinero y el nivel de precios es débil, mientras que en aquellos donde la tasa de desempleo es menor esta relación se vuelve más significativa.

Es necesario resaltar que este análisis se realiza exclusivamente para el corto plazo debido a que en el largo plazo es factible que la tasa de desempleo difiera entre regiones por cuestiones estructurales.

El trabajo se organiza de la siguiente manera. En la sección 2 se desarrolla el marco teórico referido al impacto que tiene una política monetaria centralizada en las diferentes regiones geográficas, haciendo hincapié en el caso de Estados Unidos, Europa y Argentina. En la sección 3 se realiza una breve descripción de la dinámica entre la cantidad de dinero, el nivel de precios y el nivel de empleo. En la sección 4 se describen las diferentes regiones geográficas en las cuales se divide el territorio argentino así como la tasa de desempleo que cada una de ellas presenta. En la sección 5 se exponen los resultados de las diferentes estimaciones econométricas realizadas. Por último, en la sección 6 se detallan las conclusiones de este trabajo.

Política económica seguida en México para controlar la inflación durante los primeros años de la década de los ochentas

Autor: Andrea Salas Ortiz


Introducción: Problema de investigación

La economía mexicana ha cursado por un largo período de transición del modelo de industrialización por sustitución de importaciones y su secuela del boom petrolero hacia el modelo de economía abierta. Esta transición no ha sido fácil y ha descrito un largo período para la estabilización de las variables macroeconómicas a través de la política económica de ajuste. Como primer acercamiento a nuestro objeto de estudio, se hace un análisis econométrico acerca de la importancia de la inflación durante la década de los 80´S. La conclusión es simple: durante la década de 1980 a 1990 la inflación fue una variable de gran peso para la dinámica económica del país. Como punto uno, la relación entre la variable inflación y el PIB es negativa esto se traduce como que a mayor inflación menor PIB, en segundo lugar el resultado que arrojó la regresión lineal es, por 1 unidad de aumento en la inflación el PIB descenderá 0.06 puntos porcentuales. Para más información, ver en Anexo la parte técnica de dicho análisis econométrico.

Por lo tanto, para comenzar la recuperación económica era prioridad estabilizar la inflación. El presente trabajo está centrado en las políticas económicas seguidas para controlar los precios y tiene como Hipótesis central: La política económica seguida por el gobierno a través del PIRE, no fue la correcta ante el elevado incremento de los precios durante la crisis de 1982.


PRIMERA GRAN INFLACIÓN 1982-1983

En 1983 la dinámica de la inflación estuvo determinada tanto por los desequilibrios económicos y financieros que se agravaron considerablemente a fines de 1982, como por los esfuerzos realizados durante 1983 para corregirlos.

Por lo que toca a la inercia inflacionaria que era preciso contener, las condiciones del mercado cambiario que imperaron en los últimos meses de 1982 afectaron desfavorablemente la evolución de los precios durante el año siguiente. La aguda escasez de divisas que se experimentaba entonces, y los problemas administrativos inherentes al control de cambios, sobre todo en sus inicios, dificultaron considerablemente la importación de los insumos requeridos por la planta productiva del país.


Asimismo, las sucesivas devaluaciones del peso se tradujeron en una elevación del costo en moneda nacional de los componentes importados y en una presión al alza en los precios internos de los bienes y servicios comerciables internacionalmente.

Los elementos anteriores plantearon restricciones a la oferta interna que sólo podrían corregirse gradualmente, y su efecto sobre el ritmo de la inflación se vio reforzado por la gran liquidez que había acumulado la economía a fines de 1982, como consecuencia del enorme déficit fiscal. Así, en diciembre de 1982 y enero de 1983, los precios al consumidor se incrementaron 10.7 y 10.9 por ciento, respectivamente.

De haberse repetido crecimientos mensuales de precios de ese orden durante el resto del año, en 1983 se habría llegado a una inflación cercana a 250 por ciento. Por ello, las expectativas de inflación se vieron afectadas adversamente. De hecho, al iniciarse el año, algunos analistas que siguieron de cerca el comportamiento de la economía mexicana pronosticaban que la inflación en 1983 sería aún superior a la observada en 1982.

Estructura de la inflación en 1982

Desde la segunda mitad de 1978 hasta el final de 1980, la proporción de los productos cuyos precios cambiaron a ritmos similares al promedio tendió a decrecer sustancialmente. En 1981, este fenómeno comenzó a revertirse y la magnitud de la dispersión de las tasas de crecimiento de los precios tendió a ser cada vez menor conforme transcurrió el año. Al observar las distribuciones mensuales de los precios relativos durante 1982, se puede concluir que, en promedio, el número de artículos cuyos precios siguieron a la inflación fue muy similar al de 1981. Sin embargo, debe mencionarse que los artículos que en 1982 eliminaron el rezago de sus precios tienen gran importancia en la “canasta” del consumidor, lo cual permitió que la estructura de precios suprimiera fuertes tensiones. Esto fue consecuencia de las más frecuentes revisiones de los precios y tarifas oficiales realizadas en 1982.

Todo lo anterior denota que la estructura de precios tuvo que sacudirse en un corto lapso las tensiones acumuladas durante varios años. No debe dejar de señalarse que la liberación de estas presiones, causó la fuerte aceleración que la velocidad de aumento de los precios experimentó en 1982, y que los llevó a registrar la más alta tasa de crecimiento de la historia.

Consecuencias: PRECIOS 1982

En 1982, el Índice Nacional de Precios al Consumidor registró un crecimiento de 98.8 por ciento, medido de diciembre de 1981 a diciembre de 1982. En el mismo período, el Índice de Precios al Mayoreo en la Ciudad de México se incrementó en 92.6 por ciento y el Índice Nacional de Precios Productor lo hizo en 93.5 por ciento.

De acuerdo a la comparación de los niveles promedio de los índices respecto 1981, las variaciones son las siguientes: 58.9 por ciento en el caso de los precios al consumidor, 56.1 por ciento para los precios al mayoreo, y 57.5 por ciento para los precios productores.

La magnitud de los aumentos registrados por los precios se siguió asociando a la expansión de la demanda agregada -principalmente impulsada por el crecimiento del gasto público- que siguió haciendo frente a una oferta incapaz de responder con la misma rapidez. Por otra parte, a esto deben agregarse los efectos de los ajustes en la paridad cambiaria ocurridos a lo largo del año, y las alzas que se autorizaron en productos bajo control oficial de precios -sobre todo en los bienes y servicios producidos por el sector público- con el fin principal de reducir las erogaciones del sector por concepto de subsidios y, en algunos casos, de evitar el consumo excesivo. Estos dos factores explican la intensa aceleración que el ritmo de crecimiento de los precios experimentó en la segunda mitad del año. Puede observarse que en la primera parte del año el incremento de los precios de algunos servicios fue relativamente más vigoroso. En esta etapa, los prestadores de dichos servicios tuvieron cierta delantera en cuanto a ajustarse a las altas expectativas de inflación. Sin embargo, dicha ventaja se perdió en el transcurso del año.

Precios al consumidor

Al analizar la evolución mensual del Índice Nacional de Precios al Consumidor, puede encontrarse una clara tendencia hacia la aceleración en el ritmo de ascenso de los precios. En efecto, en el primer semestre del año la tasa media de crecimiento mensual del índice se fijó en 4.7 por ciento, con los incrementos menores en febrero y en marzo (3.9 y 3.7 por ciento, respectivamente).En contraste, durante el segundo semestre esa tasa media aumentó a 7.1 por ciento, con los movimientos más elevados en agosto y en diciembre (11.2 y10.7 por ciento).

El comportamiento de los precios en el segundo semestre se explica, como ya se apuntó, por la influencia de los ajustes en la cotización del peso y las autorizaciones para aumentar los precios de bienes y servicios tan importantes dentro del consumo familiar como el pan, las tortillas, la gasolina, el azúcar, y los servicios eléctricos y de transporte público.

Por otra parte, es interesante destacar el hecho de que, en 1982, por vez primera en los últimos seis años, las mercancías experimentaron un mayor crecimiento de precios que los servicios. El relativamente bajo incremento de los precios de las mercancías en esos seis años, pudiera ser explicado por la favorable contribución de las importaciones en la oferta agregada que la economía experimentó en el lapso. Efectivamente, mientras en el período 1977-81 el índice correspondiente a los servicios aumentó en 200.6 por ciento, el de las mercancías lo hizo en 169.6 por ciento. En 1982, el fenómeno se revirtió y los incrementos fueron de 106.1 por ciento para las mercancías y de 85.4 por ciento para los servicios. En 1981, los aumentos correspondientes fueron de 26.4 y 32.4 por ciento, respectivamente.

Otros bienes y servicios con crecimiento de precios mayor al promedio y que influyeron en el incremento del índice general son: leche fresca y procesada (101.2 por ciento en promedio), pan (116.7 por ciento), carne de res (104.5 por ciento), refrescos embotellados (135 por ciento), aceites y grasas vegetales comestibles (110.2 por ciento), carne de pollo (104.2 por ciento), servicios médicos (100.8 por ciento), servicios de restaurantes y bares (99.7 por ciento), azúcar (122.2 por ciento) y tortillas (99.5 por ciento). Como vemos estos son productos bastantes consumidos por toda la sociedad, ésta fue la que pago el costo del ajuste; Resultaba un verdadero lujo consumir azúcar, carne o tortillas a ese precio.

POLÍTICA ECONÓMICA LLEVADA A CABO BAJO EL PIRE (Programa inmediato de reordenación económica)

Ante éste panorama el gobierno entrante no podía hacer otra cosa que no fuera la puesta en marcha de un programa que revirtiera o solucionara la situación por la que atravesaba el país. De La Madrid reconoce la situación de emergencia y anuncia el PIRE. El Programa inmediato de reordenación económica cuyos objetivos generales fueron:

- reducir la inflación

- proteger el empleo y la planta productiva

recuperar el crecimiento sostenido de la economía

Para que esto se pudiera llevar a cabo se tomaron las siguientes medidas:

- Drásticos recortes al gasto público ( sobre todo el de inversión y el social )

- Incrementos sustanciales en los precios y en las tarifas de los bienes y de los servicios públicos (a fin de alinearlos con los costos de producción y los precios internacionales)

- Aumento en algunos impuestos indirectos (por ejemplo; elevar de 10 al 15% el IVA)

- El salario mínimo se fija en función de la meta inflacionaria que el gobierno establece año con año

Se inicia la reducción de aranceles y otros controles cuantitativos a la importación de mercancías.

Sin embargo el PIRE fracasó porque no se pudo llevar el PIB a pendiente cero, de hecho decreció, ni tampoco se pudo controlar la inflación Ver anexo cuadro 2 al grado que se pretendía.

El Fracaso del PIRE

Cuando se anuncio el PIRE se esperaba que a raíz de las medidas adoptadas el costo fuera un crecimiento nulo de la producción en 1983, para que después existiera una recuperación gradual hasta recuperar el ritmo de 5 % anual.

La expectativa era que la inflación bajará a 18 %, sin embargo el comportamiento de ambos indicadores fue muy diferente Se puede apreciar en la tabla 1 y 2 del Anexo el comportamiento de dichos indicadores. El PIB cayó y la inflación creció a un nivel alarmante, obviamente bajo este contexto fue imposible recuperar la tasa de crecimiento. Lo que si ocurrió fue el rebasar el saldo de la cuenta corriente, el superávit fue mayor al planeado. El déficit fiscal fue la única variable que se comporto según lo previsto.

La crisis de balanza de pagos de 1985 llevó a que el gobierno siguiera una política económica ortodoxa afrontándola mediante la devaluación del peso y la reducción del déficit fiscal. Pero hubo un deterioro en cuanto al relajamiento de la postura fiscal del gobierno, y la revaluación del tipo de cambio que condujeron a un deterioro nuevamente de la balanza de pagos.

La estrategia para combatir la inflación no tuvo éxito, porque no era suficiente aumentar los precios clave al mismo ritmo que la inflación esperada, de hecho el resto de los precios continuaba aumentando por inercia y como resultado de la falta de credibilidad del programa

La falta de credibilidad jugó un papel sumamente importante en el fracaso de estas políticas, dado que el sector privado estaba consciente de las implicaciones del peso de la deuda externa y lo difícil que era lograr la estabilidad en esas condiciones, y sumémosle el relajamiento del déficit fiscal y el deterioro de la balanza de pagos.

¨ Los hechos subsecuentes en México sugieren que las medidas incluidas en el PIRE no bastan para reducir la inflación y corregir los desequilibrios macroeconómicos. Las medidas se basaban en el supuesto de que una reducción del déficit fiscal nominal, combinada con una gran devaluación inicial seguida de un tipo de cambio fijo, bastaría para detener la inflación y restablecer el equilibrio en la balanza de pagos.¨ (LUSTING, 2002)

Sin embargo, este enfoque subestimo la tensión que se crea entre los objetivos de reducir el déficit fiscal y eliminar la distorsión de los precios relativos (incluido el tipo de cambio), por una parte, y en control de la inflación por la otra. Aunque los salarios no estuvieran plenamente indizados2 a la inflación pasada, la corrección de precios relativos, la devaluación de la moneda y el aumento en los precios de los bienes y servicios públicos, provocaban aumentos en otros precios y propiciaron una mayor inflación.

Conclusión

Se acepta la hipótesis de que efectivamente la Política económica a través del programa inmediato de reordenación económica fue incorrecta.

Lo anterior se asevera dado que; En 1982 se seleccionó, dentro de la gama existente de posibilidades, una estrategia en particularmente ortodoxa y un conjunto limitado de objetivos. En los últimos tres años las metas fijadas bajo estos criterios no han podido satisfacerse. Si bien ha sido posible cumplir los compromisos del gobierno frente al exterior, ello fue a costa de una gran depresión de la demanda interna. Ésta resultó muy superior a lo requerido para pagar los intereses de la deuda externa mediante la transferencia de recursos reales al resto del mundo. Estos acontecimientos tienen su principal origen en el énfasis puesto en la represión fiscal, que ha sido instrumento central de la política económica. Lejos de controlar la inflación, ha contribuido a exacerbarla. Es una paradoja preocupante que cuento más incide ésta política en perpetuar la inflación a través de los recortes en los ingresos reales, con la consecuente intensificación de las presiones de costos.

Otra paradoja que amerita reflexión es la de pretender, de manera simultánea, cubrir los intereses de la deuda externa, lo que requiere de elevados superávit en bienes y servicios no factoriales, e instrumentar una política de liberalización comercial. La contradicción, en las actuales condiciones internacionales, solo puede resolverse por la vía de estancamiento económico. El cambio estructural más probable que se deriva de ello es el que caracteriza a la desindustrialización. Difícilmente se elevara la eficiencia y la productividad del sector manufacturero cuando, a causa de una política fiscal y monetaria, la demanda interna se deprime y, a consecuencia de la comercial, una proporción creciente de esta se nutre de importaciones. En estas circunstancias es poco lo que el mecanismo del mercado puede lograr autónomamente. Se requiere una política industrial activa, el ausente más conspicuo de la estrategia gubernamental actual.

Autor: Andrea Salas Ortiz3

ANEXO:

Parte técnica del Análisis econométrico, Inflación en México de 1980-1990

Dicho análisis de realizo a través de un modelo de regresión lineal simple, teniendo como variables al PIB (Variaciones anuales porcentuales) e inflación (variaciones anuales porcentuales) mediante el método de mínimos cuadrados ordinarios.

Supuestos econométricos:

- El modelo de regresión es lineal en los parámetros;

- El valor medio de la perturbación u¡, es igual a cero. Homoscedasticidad o que la perturbación aleatoria o variable estocástica (u¡). Tiene la misma varianza.

- Las variables estocásticas son independientes entre sí

- Las variables estocásticas tienen una distribución normal.

- Las variables X y Y no tienen errores de observación

- Los parámetros son factores fijos de ponderación para toda la muestra.

Interpretación a partir de la ecuación estimada:

INFLACIÓN = 83.0252 – 6.6902 PIB + + ?T T

Si el PIB fuera cero, el valor promedio de la inflación es de 83.0252.

Considerando nuestras expectativas, la relación económica entre las variables del modelo estimado, la inflación en función del PIB sostiene una relación inversa o negativa, como efectivamente habíamos establecido.

La tasa de cambio del consumo con relación al ingreso se da con una ¨ Velocidad¨ de -6.7 puntos porcentuales.

La variable residual representa a las variables omitidas dentro del modelo. Es la base para medir los errores de todas las unidades de la muestra.

Si partimos del procedimiento de ¨ Data mínima ¨ y revisamos el valor de Student en la ecuación de referencia, y también en los valores de tablas, tanto al 99% como al 95% de confianza (2.539- 2.093) podemos concluir que estadísticamente los coeficientes obtenidos, de acuerdo al valor de los errores, son insesgados y consistentes.

La probabilidad de error es prácticamente cero.

El estadístico Durbin Watson, está por arriba del intervalo 0.738- 1.038 por lo tanto no existe autocorrelación en el modelo.

A continuación se muestra la regresión hecha mediante el paquete estadístico E-Views.


 

Dependent Variable: INFLACION

Method: Least Squares

Date: 11/10/11 Time: 21:20

Sample: 1978 1990

Included observations: 13

Variable

Coefficient

Std. Error

t-Statistic

Prob.

C

83.02526

11.30537

7.343878

0.0000

PIB

-6.690247

1.991340

-3.359670

0.0064

R-squared

0.506447

Mean dependent var

58.72423

Adjusted R-squared

0.461579

S.D. dependent var

42.69366

S.E. of regression

31.32741

Akaike info criterion

9.867502

Sum squared resid

10795.47

Schwarz criterion

9.954417

Log likelihood

-62.13876

F-statistic

11.28739

Durbin-Watson stat

2.069497

Prob(F-statistic)

0.006368

Fuente: Elaboración propia con datos consultados en BIE.

 

 

Cuadro 1; Balanza de pagos, saldo de la cuenta corriente México 1980-1985

Concepto

 

 

 

 

 

 

1980

1981

1982

1983

1984

1985

Saldo de la Cuenta Corriente

-10,434.1

-16,240.6

-5,890.1

5,859.6

4,183.4

799.5

Ingresos

24,860.7

31,111.5

30,972.0

32,928.6

37,830.5

35,858.9

Egresos

35,294.8

47,352.1

36,862.1

27,069.0

33,647.2

35,059.4

Fuente: www.cefp.gob.mx/intr/e-stadisticas/copianewe_stadisticas.html

 

Cuadro 2; Indicadores macroeconómicos de México. Inflación y PIB (Variaciones anuales)

AÑO

INFLACIÓN ANUAL

Variación anual del PIB a precios de 1993

1978

16.0767%

8.96

1979

20.0762%

9.7

1980

29.8413%

9.23

1981

28.6879%

8.53

1982

98.8600%

-0.52

1983

80.7643%

-3.49

1984

59.1614%

3.41

1985

63.7481%

2.19

1986

105.7460%

-3.08

1987

159.1668%

1.72

1988

51.6608%

1.28

1989

19.6941%

4.11

1990

29.9323%

5.18

Fuente: Elaboración propia en base a los datos de WWW.inegi.org.mx

Bibliografía

BRAILOVSKY Vladimiro, CLARKE Roland, WARMAN Natán (1989), ¨La política económica del desperdicio¨ México en el periodo 1982-1988. Facultad de economía de la UNAM.

INEGI; Sitio On Line www.inegi.org.mx Fecha de consulta: 03 de Noviembre de 2011

LUSTING Nora, (2002) ¨México: Hacia la reconstrucción de una economía¨ El colegio de México y Fondo de cultura económica.

SALINAS CALLEJAS Edmar, TAVERA CORTÉS Maria Elena ¨LA TRANSICIÓN DE LA ECONOMÍA MEXICANA 1982-2000¨ http://www.redcelsofurtado.edu.mx/archivosPDF/riosalinas.pdf

TELLO Carlos, (2007) ¨Estado y desarrollo: México 1920-2006¨ UNAM, Facultad de Economía.

Inflación en el Tercer Milenio

Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo



Licenciatura en Economía

 

Inflación en el Tercer Milenio

 



Mora Monzalvo Brian Arturo

nesodeagamenon@hotmail.com

Introducción: El Tercer Milenio



Al tiempo mismo que las doce campanadas de la Torre de Londres, en Greenwich, marcaban las cero horas del primero de enero de 2001, el orbe emprendía el comienzo de su tercer milenio de la era Cristiana. Incluso la fecha misma es motivo de incertidumbre. Gran parte de la población, proclamaba que este tercer milenio comenzaría, basándose en la estética del sistema decimal, en un año terminado por cero, el 2000, no obstante, esto no puede ser debido a dos errores históricos que no han podido, ni podrán, ser modificados.

     El primero de ellos se debe a que, el conteo de los años, o más exactamente, de las fechas de la Semana Santa, fue realizado por Dionisius Exiguus, por encargo del papa Juan I. De aquí saldrían los, hoy llamados, anno domini, literalmente, año del Señor. Pero la equivocación, propiamente dicho, iría más allá. Exiguus tomó como base al calendario de Cirilo de Alejandría y éste, a su vez, había realizado sus cálculos cronológicos sobre la era de los mártires, o de Diocleciano, un emperador que promovió la más extensa persecución de los cristianos (Reyes, 1999). El error radicó en que, el 29 de agosto de 284, del calendario alejandrino, fecha del comienzo del reinado de Diocleciano, fue proclamado como el año 1, y es esta inexistencia del año cero, lo que propició que el fin del milenio tuviese que comenzar en 2001.

     El segundo error es más simple y más letal. El calendario se basa en el nacimiento de Cristo, no obstante, existen documentos que acreditan a Josefo, quien data un eclipse en marzo 13 antes de Cristo, en sus propias palabras, poco antes de la muerte de Herodes, mas éste moriría hasta el 14 antes de Cristo y María volvería de Egipto huyendo del edicto de tal emperador y no volvería hasta su muerte, por tanto, se sabe que Cristo, irónicamente, debió haber nacido hacia el año 2 antes de Cristo (La fecha de nacimiento de Jesús el Cristo). Todo esto sin incluir detalles como los arreglos de Gregorio XIII, de quien procede el nombre de Calendario Gregoriano, quien, preocupado por las fechas exactas para las Pascuas de Resurrección y, tras una amplia revisión del calendario juliano a cargo de Aloysius Lilius, promulgó que, el comienzo del año sería el primero de enero, error nuevamente que afecta el nacimiento de Cristo, quien debió haber llegado al mundo en septiembre. De cualquier forma, el papa Gregorio XIII había logrado su cometido y, tomando en cuenta que el Concilio de Nicea se efectuó durante el equinoccio de primavera, 21 de marzo de 325, las Fiestas de Pascua se podrían realizar el primer domingo siguiente a la primera luna llena de primavera (Masquée). Un último dato cronológico se puede mencionar, el tercer milenio, se sea o no cristiano, tiene como base precisamente a Cristo, estén o no bien realizados los cálculos, sin embargo, el tiempo no acontece así para los armenios o los hindúes, por ejemplo, pues, mientras unos cruzaban su año 1422, los otros contaban ya el 5102.

 

¿Facebook sí, inflación no?

 

            A pocos años de habernos introducido en esta nueva era, una caterva de acontecimientos ya se abalanzaba sobre la humanidad: Nace Youtube, Windows Vista y Windows 7, Wikipedia, el Gran Colisionador de Hadrones, Hi5, Facebook, Twitter, IPod, IPhone 3G, el Wii y el Xbox 360, con su afamado juego, Grand Theft Auto IV, a quien su inversión de 100’000,000.00 de dólares lo convertirían en el más costoso de la historia (Los juegos más caros de la historia). El puesto más importante del mundo, la presidencia de los Estados Unidos de América, sería ocupado por George Walker Bush y Barack Hussein Obama. El papado pasaría de Juan Pablo II a Benedicto XVI. Y, en México pasarían por la silla presidencial Vicente Fox Quesada y Felipe Calderón Hinojosa, además de celebrar el Bicentenario de su Independencia y el Centenario de su Revolución. Se celebraría la Cumbre de Londres, los Juegos Olímpicos de Atenas, Salt City y Beijing, donde destacaría con 8 medallas de oro, el tritón norteamericano, Michael Phelps, así como los Mundiales de Futbol de Corea del Sur, Alemania y Sudáfrica. Se otorga el mayor galardón a la ciencia económica el Premio Sveriges Riksbank de Ciencias Económicas en Memoria de Alfred Nobel a Stiglitz, Akerlof y Spence, así como a Ostrom y Williamson, pasando, naturalmente por, Prescott, Phelps y Krugman. Sin embargo, ¿Cuál es el porqué de no mencionarse los fenómenos inflacionarios, cuando, en México, del año 1969 al 2010, ha habido una tasa inflacionaria de 630,626.55% (Banxico)? ¿Es acaso que, al individuo promedio, no le afectan, que aunque influyan en él, no le importen, o simplemente no los comprende?

            Desgraciadamente, se puede concluir en que la causa principal es, precisamente, esta última, lo cual debería ser motivo de preocupación pues, baste recordar que fue la ignorancia lo que propició que el 30 de octubre 1938, la gente de Nueva York se viese sumergida en la desesperación y se provocasen compras de pánico e incluso suicidios, por el desconocimiento de que, la presentación de la CBS, de la Guerra de los Mundos, de H. G. Wells, era simplemente una farsa dramática (Comas).

 

Definición

 

            Empero, antes de poder explicar como funciona, debemos tener en cuenta qué es: Inflación deriva de inflat?o, inflati?nis que significa, literalmente, inflar, hichar. La Real Academia de la Lengua Española la define como la: “Elevación notable del nivel de precios con efectos desfavorables para la economía de un país” (Real Academia Española ), por su parte, Samuelson, Premio Nobel de Economía de 1970, la define como el: “período de aumento general de los precios de los bienes y servicios de consumo y de los factores productivos”. No obstante, la misma definición del concepto representa un gran problema, ya que, como tal, la inflación no es un qué tangible, sino un fenómeno que se asemeja al viento, no lo podemos ver, pero se puede decir que está ahí, porque se sienten sus efectos. Para comprenderlo propongamos otro enfoque: La palabra wagen alemana, es exactamente igual al término automóvil, del español, no obstante, sentir, del francés,sentire, del italiano yfeel del inglés, que significan, respectivamente, oler, oír y sentir. Los conceptos intangibles son derivados del contexto social, geográfico y cronológico de quien los ocupe.

Por otro lado, la definición se logra en función de quien la formule. Dejemos de lado los aspectos económicos y pensemos en un individuo que padece hipopotomonstrosesquipedaliofobia, irónicamente, miedo a decir palabras largas; si el sujeto asiste con un neurólogo, éste argumentara problemas en el área de Broca, mientras que, un psicólogo asociará tal enfermedad a conflictos de autoestima, inseguridad y demás. De tal forma que para los contadores, quienes analizan depreciaciones, puedan considerarla como la pérdida del valor adquisitivo y los economistas, quienes estudiar, cantidad, valores y, con relación directa al tema, precios, entiendan que la inflación es, el alza generalizada de precios.

            En contraste resultan interesantes estos dos conceptos, pues es diametralmente opuesta la idea de causa y consecuencia. ¿Entonces que sucede primero, el alza de precios o la pérdida del valor adquisitivo? Antes de contestar a esto se debe concretar el segundo término: Existen dos tipos de salario. El salario nominal que es expresado en términos pecuniarios, es decir, cuando dinero se gana; y el salario real que manifiesta la cantidad de bienes y servicios que se pueden adquirir con el salario nominal, dicho de otra forma, qué y cuánto se puede comprar con el dinero que se gana. En términos de oferta y demanda, un movimiento representará el empobrecimiento o enriquecimiento del individuo. Pensemos, por ejemplo: El salario nominal es de 10 dólares. Un lápiz cuesta 1 dólar. El salario real se convierte entonces en 10 lápices, mas, si los lápices aumentan su precio a 2 dólares, el salario real se ve mermado a 5 lápices, el individuo se ha empobrecido, o bien, ha descendido su poder adquisitivo. Y es en este mismo punto y con este mismo ejemplo, que podemos diferenciar los conceptos de economistas y contadores. ¿Qué se ha necesitado para deducir que el poder adquisitivo del individuo ha disminuido? Simplemente un parangón en tanto de su salario, del real como del nominal, entonces podemos decir que: La inflación es el alza de los precios, lo que ocasionará una pérdida del poder adquisitivo en el individuo, haciendo que éste se empobrezca. Esto nos lleva a una pregunta fundamental del entendimiento de inflación. Cierto es que se define como el alza sostenida y generalizada de precios pero: ¿Qué precios? El salario puede ser calificado como el precio del trabajo, entonces, ¿Un aumento de éste, es inflación? La respuesta es un rotundo no. La inflación hace referencia a empobrecer al individuo. Volvamos a los lápices. Si estos cuestan un dólar, pero el salario nominal es de 5 dólares, cada uno tendrá un costo de 2 dólares, nuevamente: Inflación.

 

Tasa inflacionaria e IPC

 

            El término inflación no hace referencia a índices estáticos, sino a un fenómeno que, dadas determinadas circunstancias, representa variaciones en el precio de los productos. Tasa, es la expresión utilizada para una relación de dos magnitudes y, es de éste término de donde deriva: Tasa de inflación, que es quien refleja un aumento porcentual en los precios en un período de tiempo (Definición de tasa de inflación). En Brasil, la tasa inflacionaria del 2005 fue del 5.96%, lo que indica que un producto que costase 100 reales brasileiros en 2005, costará 105.96 reales brasileiros en 2006. El gran problema de la inflación es que es acumulable, entonces, la tasa brasileira de 3.14%, correspondiente al 2006, provocará que ese mismo producto, llegue a costar 109.10 reales brasileiros. Empero, como ya se ha dicho, las barreras internacionales hacen que la inflación sea diferente de nación a nación, así, ese mismo producto habrá tenido una tasa del 7.52% en México y del 4.5% en Francia (Calculateur d’inflation depuis 1901). Pero, pese a existir, por ejemplo, la inflación autoconstruida, estos índices no, simplemente, llegan. Para llegar a ellos se consideran diversos factores como son los: Índices de Precios de Bienes de Inversión, de Precios Mayorista, de Precios al Productor y de Precios al Consumo, siendo éste el más importante para el estudio del efecto inflacionario en las familias.

            El cálculo del índice de precios al consumo (IPC), se obtiene del cociente del valor monetario de la canasta básica estudiada, entre el valor de la canasta básica base y esto a su vez, es multiplicado por 100, para obtener un porcentaje (¿Qué es el índice de precios al consumidos?). Comprender esta operación nos permitirá entender aun más a la inflación. La comparación es literal, pues, debemos comprender que no es la inflación quien crea el alza de precios sino que, el alza de precios, genera inflación. Como podemos ver, el índice que se obtiene es, simplemente, una relación entre lo que determinado producto costaba ayer y lo que cuesta hoy, en su versión porcentual. Conocer el IPC es importante por otra razón: Tiene relación directa con el enriquecimiento o empobrecimiento del individuo, como ya se ha mencionado, con la pérdida, o ganancia, como posteriormente se verá, del poder adquisitivo que provoca la inflación.

            Esta relación fue descubierta por Keynes en 1929 en su libro “The General Theory of Employment, Interest and Money”, durante la época de la Gran Depresión. Su planteamiento fue simple pero hasta antes, impensable. El Padre de la Macroeconomía se percató de que, una disminución al salario era considerado por el trabajador como un empobrecimiento directo, Maynard Keynes propone entonces realizar tal acción de manera imperceptible, un aumento al precio de los productos. Sobre esta idea podemos concluir que: Un aumento salarial mayor al IPC, genera ganancia del poder adquisitivo, mientras que una pérdida del poder adquisitivo será ocasionada por un aumento salarial menor que el IPC. De ahí, que el IPC sea utilizado para intentar tener un equilibrio en la tasa de inflación y la capacidad de compra del individuo, con proyectos como el ajuste de salarios y las prestaciones, ya sean de seguro, de retiro o de servicios (Salinas).

            El IPC muestra la manera de calcular los índices inflacionarios, adempero, hay que recordar que la economía no crea la realidad, más bien, la realidad, recrea, una y otra vez a la economía. La cadena va más allá. La inflación toma en cuenta los índices pero, estos, a su vez, consideran el alza de precios. No es la inflación quien sube los precios, es el alza de precios, al fenómeno en sí, a lo que se considerará inflación. Además, hay que resaltar que, éste aumento al valor monetario de los productos, no depende de un solo factor y son debido a esta variedad que podemos mencionar que exista, según la teoría keynesiana, inflación de costos, de demanda, autoconstruida y de expectativas inflación (Inflación).

 

Causas

 

            Inflación de costos se refiere al efecto del encarecimiento de los factores de producción, sean estos, mano de obra, materias primas o cualquier otro que afecte los beneficios del productor, quien por no verse perturbado, aumentará los precios. Además, cuando el factor de producción que ha aumentado es el sector agrícola se le denomina: agflación. Por su parte, la inflación de demanda puede ser explicada de dos formas. Como ya se ha visto, un movimiento causa la pérdida del poder adquisitivo del individuo y éste es generado por variaciones en el precio, sin embargo existe otra forma de entrar en desequilibrio, en términos de oferta y demanda: Los desplazamientos.

            Un desplazamiento hace referencia al cambio que tiene la recta, ascendiendo o descendiendo con respecto a la ordenada al origen sin modificar su pendiente y es causado por la modificación de gustos y preferencias. Ésta es, precisamente, la primera forma de explicar la inflación de demanda. Los individuos demandan en mayor proporción que antaño determinado producto y, dado que los oferentes no han podido aumentar su producción, deciden llegar al equilibrio con un aumento en el precio. No obstante, no sólo un cambio en las preferencias puede explicar éste fenómeno. En el ejemplo anterior, el cambio de gustos y preferencias, el factor clave es subjetivo. Será fácil recordar que durante los años 2005 al 2008, surgió el fenómeno RBD, con lo cual, la venta de los productos que presentasen cualquier relación con los integrantes del grupo, aumentaron su demanda. Por ello, una regla básica de la ciencia económica exclama con firmeza: A mayor demanda, mayor precio. No obstante, el Nobel de Economía de 1796, Milton Friedman declara que “la inflación es siempre un fenómeno monetario”. Esto nos lleva a pensar en un valor monetario y a remontarnos a los años del mercantilismo en que un país rico era aquél que poseía un mayor volumen de metales amonedados, como son el oro y la plata. Incluso podemos hacer una comparación personal. Supongamos tener hambre. Para alimentarnos hemos de adquirir determinados productos, sin embargo, para ello habrá que adaptarse al nivel de ingreso. Compraremos, considerando capacidad y no gusto, más alimentos entre más dinero se tenga. Durante el mercantilismo, la acumulación excesiva de dinero, a largo plazo, provocó inflación a tal grado que, se cuenta, cuando la gente hacía fila para adquirir un producto, el último individuo pagaba mucho más que el primero. Si bien, la hiperinflación es el término que se refiere a índices mayores al 1000% anual, en aquellos tiempos, ésta se daba en unas horas. En conclusión, el exceso de riqueza monetaria provocará inflación con el afán de buscar el equilibrio: Oferta-Demanda. Éste tipo de inflación era causado por políticas gubernamentales en que, para poder pagar la deuda o el déficit que les aquejaba, emitían dinero sin sustento.

            Para entender esta idea, hemos de profundizar en el concepto de dinero, el cual, es definido como un medio de intercambio común, social y generalmente aceptado. Históricamente, la moneda nace en Lidia y su valor era equivalente al peso del metal que ésta contenía, por lo que se le llamaba: Dinero real. Es interesante saber que: Geld del alemán y argent, del francés, ambos términos utilizados para designar al dinero, significan, literalmente: Oro y plata. Mas, los procesos de intercambio eran complejos, lo que implicó el nacimiento de un nuevo medio de intercambio, el dinero fiduciario, del latín fidel?tas, fidelit?tis, que significa, fidelidad, confianza, ya que, era posible intercambiar en los bancos la cantidad de dinero por su equivalente en oro o plata. Sin embargo, un nuevo problema apareció, el equivalente del dinero en papel que circulaba entre la población era mayor, debido el abuso de los bancos, que las reservas reales de oro y plata que existían. Posteriormente, el gobierno sería quien tuviese el derecho y obligación de la emisión del dinero y es así como nace, con el presidente Nixon, el 15 de agosto de 1971, el dinero fiat, del latín, hágase. El dinero real tenía tres características que lo acreditaban: Ser medida de valor, reserva de la riqueza e instrumento de cambio, sin embargo, con la creación del dinero fiat, únicamente conserva ésta última, pues, aunque su creación fue certificada por el hecho de que éste, suplía un dinero con valor intrínseco, dinero real, y a uno que prometía valor, dinero fiduciario, y a que representaba un certificado de deuda en el que el sistema bancario nos convierte en acreedores, no es la medida estable de un producto, como lo era el oro y la plata, de cual se puede inferir que, si el dinero no vale de forma real, no conserva ninguna propiedad para considerarlo un resguardo de la riqueza. Sin embargo, el dinero no puede ser producido por simple capricho gubernamental. Si bien, el dinero real tenía valor por su peso y el fiduciario, por la promesa de la posibilidad de cambio, el dinero fiat basa su existencia en la producción y, cuando esta proporción es violada, se genera inflación.

            El término de inflación de demanda, involucra, además, un concepto nuevo: La Curva de Phillips, la cual fue introducida en la década de 1960. Ésta, es una relación que dicta que entre mayor inflación, menor desempleo y, para los Estados Unidos de América funcionó durante ese marco histórico, pero, la década de 1970 presentaría un nuevo fenómeno: Estanflación.

            En otro contexto, aunque amalgamando los dos ya mencionados, se encuentra la inflación autoconstruida. Para explicar este acontecimiento, se presentan, igualmente, dos formas, una formal y ética y otra un tanto cómica. Por un lado, la inflación es un fenómeno tan común, que puede llegar a intuirse un fuerte incremento en los precios, entonces, para que el consumidor no repare en éste con asombro, el aumento se realiza de manera gradual; éste proceso, involucra el pensamiento del oferente, mas, del lado del demandante existe otra posibilidad de que se genere, inflación autoconstruida; de la misma forma, dado que la inflación es algo cotidiano, el demandante tiene en consideración diaria el aumento de precios en los productos que consume, entonces, aprovechándose de este, prejuicio, por así nombrarlo, el productor, simplemente, incrementa el precio, aumentando, así, sus ganancias de manera exorbitante.

            Por último se encuentra la inflación generada por expectativas de inflación. Sucede en países con niveles inflacionarios altos y, en este caso, trabajador, consciente, de manera de inconsciente, del empobrecimiento que le genera la inflación, pide un aumento de sueldo. Como ya se vio, si la mano de obra resulta más costosa se incurre en inflación de costos, por lo que el productor aumenta el precio, entonces el trabajador solicita un nuevo aumento del salario, por lo que el ciclo se repite de manera interminable, por ello este proceso es también conocido como, inflación círculo vicioso.

            La inflación, además de las causas, propiamente económicas, conlleva otros aspectos: El Tiempo y la Zona Geográfica. El 10% de Inglaterra en el período 2003-2007 no podría compararse contra el 7.8% de China durante el mismo período. San Marino presentó una tasa inflacionaria del 5.2% durante el período 2003-2008, mientras que Zimbabwe, sólo en 2008 tendría una tasa del 12,563%. Los niveles inflacionarios varían de región en región y de período en período y es por ello que se puede hablar de inflación moderada, galopante e hiperinflación.

 

Hiperinflación

 

            La hiperinflación, es un fenómeno que ocurre cuando la tasa inflacionaria es mayor al 1000% anual. Durante el tercer milenio, esa clase de inflación anormal a atacado fuertemente a Zimbabwe, quien en 2009 llegó a una tasa del 11,200,000%, empero, para el 2010 logró estabilizarse con un 5.1%. Cuando los niveles son, relativamente, menor y ocupan 2 o tres dígitos, se dice que hay, inflación galopante, hoy día, ésta se da en 79 países, dentro de los que destacan: Arabia Saudita, Bolivia, Bulgaria, Costa Rica, Egipto, Etiopía, Haití, Honduras, Libia, Nicaragua, Nigeria, Paraguay, Rusia, Sudáfrica y Venezuela. Mientras que, el resto de los países se encuentran en una inflación moderada, lo que significa que el alza de precio de los productos se produce de manera lenta y gradual; no obstante, si esta persiste durante largo tiempo se le considera, inflación sostenida.

            Considerando, de mayor a menor, las tasas inflacionarias, México ocupa el lugar 136 y éste es el punto donde nace la pregunta ¿Debería ascender o descender de lugar? ¿Si es cierto, según la curva de Phillips que un nivel alto de la inflación representará un nivel bajo de desempleo, porque Zimbabwe, quien tiene el primer lugar, no es una potencia mundial?

            El diccionario del Diablo de Ambrose Bierce da una un concepto curioso de “Magnitud. La cataloga de relativa y explica que si todo creciera nada sería más grande que antes, empero, si al menos un objeto continuase igual, el resto podrían considerarse mayores. “Para un intelecto familiarizado con la relatividad de la magnitud y la distancia, los espacios y las masas del astrónomo no serían más impresionantes que las del microscopista. […] Posiblemente las menudas criaturas que pueblan los corpúsculos de nuestra propia sangre experimenten la emoción debida al contemplar las impensables distancias que los separan.” Incluso Einstein hablaría en sus famosas teorías, general y especial, de la relatividad. Nuevamente hay que repetir, la inflación depende del entorno, ya sea cultural, geográfico, cronológico o cualquier otro que quiera tomarse en cuenta. La curva de Phillips, como ya se mencionó, explicó el comportamiento de la economía norteamericana en la década de 1960, no así en 1970, en que se presentaron tasas altas de inflación y desempleo de manera simultánea, o estanflación.

 

Estanflación

 

            El término estanflación, es un híbrido de estancamiento e inflación, acuñado por Ian McLeod en 1965 y se determinado, cuando hay, de manera simultánea, recesión y altas tasas inflacionarias; entendiendo por recesión el decrecimiento del Producto Interno Bruto que durante dos trimestres consecutivos y, para mayor extensión del concepto, el PIB es considerado como la suma en términos monetarios de todos los bienes y servicios que produce un país, sin importar si los productos son extranjeros o nacionales, a diferencia del Producto Nacional Bruto, PNB, que presenta aquello que producen los individuos procedentes del país, sin importar si estén dentro o fuera del territorio nacional. Como dato adicional, podemos agregar que los Estados Unidos de América ocupan el primer lugar de producción con un PIB de 13, 380 billones de dólares, seguido por China con 6,473 billones, Japón con 4,262 billones e India con 2,816 billones de dólares. México ocupa la posición 11, con 1,494 billones de dólares. Mientras que naciones como Santo Tomé y Príncipe, Palaos, las Islas Malvinas, Nauru y Tuvalu, que ocupan los último lugares no alcanzan el billón de dólares. Cabe también agregar que, el Producto Interno Bruto per cápita es, el cociente del PIB por paridad del poder adquisitivo entre la población del país en cuestión. Liechtenstein ocupa el primer lugar con 118,000 dólares, los Estados Unidos de América el décimo con 46,300 dólares, México el septuagésimo octavo con 13,900 y Zimbabwe el último con sólo 200 dólares (Index Mundi).

            El tratamiento de la estanflación provoca siempre neuralgia a las políticas monetarias. En palabras de McLeod “tenemos lo peor de ambos mundos”, haciendo referencia al desempleo y a la inflación. Si bien, la inflación, aunque empobrece al individuo por la pérdida del poder adquisitivo que representa, es un factor determinante del desarrollo. Como ya se ha mencionado, la inflación es relativa. El bien de unos, incluye, forzosamente, el mal de otros. Así, el incremento de la tasa de interés de la deuda pública provoca un aumento en las tasas de interés de aumentos del consumo con lo que se frena la demanda, dada la dificultad de adquirir bienes a crédito, es decir, que el individuo pueda comprar artículos sin poseer, en realidad, el poder adquisitivo. Desde esta óptica, podemos descubrir que las tarjetas de crédito y los préstamos son una manera de emitir dinero, sin emitirlo, lo que se denomina, economía recalentada y, como ya se ha visto, cuando el dinero excede la producción, el aumento de precios es inevitable (¿Qué son la inflación y el IPC? ¿Cómo nos afectan?). Sin embargo, el anular estas concesiones al consumidor, es decir, enfriar la economía, necesariamente ocasionarán un paro en la demanda de productos. La empresa al no vender sus productos, recae en un paro industrial lo que ocasionará estancamiento económico y desempleo. La inflación empobrece al individuo pero enriquece a la nación, con la estanflación, el factor positivo de la inflación se disipa y se tiene que elegir entre el individuo y la nación. ¿Crecimiento económico o enriquecimiento personal? ¿Aumentar o disminuir el tipo de interés? El problema radica en la estrecha relación que existe entre ambos factores. Es el individuo quien con su oferta de trabajo y su demanda de productos enriquece a la nación. Pensemos en la devaluación de divisas. Si se quiere adquirir un producto del extranjero que cueste, 10 dólares americanos o 100 pesos mexicanos. Una devaluación conservará el costo de 10 dólares pero, en pesos mexicanos se necesitarían, suponiendo que un dólar sea ahora equivalente a 9 pesos, 111.11 pesos mexicanos. En cambio, una revaluación, es decir, el efecto contrario a la devaluación, haría que un dólar costase 11 pesos, y el mismo bien, ceteris paribus, costaría ahora 90.09 pesos mexicanos. No obstante, un productor obtendría el efecto contrario y la razón es que su actividad es, asimismo, la contra del comprar, vender. Para ello, hay que pensar al revés. Imaginemos que al mercado estadounidense entran abrigos chinos con valor de 10 dólares. Siguiendo los mismos intervalos propuestos anteriormente, una devaluación, para el productor mexicano, le haría pagar 90 pesos, para igual el producto asiático, mientras que una revaluación aumentaría el precio 110, con lo cual, por ser más caro, pronto saldría el productor mexicano del mercado. Esto vuelve a comprobar que, un bien económico agregado tiene el efecto contrario al del bien individual.

 

Deflación

 

            Empero, existe, además de la estanflación, un fenómeno más que afecta a la economía: La deflación. Ésta puede ser considerada, inflación negativa, pues el efecto que presenta es la disminución generalizada de los precios, provocada por una caída de la demanda. Un simple razonamiento inverso nos llevaría a pensar que, si la inflación empobrece al individuo, la deflación lo enriquece, en la teoría, lo cierto es que así sucede, mas la realidad presente un panorama de pandemónium.

            La deflación genera un círculo vicioso comparable con la inflación generada por expectativas de inflación. Primeramente, hay que saber que los costos de producción de un artículo cualquiera equivalen a la suma de los costos fijos, es decir, aquellos que no intervienen directamente en la producción, sino que se refieren a la manutención de la empresa, incluyendo gastos de administración, luz, agua, impuestos; y los costos variables, o bien, la materia prima y la mano de obra. Cuando la economía entra en deflación, lo que implica que los precios han bajado, el productos solo obtiene el dinero para cubrir los gastos fijos, no obstante, la demanda ha disminuido y para lograr la subsistencia de la empresa y, siguiendo las Ley de la Demanda, los precios han de bajar para obtener un aumento de la demanda. Pero, pensemos de manera individual ¿Quién compraría un terreno por 100,000.00 pesos cuando se sabe que mañana, sin duda alguna, costará 90,000.00 y que, pasado mañana tendrá un valor de 80,000.00? Naturalmente nadie, de manera que  la deflación es causa y consecuencia de la no circulación monetaria en la economía, dado que, en vista de que los precios bajarán constantemente, el individuo prefiere retener sus ingresos. Hablar de una deflación prolongada sería aun más perjudicial pues, como se ha visto en el ejemplo, la industria no puede afrontar los gastos variables obteniendo con ello únicamente pérdidas al tener que costear los gastos fijos, de otra forma, la empresa se extinguiría. Y es en tal contraste que pueden observarse con nitidez los efectos positivos de la inflación. Recreemos el ejemplo: ¿Qué pasaría con el mismo terreno, con un costo de 100,000.00 pesos, en consideración de que, el día de mañana costará 110,000.00 y pasado mañana, 120,000.00? Lo que sucedería es que sería comprado con la mayor rapidez posible, es decir, trataría de anticiparse al alza del precio y de ser, por esa misma elevación del precio, beneficiado por la inflación.

 

Conclusión

 

            El tercer milenio, como prácticamente todas las épocas, no ha sido una exclusión al fenómeno de la inflación. El coste del Xbox, de las Olimpíadas y los Mundiales de Futbol, de Youtube, Facebook y del Gran Colisionador de Hadrones se ha visto afectado directamente. RescueTime manifestó que el homenaje que realizó Google a Pac-Man (Wright) por su 50 años provocó la pérdida de horas de trabajo equivalentes a 4.2 millones de dólares, lo cual, aunque para muchos exagerado e ilógico, es representativo en consideración del producto interno bruto y, considerando que éste es un índice de producción y que la inflación nace de un desequilibrio entre el dinero y la producción, entonces el buscador más famoso del mundo habrá provocado un pérdida más que representativa. Por otro lado, Titanic, es considerada la tercer película más cara de la historia, sin embargo, en 1997 su costó fue de 200’000,000.00 dólares mientras que, el día de hoy costaría 247’000,000.00 dólares. Diferencia que representa casi 4 veces el PIB anual de Nauru.

            La inflación es un fenómeno ineludible, mas esto no significa que todos sus efectos sean negativos. Cada individuo puede tener un concepto diferente de ella. Cada individuo es cada vez más pobre según el aumento de los precios. Cada individuo puede argumentar que los efectos negativos son mayores que los positivos, o viceversa. Sin embargo, cada individuo es parte del proceso económico. De un proceso en constante movimiento. Sin inflación se volvería al trueque. Se volvería a una etapa de autoconsumo en que no hay progreso ¿Pero, para que existir si el fin último no es el desarrollo? Recordemos siempre que, un mundo sin progreso, es mundo sin sentido[*].


 

 

Bibliografía

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Masquée, D. (s.f.). El calendario gregoriano. Recuperado el 5 de Octubre de 2010, de http://themaskedlady.blogspot.com/2010/03/el-calendario-gregoriano.html

Real Academia Española . (s.f.). Recuperado el 5 de Octubre de 2010, de http://buscon.rae.es/draeI/SrvltConsulta?TIPO_BUS=3&LEMA=inflación

Reyes, B. R. (31 de 12 de 1999). Sí, pero el tercer milenio empieza en el año 2001. Recuperado el 5 de Octubre de 20, de http://www.elmundo.es/navegante/99/diciembre/31/2000.o.2001.en.que.quedamos.html

Salinas, O. J. (s.f.). Las prestaciones sociales. No sólo de salario vive el hombre. . Recuperado el 5 de Octubre de 2010, de http://www.gestiopolis.com/canales/derrhh/articulos/no4/prestaciones.htm

Wright, T. (s.f.). The Tragic Cost of Google Pac-Man – 4.82 million hours. Recuperado el 5 de Octubre de 2010, de http://blog.rescuetime.com/2010/05/24/the-tragic-cost-of-google-pac-man-4-82-million-hours/



[*]Por cuestiones de espacio, las distintas direcciones que se han utilizado como marco del presente ensayo, han sido mencionadas únicamente una vez. Esto, ya que pueden utilizadas sólo como una referencia del contenido, así como el evitar mencionarlas en diversas ocasiones con la única modificación de un dato específico. Tal es el caso de http://www.indexmundi.com/ de donde han obtenido datos varios como son, PIB anual, PIB per cápita, tasas de inflación; asimismo, tales datos han sido colegidos de las diversas áreas geográficas mencionadas.

Inflación Argentina

Demás esta decir, que nuestra posición respecto a estas tres teorías, es aceptar la explicación monetarista, es decir, atribuir a la expansión monetaria como causa principal de la inflación, dado como se verá, cuando el gobierno tomaba políticas expansivas aumentaba el índice de precios al consumidor, que es un número que indica la variación experimentada en el precio de los bienes y servicios en un periodo de tiempo determinado, y que es elaborado por una institución de confianza que en nuestro país es el INDEC. Aunque cabe destacar que esto no implica rechazar las otras teorías, dado que es cierto que en las crisis energéticas de la década de 1970 se vivieron momentos de inercia inflacionaria bastante importante provocado por el aumento del crudo, pero pese a ello, habría que considerar que cuando se dieron esas dos crisis energéticas, el gobierno Argentino ya tenía el problemas del déficit fiscal por lo cual recaía en el emisionismo para solventar dicho déficit. En cuanto a la teoría keynesiana es muy difícil ejemplificarla en la práctica, dado que se confundiría con las otras dos teorías, aunque esto no implica que descreo de la misma.


Además, el causa principal de la inflación de las décadas de 1970 y 1980, no era el costo ni la sobredemanda agregada (dado que estuvimos durante años con recesión), sino que el Estado emitía dinero para recaudar más vía impuesto inflacionario, dado que uno de los agentes económicos que se benefician de la inflación como dicen Mochon y Beker es el Estado, dado que los ingresos fiscales son mayores dado que se incrementa el impuesto inflacionario.

Según Sebastián Edwards (...) como consecuencia de la debilidad de las estructuras financieras públicas, un número cada vez mayor de países se vio obligado a depender de la financiación inflacionaria como forma de acortar las distancias entre los gastos y los ingresos del gobierno EDWARDS Sebastián. Crisis y reforma en América Latina: del desconsuelo a la esperanza. Buenos Aires. Emecé ediciones 1998. Página 12..

Con la inflación hay dos tipos de bienes que sufren fenómenos contrapuestos:


1º Bienes monetarios, que se desvalorizan, es decir, pierden valor (cuentas por cobrar, las cuentas por pagar, el dinero en efectivo, etc.).

2º Bienes no monetarios, que se valorizan, adquieren un mayor valor (bienes de uso, bienes de cambio, entre otros).

Esto equivale a decir, el dinero cada día vale menos y los bienes y servicios cada día valen más. Entonces, en épocas de inflación debe elevarse el ingreso de los individuos, dado que aquellos que perciben una renta fija, con la inflación pueden comprar según como evolucione la misma una menor cantidad de bienes y servicios, por ende, siempre se eleva el ingreso de aquellos que perciben una renta fija, como por ejemplo lo asalariados. Al elevarse los precios en forma generalizada, el Estado se beneficia por dos razones:


1º hay impuestos en que la proporción a pagar aumenta con el nivel de ingreso nominal y se eleva con la inflación, por ejemplo, las empresas deben pagar mayores contribuciones patronales. A este tipo de impuesto se lo denomina inflacionario, es decir, a aquellos en que la proporción a pagar aumenta con la inflación;

2º el estado es un deudor por excelencia, y por ende, como en la inflación el valor del dinero en términos reales es menor y en términos nominales no varía, todos los deudores en términos reales deben devolver una cantidad menor.

Según Mochon y Beker El impuesto inflacionario grava las tendencias monetarias de la población y consiste en la pérdida de poder adquisitivo que sufre el dinero en poder del público cuando se incrementan los precios. Cuando el gobierno financia parte de sus gastos con emisión monetaria no deseada por el público, lo que está haciendo es deteriorar el valor real de los activos monetarios que poseen los particulares y apropiarse de ese monto para cubrir la brecha entre sus erogaciones y lo que recauda a través del resto de los impuestos BEKER Víctor A. - MOCHÓN Francisco. Economía: principios y aplicaciones. Madrid. Editorial McGraw-Hill 1997. Página 306.

Autor: Richard Amaro

Teorías de la Inflación

TEORÍAS QUE EXPLICAN LA INFLACIÓN:



Se analizará en líneas generales las teorías que explican la inflación con el fin de entender por que el Estado emitía, y como funciona el mecanismo del emisionismo y del impuesto inflacionario.

INFLACIÓN DE DEMANDA

Dentro de esta perspectiva tenemos dos teorías que explican la inflación: la teoría monetarista y la teoría keynesiana.

TEORÍA MONETARISTA

La inflación la entendemos como el aumento constante y generalizado en el precio de los bienes y servicios provocado principalmente por el emisionismo, es decir, por expansión incontrolada de la masa monetaria. Es decir, según la teoría cuantitativa del dinero existe una relación estrecha entre la cantidad de dinero existente en el mercado y la inflación. La ecuación de la inflación según esta teoría es:


V X OF = P X Q

V: velocidad del dinero, es decir, la cantidad de veces que el dinero pasa de mano en mano.

OF: oferta monetaria, que esta constituida por la base monetaria (M) más la creación secundaria de dinero (cheques). La base monetaria se refiere a la totalidad de medios de pagos cambios existentes en el mercado, que en general es igual a la cantidad de dinero en manos del público más los depósitos en cuenta corriente, cuenta de ahorro y plazo fijo. OF =m x BM esto significa que la oferta monetaria es igual al multiplicador de la creación secundaria de dinero o de la base monetaria por la base monetaria.


P: es el precio de todos los bienes y servicios.

Q: cantidad de bienes y servicios existentes en el mercado.

P X Q = PBI

Es decir, de la fórmula de la teoría cuantitativa se desprende que la velocidad del dinero multiplicada por la oferta monetaria es igual al producto bruto interno (precio por cantidad).

Entonces, la explicación monetarista de la inflación (escuela desarrollada en la Universidad de Chicago por Milton Friedman) es que si la velocidad del dinero (V) se mantiene constante y crece la oferta monetaria (OF) en un país donde la cantidad de bienes y servicios (Q) no crece, es decir, es un país donde no aumenta el PBI, la única manera de mantener la igualdad es subiendo el precio de los bienes y servicios. Viéndolo en forma simplificada tenemos que:

Masa Monetaria = Bienes + Servicios

Cuando aumenta en forma descontrolada la masa monetaria y no aumenta la cantidad de bienes y servicios (país que no crece) debe aumentar el precio de dichos bienes, dado que a mayor dinero, mayor consumo lo que equivale a decir mayor demanda, si la demanda aumenta y la oferta por x circunstancias no puede aumentar en la misma proporción, la única manera de volver al equilibrio es aumentando el precio de los bienes y servicios. Además esto se fundamenta en la ley de oferta y demanda en la cual: Oferta = Demanda. Si la demanda sube, sube el precio, dado que subir el precio le permite a la oferta cubrir los costos. Mientras mayor sea la cantidad de bienes y servicios que produce el oferente mayor será su costo, por lo cual, mientras mayor sea la demanda mayor será el precio de los bienes y servicios.

TEORÍA KEYNESIANA

Los keynesianos rechazan la idea de la estrecha relación entre la cantidad de dinero y los precios, para esta corriente la inflación es un fenómeno asociado al pleno empleo de los factores de la producción. Supongamos que estamos en una economía en donde hay un desempleo aproximadamente del 10% de los factores de la producción, en este caso si aumenta la demanda, los oferentes podrán utilizar ese 10% de los factores para producir una mayor cantidad de bienes y servicios, de este modo aumentará la oferta por lo cual la demanda quedará igualada a la oferta. Caso contrario, si estamos en una economía en la cual el aprovechamiento de los factores de la producción es del 100%, si aumenta la demanda, la oferta no podrá aumentar la cantidad de bienes y servicios dado que todos los factores están ocupados (economía de pleno empleo). Por ende, para igualar la ecuación oferta es igual a demanda deben subir los precios. Con lo cual podemos concluir que la inflación según la visión keynesiana es un fenómeno relacionado con la demanda agregada (consumo + inversión + gasto público + importaciones = gasto total). Si en una economía de pleno empleo la demanda agregada supera a la oferta agregada (producto bruto interno + exportaciones), ello produciría inflación. Si estamos frente a una economía en donde hay desaprovechamiento de los factores de la producción, el aumento de la demanda agregada podría compensarse con el aumento de la oferta agregada, con lo cual podría evitarse la inflación.

INFLACIÓN DE COSTOS

Según esta teoría, si por ejemplo se aumenta alguna partida integrante de los costos de todas las empresas, esto traerá aparejado un aumento generalizado de precios, tal caso ocurre con los salarios. Muchas veces se fundamento que la causa de la inflación eran los sindicatos, que reclamaban salarios más altos lo que hacía subir el costo laboral que se trasladaban a los precios. En la Argentina de la década del '80 lo salarios subían conforme aumentaba la inflación, lo cual traía como consecuencia una mayor inflación. Lo mismo ocurre con el petróleo, cuando en las dos crisis energéticas de 1973 y 1974, y de 1978 y 1979 el precio del crudo empezó a subir drásticamente, ello produjo una inflación mundial dado que el petróleo aumenta los costos no sólo de aquellas empresas que lo usan como elemento esencial del ciclo productivo, sino también para aquellas que no lo usan en el ciclo productivo, dado que aumenta por ejemplo el costo del transporte, y esto afecta a todo tipo de empresa ya sea que usen o no la petróleo. Por ende, según esta teoría, la causa de la inflación radica en los costos crecientes.

Autor: Richard Amaro

El Gran Mal de la Economía Argentina: La Inflación

EL GRAN MAL DE LA ECONOMÍA ARGENTINA: LA INFLACIÓN.


OBJETO: Antes de explicar el porqué del análisis de la inflación y su relación con el persistente déficit fiscal, sería de suma importancia sintetizar en líneas generales lo que se a visto hasta aquí:

1. Los intereses de la deuda. Los intereses de la deuda, luego de las dos crisis energéticas, se convirtieron en uno de los rubros más importantes del presupuesto nacional, lo que va a producir que en 1988 la Argentina entre en cesación de pagos, dado que su crecimiento constante va a repercutir en el desequilibrio de las cuentas públicas.

El análisis de los mismos nos permitió dilucidar los problemas que tenía el gobierno radical para atender las cuotas de servicios (amortización del capital más el interés correspondiente) debido a la falta de recursos, y además su análisis nos permitió establecer la relación entre la privatización y la renegociación de la deuda: cuando en 1988 se hace evidente la quiebra del Estado, reconocida por Carlos Saúl Menen en 1989, se deja de pagar a los acreedores ante la imposibilidad de contar con recursos. Por ende, para renegociar la deuda pública, el Estado primero debía solucionar el tema del déficit fiscal, dado que: ¿como iba a pagar a los acreedores si no tenía ni siquiera recursos para solventar sus propias necesidades?, y además ¿con qué recursos se pagaría a los acreedores? Por esa razón, se puede deducir que con la privatización se racionalizó el gasto y se generaron ingresos, con lo cual, no sólo se solucionó el problema del déficit fiscal (como se verá más adelante) si no que también posibilitó la renegociación de la deuda en 1991 ingresando al Plan Brady y retomando los pagos.


2. El gasto gubernamental fue sin duda el más controvertido, dado que se hablo en numerosas veces de reforma, pero siempre lograban sus objetivos a corto plazo, por ser coyunturales.

El análisis de esta variable me permitió demostrar como la administración gubernamental era ineficiente e ineficaz, lo que provocaba un crecimiento desmedido e innecesario del Estado, y que al igual que los intereses de la deuda, hacía imposible el equilibrio de las cuentas fiscales.

3. Los gastos económicos son a mi entender la variable de más relevancia, no sólo porque dentro de estos gastos se encuentran los gastos ferroviarios, sino porque su análisis permitió dilucidar que la privatización se intentó llevar a cabo durante el gobierno radical por las mismas razones que se llevó a cabo durante el gobierno justicialista: el déficit fiscal, además nos permitió analizar los fondos que el Estado destinaba a Ferrocarriles Argentinos, que durante la década de 1980 tuvo un comportamiento creciente.


Pero el análisis no se acaba con estas tres variables, sino que continua, dado que como se verá más adelante, se analizará a fondo la relación déficit fiscal y privatización en la parte final de esta primera parte.

Como ya se dijo antes, el Estado recurría al emisionismo para recaudar más mediante el impuesto inflacionario, de esa manera lograba solventar una parte del exceso de gastos. Es decir, si el Estado no hubiese recurrido al emisionismo, el déficit fiscal a lo largo de la década del '70 y '80 hubiese sido mayor, pero en realidad fue mucho menor dado que una parte del exceso de gasto se solventaba con el impuesto inflacionario.

Si se sancionaba la ley de convertibilidad, se eliminaría esta fuente de recursos con lo cual la brecha entre gastos e ingresos se acentuaría. Pero con esto, no quiero alegar que la privatización de los ferrocarriles mediante la modalidad de la concesión fue consecuencia de la convertibilidad que eliminó al impuesto inflacionario, dado que como se dijo antes, haya habido o no convertibilidad, igualmente se hubiese privatizado, porque esta se debió al persistente déficit fiscal. Sin embargo, es necesario hablar de convertibilidad, dado que la misma fue un fundamento más para decir que era necesaria la privatización, dado que con la misma se eliminaría el impuesto inflacionario, con lo cual el déficit fiscal se incrementaría, por esa razón era sumamente necesario llevar a cabo un gran reforma estructural que permita racionalizar el gasto una vez por todas y generar nuevas fuentes de recursos para terminar con la amenaza del déficit.

Por todas estas razones, antes de tratar la ley de convertibilidad, debemos analizar sin lugar a duda la inflación, dado que con la ley de convertibilidad se puso fin a una de las cuentas fiscales que había tenido gran importancia gran importancia en la década del '70 y '80 que era el impuesto inflacionario, aunque este impuesto a fines del '80 había empezado a declinar.

Por ende, el objeto de analizar la inflación es demostrar como el Estado emitía dinero generando inflación para recaudar más vía impuesto inflacionario para solventar el déficit fiscal. Luego se tratara la Ley de convertibilidad, para demostrar objetivamente como terminó con el impuesto inflacionario. Por último me gustaría volver a repetir para que quede bien en claro, que en ningún modo quiero demostrar que la privatización de los ferrocarriles mediante la modalidad de la concesión se debió a que la convertibilidad puso fin al impuesto inflacionario, dado que durante la década de 1970 y 1980 el impuesto inflacionario no fue suficiente para terminar con el déficit fiscal, pero solventaba una parte del exceso del gasto. Simplemente mi objetivo es demostrar como el problema del déficit fiscal se agravaría a partir de la ley de convertibilidad (dado que pondría fin al impuesto inflacionario) si no se privatizaba.

Efectos de la Inflación

La inflación tiene efectos no neutrales en la economía. Esto significa que se producen efectos no solo en el nivel de precios, sino que también puede y suele afectar variables como la distribución del ingreso, el nivel de crecimiento, el déficit fiscal, el tipo de cambio, las exportaciones netas, etc. En esta nota explicamos los efectos de la inflación.


1- Efectos de la Inflación en la Distribución del Ingreso

La inflación tiene efectos en la distribución del ingreso debido a que ciertos sectores tienen capacidad para ajustar sus ingresos ante la inflación, mientras que otros no tienen esta capacidad. Por ejemplo los asalariados, los jubilados, los beneficiaros de planes sociales y quienes obtienen rentas mediante contratos de largo plazo, tienen poca capacidad de ajustar sus ingresos ante la inflación, mientras que por ejemplo los comerciantes o vendedores de insumos, pueden ajustar el precio de sus productos ante un aumento de su costo de vida o del nivel general de precios.

2- Efectos de la Inflación en el Nivel de Crecimiento



En las economías de mercado, los precios son claves en la asignación de recursos. La inflación es un fenómeno que desalienta muchas actividades productivas, al generar incertidumbre sobre los futuros precios. Las personas son por naturaleza adversas al riesgo, por lo que si la inflación genera un mayor riesgo para ciertas inversiones, estas estarán desalentadas, asignándose recursos hacia otros destinos, ya sea bienes que resguarden su valor ante la inflación o bien inversiones que ajusten sus ingresos con la inflación. Esta asignación de recursos es ineficiente porque está basada en parte por la incertidumbre generada por la inflación y no por consideraciones productivas.

3- Efectos de la Inflación en el Déficit Fiscal

Algunos ingresos del gobierno varían con la inflación (como la recaudación por el Impuesto al Valor Agregado) y otros no. Algunos gastos varían con la inflación (compra de insumos, inversión del gobierno) y otros no (sueldos, salarios y jubilaciones en el corto plazo). El efecto de la inflación sobre el déficit/superábit fiscal dependerá de la estructura de ingresos y gastos del gobierno. El efecto Olivera-Tanzi afirma que existe un desfase entre la determinación de un impuesto y su pago, por lo que el efecto de la inflación sobre el déficit tiende a ser positivo.


4- Efectos de la Inflación sobre el Tipo de Cambio

El tipo de cambio real tiene en cuenta el precio de los bienes extranjeros en término de los bienes locales, por lo que si el precio de los bienes locales aumenta en el corto plazo, los bienes extranjeros se hacen mas baratos en término de los bienes locales, esto significa que el tipo de cambio real disminuye. En el largo plazo, hay una tendencia a que suba el tipo de cambio nominal, debido a que en el corto plazo mejora la balanza comercial. La suba en el tipo de cambio nominal puede anular total o parcialmente la mejora en el tipo de cambio real de corto plazo.

5- Efectos de la Inflación en las Exportaciones Netas

Por lo visto en el punto 4, se puede observar que en el corto plazo las exportaciones netas suelen aumentas con la inflación, sin embargo, cuando se ajusta el tipo de cambio el efecto puede ser positivo o negativo.

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Cuando analizemos los efectos de la inflación en la economía, no solo tenemos que analizar el efecto aislado sobre cada una de estas variables, sino también el efecto en general sobre el bienestar de la población, cosa que muchos economistas solemos pasar por alto fácilmente.

Costo de Vida

EL ÍNDICE DE PRECIOS Y EL COSTO DE LA VIDA


En estos días estamos viviendo en materia de índices de precios una situación verdaderamente inédita. Por un lado el gobierno intenta demostrar que los valores surgidos de INDEC son ciertos y confiables mientras prácticamente toda la población argentina, salvo algunos sectores muy afines al oficialismo, considera a tales índices como mentirosos.

Si bien las autoridades atribuyen a esta opinión generalizada un origen mediático, ello no obsta a que se hayan intentado algunos cambios en el organismo estadístico, con el objeto de modificarla. Dicho de otro modo: para el gobierno actual la gente está equivocada, pero por las dudas intentemos algo para modificar esa creencia.

Si bien consideramos que el nuevo director ha incurrido en la práctica consuetudinaria de salir a descalificar a quienes opinan diferente y por lo tanto para nada halagüeño, ello no quita que en algún punto el gobierno parece haber acusado el golpe. Nos gustaría hacer nuestro pequeño aporte al tema, anticipando que no somos especialistas.


Los cálculos referidos al índice de precios tienen una larga historia de disensos. Recordamos en los años 80 cuando se hablaba de la inflación mensual y se indicaba un porcentaje (igual que ahora) pero partiendo de datos finales provisorios. Durante el transcurso del mes siguiente, tales datos se cambiaban por los definitivos, y éstos daban siempre un índice mayor que aquel provisorio original, pero entonces se tomaba el provisorio del mes siguiente contra el definitivo, dando lugar a un nuevo porcentaje que dejaba colgada esa diferencia del mes anterior. Esto evidentemente no era casualidad. El porcentaje consignado terminaba, mes tras mes, siendo menor al real, que uno solamente podía encontrar en las publicaciones completas de los índices.

Lo mismo ocurría en tiempos del índice de precios descarnado, es decir, aquel que no incluía a la carne. Un verdadero galimatías estadístico que pretendía medir el índice de precios sin considerar el consumo de carne. Una entelequia de aquellas.

Pero en definitiva lo que siempre se ha sostenido es que el índice de precios, que antes era denominado costo de vida, mide en realidad la inflación en la Argentina, cuando en rigor no es exactamente así. Veamos la definición que hace Wikipedia de esto:


El costo de vida es un concepto teórico que representa el valor o coste de los bienes y servicios que los hogares consumen para obtener determinado nivel de satisfacción. El índice de coste de vida es un índice que indica cuánto se incrementa (o modifica) el costo de los hogares para mantener un mismo nivel de satisfacción

El cálculo del coste de vida es un problema difícil porque se basa en conceptos subjetivos (nivel de satisfacción). Como estimador del costo de vida suele usarse el IPC (índice de precios al consumidor) sabiendo que hay diferencias importantes: el IPC se refiere a una canasta fija de bienes y servicios; en un costo de vida debería tenerse en cuenta que los hogares hacen sustituciones de productos cuando los precios cambian.

Más allá de las diversas triquiñuelas que puede haber utilizado el INDEC en estos años, es interesante analizar un poco el fondo del problema. Nosotros no somos especialistas en estadística pero sí conocemos bastante respecto de la forma de cálculo y las diversas ponderaciones.

La realidad es que el índice de precios parte de la base de una composición determinada del consumo hogareño promedio, que es lo que la enciclopedia llama canasta fija de bienes y servicios. En cambio el indicador del costo de la vida debería tomar las sustituciones cuando los precios se modifican. Tales sustituciones deberían a su vez reflejar si se produce un cambio o no en el nivel de satisfacción y ésta medirse en términos de costo. Tarea compleja si las hay. No es lo mismo satisfacerse la sed con una gaseosa que hacerlo con agua de la canilla. La sed se satisface igual, pero el plus que representa beber una refrescante bebida edulcorada se resigna en el segundo caso. ¿Cómo se mide esto?.

Al menos por lo poco que ha trascendido del mecanismo utilizado por el INDEC para medir los precios hoy en día, más parece que estuviera intentando calcular el costo de la vida y no el índice de precios al consumidor. Aún así, ni uno ni el otro representan con exactitud el índice de inflación, que es la suba generalizada de precios (o su baja en sentido inverso) y no contempla los cambios en las preferencias.

En efecto, por lo que se sabe la mecánica elegida consiste en sustituir determinados bienes del índice cuando éstos, por razones estacionales, por ejemplo, son reemplazados por otros en el consumo general. A simple vista uno puede colegir que esto puede dar lugar a cualquier cosa a menos que la metodología sea ampliamente difundida y conocida número por número (como era antes de la intervención del organismo en enero de 2007) y por lo tanto factible de ser cuestionada o al menos permitir las comparaciones sobre bases reales.

Pero si el reemplazo de bienes y servicios afecta el nivel de satisfacción lo que en verdad estamos intentando medir, insistimos, es el costo de la vida y no el IPC o la inflación. Incluso si no modificamos la canasta, como debería ocurrir en el cálculo del IPC, la suba del mismo tampoco refleja la inflación de manera precisa e inocultable. Puede haber cambios de precios relativos que al mes siguiente vuelven a cambiar provocando en tal caso indicadores negativos. Aún así, se aproxima más al concepto de moneda de valor corriente el IPC.

Imaginemos por un momento un escenario donde todos los bienes y servicios que requiere la economía fueran, por ejemplo, carne y arroz. Supongamos que la canasta está compuesta únicamente por tales bienes y que tiene un costo de $ 100.- al mes. A su vez, supongamos que la ponderación indica que las familias consumen mensualmente $ 50.- de carne y $ 50.- de arroz. Simplificando todavía más las cosas, podemos decir que el índice (que no es la misma cosa que el porcentaje de cambio) es 100.

Ahora supongamos que al mes siguiente la carne sube de precio y por lo tanto para consumir la misma cantidad que en el mes anterior necesitamos $ 60.-. Supongamos también que el precio del arroz no varió. Si el consumo fuera el mismo en el segundo mes, el costo total ascendería ahora a $ 110.- , el índice sería 110, y el incremento porcentual sería, obviamente, del 10%.

Si las familias modifican en este segundo mes sus hábitos en razón de la suba del precio de la carne, podría ocurrir que consuman ahora menos carne y la misma cantidad de arroz, es decir $ 50 de carne y $ 50 de arroz. Pero como la carne en este segundo mes es más cara, las familias comerían menos.

En la práctica nada es absoluto, claro está. Y ésta situación puede darse en determinados sectores que por ahí pueden disminuir un poco los consumos dado que tal vez descuidan un poco los volúmenes y tienen sobrantes que arrojan a la basura. En cambio aquellas familias con menores recursos probablemente pasen a consumir todavía menos carne para pasarse al arroz y mantener el gasto total en $ 100.- consumiendo lo necesario aunque en proporciones diferentes.

Sin embargo, tanto en un caso como en el otro lo que podemos sí observar es que la calidad de vida sufrió una merma. Unos tienen que cuidarse más, otros tendrán que comer comida diferente y probablemente de menor calidad para no excederse en su gasto mensual.

Insistimos en que estamos dando un ejemplo y agregamos que no pretendemos juzgar la calidad nutricional de los alimentos que elegimos para esta abstracción teórica. Podría ser al revés, que aumentara el precio del arroz y bajara el de la carne. Pero como la carne es más preciada por los argentinos en general, nos parece más acertado suponer que es ésta la que aumenta su precio y que privarse de ella para reemplazarla por arroz produce una merma en el grado de satisfacción. Si el arroz subiera su precio y la carne permaneciera sin cambios, también habría un porcentaje de baja en la satisfacción, obviamente.

Siguiendo con el caso, podemos ver que si el INDEC toma la variante de suponer que la gente consume ahora más arroz y menos carne hasta la concurrencia del gasto mensual, este seguirá siendo de $ 100.- Y si esto es así, el IPC no habrá variado y por lo tanto aquello que común y erróneamente se denomina índice de inflación sigue inalterable. La falacia es evidente.

Podemos agregar más factores, tales como por ejemplo que al bajar el consumo de carne como consecuencia de la suba de su precio, éste tienda a bajar, mientras que ante el incremento del consumo de arroz el precio de éste tienda a subir. Esto efectivamente ocurrirá en una segunda instancia, pero no queremos hacer un análisis que resulte brumoso y complejo, sino más bien apuntamos a lo evidente.

Normalmente la ponderación de la canasta es muy compleja e integrada por una enorme gama de bienes y servicios, que se agrupan por rubros, que a su vez se considera que insumen un porcentaje del gasto total de cada familia. Y esos rubros están integrados por subrrubros y luego por bienes y servicios en proporciones preestablecidas. Tocar esta canasta y hacerlo todos los meses en función de estacionalidades o cambios ocasionales no solo no está en su definición, sino que no nos parece lo más acertado para medir el IPC. Además, como decimos, si la metodología no está plenamente determinada y es difundida cabalmente todos los meses, es imposible saber qué se tocó y qué no. Y en definitiva, las bases terminan siendo no comparables entre un mes y el otro.

Pero volvamos a nuestro ejemplo: si una familia tenía por costumbre consumir en un mes una determinada cantidad de carne y de arroz y debió modificarla como consecuencia del cambio en los precios, su calidad de vida ha bajado. Es decir que su costo de vida ha subido, ¡y sin embargo su gasto total ha sido el mismo!

Por eso, si el INDEC modifica la composición de la canasta todos los meses en función de cambios estacionales o lo que fuere, aunque lo haga con total honestidad y a conciencia, no está midiendo el índice de precios. Y por lo tanto no está suministrando la información que dice suministrar.

En el ejemplo sencillísimo que elaboramos ¿ha habido o no incremento del IPC?, sí lo ha habido: fue del 10%. ¿Y el costo de vida? podríamos decir sobre él que si una familia pretende mantener la misma calidad de vida debería incrementar su gasto un 10% y por lo tanto también esa sería la suba de su costo de vida. ¿Y cuándo el costo de vida se vería afectado de manera diferente?, cuando pese a la sustitución de bienes no pudiera sostenerse el valor 100. Es decir, cuando aún consumiendo más arroz y menos carne necesitáramos más de $ 100, para mantener la supervivencia. Pero esto tampoco es del todo cierto. Porque la sustitución en sí misma implica como decimos una merma en la calidad de vida que en la práctica es muy difícil de medir.

Lo que sí queda perfectamente en claro, es que la modificación de los componentes de la canasta lleva a que el índice de precios arroje incrementos menores en tanto y en cuanto encontremos los sustitutos. Y solamente se reflejaría un incremento cuando tales sustitutos, los que fueren, también aumentaron sus precios.

Por lo tanto y en nuestra opinión, el INDEC no está suministrando la información que se le requiere sino otra. Y este es el nudo gordiano del problema que nos ocupa.

La variación en el valor de la moneda no depende de sustituciones o de cambios de precios relativos, sino de la suba o la merma generalizada de precios. Es esto lo que hay que medir y no otra cosa. Y es esto lo que no está ocurriendo, según lo que las propias autoridades del INDEC afirman.

Buenos Aires, 15 de agosto de 2009

HÉCTOR BLAS TRILLO

Las Heras 648 - 1704 Ramos Mejía (B.A.) (011) 5254-5820

Inflación

Inflación es el aumento sostenido y generalizado del nivel de precios de bienes y servicios y factores de producción a lo largo del tiempo. Otras definiciones indican que la inflación es un alza persistente del nivel general de precios o la disminución persistente del poder adquisitivo del dinero.


En la práctica, para medir las variaciones de los precios en una economía se utilizan índices de precios, como son el índice de precios al consumidor o el índice de precios mayoristas. Por ejemplo, si el índice de precios al consumidor aumenta de 100 a 110 en un año, se suele afirmar que la inflación es del 10% anual. Entonces, la definición matemática de la inflación es:

Inflación = ( IPC1 - IPC0 / IPC0 ) x 100

Donde:

- IPC0: Índice de Precios al comienzo de un período determinado.

- IPC1: Índice de Precios al final de un período determinado.

Por ejemplo, si deseamos calcular la inflación durante el año 2008:

Inflación2008 = ( IPCenero 2008 - IPCenero 2009 / IPCenero 2008 ) x 100

Entonces, la medida de la inflación depende de los métodos para el cálculo del índice de precios al consumidor.

Causas de la Inflación



A veces las causas de la inflación son mencionadas como tipos de inflación, por ejemplo, se suele mencionar inflación de demanda.

Demanda

Inflación de demanda

- Aumento de la demanda de ciertos productos sin un aumento de la oferta de los mismos. Por ejemplo se puede dar el caso de un fuerte aumento de la demanda internacional de ciertos productos, como la soja, el maíz y la carne, que eleve los precios internos de estos productos.

- Aumento de la demanda global mayor que la oferta global. En períodos de crecimiento económico, el ingreso real de ciertos sectores puede aumentar lo suficiente para que aumenten su demanda de bienes finales sin un aumento correlativo de su oferta, lo que puede llevar a un aumento de la inflación.

Oferta

- Expansión monetaria excesiva. (Inflación monetaria). Cuando la oferta de dinero (que depende de la cantidad de dinero y de su velocidad de circulación) aumenta mas que la demanda de dinero (que depende del nivel de actividad económica).

- Inflación de costos: puede deberse a aumento del precio de insumos como el petróleo, aumentos de costos salariales debido a pujas distributivas, etc.


Inflación inercial

- Gran cantidad de precios dentro de una economía son fijados con anterioridad a la efectivización de la transacción, ya sea bienes finales como el stock de un supermercado que se mantendrá durante varios días o semanas, o contratos como alquileres o salarios que se pueden mantener fijos durante uno o dos años. En estos casos, los agentes realizan una estimación de la inflación futura, que es utilizada para el cálculo de los precios. Generalmente, mientras más elevada haya sido la inflación pasada, mayor será la estimación de la inflación futura que realicen los agentes, lo que repercutirá en el precio final. Así, la inflación inercial es aquella que está explicada simplemente por la inflación pasada.

Múltiples causas de la inflación

La inflación usualmente es explicada por varias causas simultáneamente. Por ejemplo, se puede presentar una inflación de costos debido al aumento del precio internacional del petróleo, sumado a un aumento de la oferta monetaria para mitigar los efectos de la crisis internacional.

Ajuste por inflación

El ajuste por inflación es el proceso mediante el cual un índice o variable nominal es transformado a su nivel real mediante la aplicación de una fórmula, que incluye a la inflación. El ajuste por inflación también se denomina indexación, cuando un precio se incrementa de modo proporcional a un índice de precios; por ejemplo el monto de un alquiler se multiplica por la inflación. Cuando el proceso es el inverso, es decir, se disminuye el nivel de una variable para poder compararla con su nivel en un período de tiempo diferente, el ajuste por inflación se denomina deflactación; por ejemplo, para comparar el PBI nominal del año 2009 con el PBI nominal del año 2008, es necesario que el PBI del año 2009 se ajuste por la inflación anual durante el año 2009 (PIB2009 / (1 + Inflación2009 )

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